'Zapeando' llegó a la parrilla de laSexta el 18 de noviembre de 2013, pero siendo un programa bien diferente al que hoy conocemos. El programa capitaneado por Frank Blanco nació como una tertulia sobre televisión en la que expertos como Santi Villas, Celia Montalbán o Susana Guach analizaban las series, programas y realities del momento desde sillones alrededor del pantallón.
El programa recogía así, en cierto modo, el espíritu del extinto 'Lo + plus', con invitados con los que repasar de forma distendida los estrenos y momentos más destacados de la televisión. Esta propuesta no consiguió conquistar a la audiencia en sus primeras semanas, hecho que llevó al equipo del programa a introducir paulatinamente cambios en su estructura y concepción.
En palabras de Frank Blanco una de las claves fue "incorporar una mesa central sobre la que articular los temas", algo cierto ya que con ella llegó el guion al programa. "Antes teníamos una guía de los temas que había, pero era una tertulia, ahora el programa está guionizado y la gente que viene sabe defender esos guiones y sabe colocar chistes a la hora de leer ese guion", comentaba su director a FormulaTV.com con motivo de las 100 emisiones de 'Zapeando'. Con este vuelco el programa fue calando cada día más entre el público, que poco a poco se habituó a sintonizar la sobremesa de laSexta.
Logo inicial del programa
De estrenarse por debajo del 4% a estabilizarse por encima del 7%
Casi dos años después de su estreno 'Zapeando' se ha consolidado como uno de los programas clave en la vertebración de la parrilla de laSexta. Con un programa despuntando en la mañana ('Al rojo vivo') y uno en el access prime time ('El intermedio'), la cadena necesitaba terminar de apuntalar su estructura diaria, algo que ahora ha logrado gracias al asentamiento de 'Zapeando'.
Con 450 emisiones a sus espaldas ya, 'Zapeando' ha logrado consolidarse como un referente de los programas de zapping y humor en televisión gracias a rodearse de un gran equipo que ha sabido adaptarse a las demandas de la audiencia. Recientemente Quique Peinado hacía hincapié precisamente en la importancia del equipo que no se ve, pues "acertó la cadena al mantener el programa y cambiar la idea original, acertó la productora con los cambios, y lo hizo con mucha naturalidad e incorporando a la gente correcta. El éxito y la evolución del programa es más el acierto de los que están detrás que de los que están delante".
Los colaboradores brillan con un gran guion
El cambio en la esencia de 'Zapeando' se trasladó también a su equipo de colaboradores, manteniendo solo a Miki Nadal y Quique Peinado de entre los originales del programa. Con este giro hacia el humor se apostó por gente más ligada a la comedia, o con una mayor vis cómica, pero sin descuidar tampoco la base televisiva. Así fueron llegando Ana Morgade, Sara Escudero, Cristina Pedroche, Leo Harlem, Anna Simón o Irene Junquera, en otros.
'Zapeando' tras su cambio de rumbo
Con ellos sobre la mesa se estableció una química y una dinámica que traspasa la pantalla, un buen rollo que fue capaz de lograr hacer cómplice al público, incorporándolo cada día como si de un colaborador más se tratase. Para ello, mediante el hashtag del programa, se involucra al espectador en los temas del día, haciéndolo partícipe en bromas, montajes, videoclips, juegos o cualquier otro asunto que esté de actualidad a nivel televisivo.
Este buen hacer de sus colaboradores es lo que hoy convierte a 'Zapeando' en EL DESTACADO de la semana, pues han demostrado una vez más ser capaces de hacer frente a cualquier reto. El último, ponerse al frente del espacio durante las vacaciones de Frank Blanco. Este experimento ha servido para dar valor al trabajo que cada uno desempeña en el programa, recompensando su entrega con una emisión bajo su batuta en la que poder imprimir su carácter personal al espacio. Y lo cierto es que han aprobado con nota el examen.
'Zapeando' puede echar la vista atrás con la certeza del trabajo bien hecho, habiendo sido capaz de identificar sus debilidades y potenciar sus aciertos, transformándose en orden de conquistar a una audiencia cada vez más exigente. Por el camino ha conseguido además crear su propio universo identificable y reconocible, una marca asociada al buen rollo que ha logrado impulsar a sus rostros a grandes formatos, como es el caso de las 'Campanadas', Cristina Pedroche en 'Pekín Express", Manu Sánchez en 'El último mono' o próximamente Ana Morgade en 'Tu cara me suena'.
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Un éxito a largo plazo que bien merece reconocimiento.