¿Tiene sentido 'Hermano mayor' sin Pedro García Aguado?

'Hermano mayor' es un programa icónico de la tradicional noche de formatos de coaching de Cuatro, por lo que la noticia de la salida de Pedro García Aguado del programa sembró la duda sobre la continuidad del mismo. Fruto de la trayectoria y el éxito del programa la cadena apostó por el espacio, incorporando un nuevo rostro, el boxeador Jerónimo García. En la redacción de FormulaTV.com hay opiniones enfrentadas sobre la conveniencia de la continuidad de 'Hermano mayor' y por ello debatimos sobre el programa en el recién estrenado "Ring de FormulaTV".

'Hermano mayor' debe finalizar porque...

El docudrama es un programa íntimamente ligado a su protagonista, Pedro García Aguado, y su marcha hará que el espacio pierda gran parte de su identidad. 'Hermano mayor' no será 'Hermano mayor' sin Pedro. Al igual que 'Viajando con Chester' no es 'Viajando con Chester' desde la marcha de Risto Mejide. Mejor o peor, pero otra cosa, algo que sucederá con el programa de Cuatro al cambiar de rostro. Por muy carismático que pueda ser su sustituto, el público ya tiene identificado el programa con García Aguado, y las comparaciones ya se sabe que son odiosas.

Está claro que, por la audiencia del programa a lo largo de sus siete temporadas, Cuatro tiene que intentar mantener la marca tan íntimamente ligada a su identidad, pero volviendo al ejemplo del Chester, será complicado que los fieles del programa no vayan desconectando al encontrarse con algo diferente a lo que están acostumbrados. Porque para muchos la clave puede estar en los casos que toca el programa, pero la fórmula "adolescente con agresividad-choque de realidad con el coach-cambio y reconciliación familiar" se agota si no hay un protagonista con carisma que impregne su espíritu al programa, saque de cada situación una buena reflexión y cree nuevas tácticas para enfrentarse a los diferentes conflictos que se planteen. Y, por supuesto, una buena historia de superación detrás que ayude a que el espectador desde su casa empatice con el coach. Pedro lograba todo eso, Jerónimo todavía tiene que conseguirlo.


Las tácticas empleadas en el programa pueden ser aprovechadas por el espectador en su día a día, siendo este punto uno de los aspectos considerados como una buena labor social por parte del espacio, pero a la vez la exposición de estos casos también tiene un reverso de mal ejemplo para muchos jóvenes que pueden considerar "graciosas" las actitudes que aquí se muestran. En un programa de estas características la función educadora es primordial, pues sino sería simplemente hacer espectáculo de desgracias familiares, pero pudiendo producirse todo lo contrario en algunos espectadores, quizá poner fin a 'Hermano mayor' aprovechando la salida de su coach habría sido lo más acertado.

Por todo esto, la esencia del programa es el propio conductor del mismo, Pedro García Aguado, quien ha sabido construir sobre su persona una marca de referencia en la televisión de nuestro país. Honesto, carismático, con recursos y capacidad de maniobra ante cualquier situación y, sobre todo, mucha empatía con todos los integrantes de la familia a ayudar. Un coach ejemplar que ha dejado el listón demasiado alto. 'Hermano mayor', sin Pedro García Aguado, será una copia de sí mismo. Tendrá que demostrar si, al menos, es una buena copia.

'Hermano mayor' debe continuar porque...

Bien es cierto que García Aguado ha supuesto la cara visible del programa producido por Plural Entertainment, del mismo modo que Rocío Ramos lo es de 'Supernanny'. La audiencia tendrá que adaptarse al nuevo coach, el boxeador Jerónimo García, algo que no tiene por qué convertirse en un problema. Con este cambio, 'Hermano mayor' se renueva y la llegada del que fuera campeón de España de boxeo puede traer un nuevo carisma con una manera renovada de tratar a los conflictivos jóvenes que protagonizan 'Hermano mayor'.

Hay varios casos de programas que han seguido funcionando e incluso han mejorado su audiencia con el cambio de presentador. Sin salir de la cadena, el mayor ejemplo lo ofrece 'Las mañanas de Cuatro'. Estrenado en 2006, el espacio matutino comenzó siendo conducido por la periodista Concha García Campoy. Pasó el testigo en 2010 a Marta Fernández y, aunque la audiencia se resintió levemente, no fue nada alarmante y supo mantenerse. El verdadero salto lo protagonizó Jesús Cintora, que se puso al frente en 2013 consiguiendo en aquella temporada un estupendo 8,1%, dato nunca antes visto.


Por otro lado, hay que recordar que el pilar del programa son las historias, los adolescentes y sus familias que acuden a 'Hermano mayor' pidiendo ayuda para salir de sus dramas y reconducir su vida. La labor de enderezar el árbol torcido la pueden realizar otros a parte de Pedro García Aguado y de manera igualmente satisfactoria. El programa no puede reducirse a un "personality show" porque no nació con ese objetivo y nunca lo ha sido. Las historias que ha presentado a lo largo de sus siete temporadas han enganchado a la audiencia y han despertado su interés. Son situaciones duras pero reales y también necesarias. 'Hermano mayor' realiza una labor social al acercar a todos a realidades que pueden resultar ajenas pero que no dejan de estar presentes en la sociedad.

Sin duda, una de las razones principales por las cuales Cuatro no debe dejar escapar 'Hermano mayor' es porque se ha convertido en una marca de la cadena. Desde que se estrenara en 2009 la audiencia ha respaldado el formato temporada a temporada. La última emitida ha sido la tercera con mejor media al registrar un 11,9% con 2.065.000 de espectadores, solo por detrás de la primera temporada (14,6%) y la tercera (12,1%). Supera con creces la media de la cadena por lo que, aunque los datos se resientan un poco con la llegada de Jerónimo García, hay margen de sobra para que 'Hermano Mayor' se mantenga como uno de los huesos fuertes de Cuatro.



Estos son nuestros argumentos, tuya la respuesta. ¿Tiene sentido continuar con 'Hermano mayor' sin Pedro García Aguado?