La segunda gala de 'Gran Hermano 16' descubrió algunos de los secretos escondidos desde su estreno el pasado domingo mientras que se concibieron otros. Los concursantes pudieron disfrutar de una interpretación al estilo de "Piratas del Caribe" en la que estaba infiltrado Muti, el "concursante invisible". El sevillano ha pasado estos cuatro días encerrado en una habitación contigua a la sala de juegos de la casa, desde la que podía observar a sus compañeros y hablar con ellos a través de un micrófono, pero sin ser visto. Una gran sorpresa se llevaron los habitantes de la casa cuando descubrieron que el sevillano era de raza negra.
Cuando parecía que su secreto (su identidad) había sido desvelado, el súper le encargó a Muti un nuevo enigma: conocerá un pasadizo secreto por el que podrá acceder a una estancia de la casa en la que su cometido será observar a sus compañeros sin ser observado.
Suso, Maite y Han: se desmontan sus secretos
Por otro lado, los concursantes han pasado estos primeros días del concurso cavilando sobre los secretos de sus compañeros. Por ejemplo, una de las teorías que más han sorprendido a los espectadores ha sido la de Suso: él ha apostado que Sofía (que tiene 19 años) es la hija de Raquel (29 años).
Mercedes Milá les puso en pantalla a sus concursantes algunas de estas teorías, pero no todas eran ciertas. Quien sí acertó fue Vera, que tenía claro que Han sabía hablar español. De esta manera, el chino pudo decir sus primeras palabras en nuestro idioma: "las divas nacen, no se hacen".
Han, el chino granadino
Sin embargo, el súper, al igual que hizo con Muti, encargó a Han guardar un nuevo secreto: durante la prueba semanal los concursantes deberán acumular una serie de monedas que Han tendrá que robar a escondidas de los demás.
También se desveló el secreto de Maite y Suso: en pantalla aparecieron las imágenes del estreno del concurso y el momento en que los ficticios madre e hijo descubrían, de manos de Mercedes, su falso parentesco. Hay que recordar que Maite sigue guardando un secreto: Sofía es su verdadera madre.
Vera y Niedziela, los dos concursantes que habían descubierto sendos secretos, recibieron la recompensa prometida: en la nueva prueba semanal, un candado cierra la nevera de manera permanente. Los concursantes deberán comer como piratas, excepto la pareja que comparte secreto (un jardín escondido), que podrán alimentarse de lo que quieran.
La polémica de la semana: Maite sin apoyos
La decimosexta edición del reality ha empezado fuerte. Ya en la segunda noche del concurso, Maite, la veterana del grupo, echó la bronca a sus compañeros por sus dificultades a la hora de dormir. El dormitorio de la casa no apaga sus luces si todos los concursantes que se encuentran en la habitación no están en disposición de dormir. Mientras Maite intentaba dormir, algunos de sus compañeros permanecían a su alrededor conversando. Esto ocasionó una gran bronca en la casa en la que la pamplonesa, que andaba casi desnuda por la casa, puso a todos los concursantes en su contra.
Maite, la polémica concursante
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Por otro lado, Mercedes preguntó en plató a la defensora de Maite cómo estaba viendo el comportamiento de su amiga y ésta respondió que se le estaba yendo de la manos, aunque defendió que no estaba haciendo un papel y que creía que su actitud se debía a su malestar por no poderse acercar demasiado a su verdadera hija, Sofía.