Hay relaciones que duran un verano y otras que son como una tormenta de verano. La de Suso y Sofía se acerca a lo segundo a juzgar por los altibajos que ha protagonizado su affaire en menos de tres semanas. La última bronca ha provocado los celos de la joven cuando el catalán ha confesado que prefiere que se vaya ella antes que Raquel dado que ambas están nominadas por segunda vez consecutiva.
Antes las palabras de Suso, que ha dejado claro que ya solo quiere a la hija de Maite como amiga, esta ha dirigido sus dardos contra Raquel intentándole sacar información a Muti sobre si su amado tiene intenciones con ella. Su amigo no ha soltado prenda, lo que ha hecho pensar a Sofía que a Suso "le gustan todas", motivo por el cual ha empezado a despotricar contra todas las féminas: "Son unas feas y unas guarras. Yo sólo confío en mi Muti y en Marta". También ha mostrado su opinión contra aquellos a los que considera enemigos: "A Quique no le quiero aquí y a Marina tampoco. A Raquel menos porque es una guarra. ¡No quiero guarras en mi vida!. Que se vaya ella o que me vaya yo, pero yo no quiero seguir aquí como una pringada".
Pese al arranque de ira inicial, la navarra se ha derrumbado al reconocer que se siente fea, aunque, como si de una montaña rusa se tratase, se ha venido arriba haciendo una comparativa con el resto de chicas de 'Gran Hermano' para sentenciar que se "come a todas".
Sofía, una montaña rusa en 'Gran Hermano'
Suso: "Yo aquí ya he demostrado que soy un hombre"
En ese momento y, con la intención de caldear más los ánimos, Carlos ha comunicado a Sofía que Suso estaba en la cama con Raquel poniéndole la pierna encima. Por ello, Marta, rauda y veloz, ha corrido a cotillear para darle parte a su amiga, que finalmente ha ido comprobarlo con sus propios ojos y al entrar a la habitación ha exclamado: "¡Que viva la guarrería!". Sorprendido, Suso ha respondido: "Yo puedo hablar con Raquel de lo que me da la gana, estábamos hablando de la vida fuera". Para apoyar sus palabras y sacando orgullo de macho alfa ha sentenciado que él ya ha "demostrado que es un hombre".
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Marta tampoco se ha quedado callada y, en defensa de su amiga, ha tildado a Raquel de "lapa" y "enferma", a lo que la última, para defenderse la ha llamado "cure". La canaria no ha podido callarse: "Yo no te tengo envidia. Estratega, mala pécora", y le ha pedido a Sofía que se uniera a la discusión, a la cual ha puesto punto y final con un contundente: "Yo no hablo con guarras".