Maite ha sido una de las concursantes más polémicas de 'Gran Hermano' y su expulsión del programa ha hecho que ya se peleen por ella muchas discotecas nacionales. Dentro de la casa de Guadalix, Maite cobraba 1.000 euros a la semana, pero en cada bolo la exconcursante se embolsa 800 euros por bailar y fotografiarse con los clientes del local durante solo dos horas, de acuerdo a las informaciones vertidas por Bluper.
A este precio hay que sumarle los gastos de desplazamiento y alojamiento, pero también hay que tener en cuenta que Maite debe pagar el 30% de sus ingresos a su agencia de representación, Telegenia, propiedad de Endemol (distribuidora del reality).
La primera sala en hacerse con la navarra ha sido la barcelonesa InTime, aunque ya tiene más fechas cerradas con otros locales, siendo la Sala Budha en Illescas (Toledo) la siguiente en la lista. Maite ha sabido rentabilizar su paso por 'Gran hermano', aunque no es la única concursante, puesto que hay varios habitantes de la casa que comentan dentro de ella lo que pueden llegar a ganar cuando sean expulsados.
Maite
Es uno de los precios más altos en comparación con los exconcursantes de 'GH 15'
Sorprende el alto precio que se paga por Maite, siendo la primera expulsada de 'GH 16', cuando el año pasado el primer expulsado, Paco, cobraba 600 euros, aunque es cierto que el caché de cada concursante viene determinado por el poder de atracción de público que generen, por lo que no es de extrañar que la polémica concursante genere ese nivel de ingresos.
Ya hay algún vídeo en las redes sociales del espectáculo que ofrece Maite en las salas (donde se puede ver cómo ella y un chico bailan explícitamente sexual sobre el escenario) y parece que visitará todavía bastantes más sitios a juzgar por el show que desarrolla.
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