Carolina es una de las concursantes de la decimosexta edición de 'Gran Hermano' que más desapercibida pasa ante el público, tanto para lo bueno como para lo malo. Sin embargo, tras la revelación de su supuesto don secreto (la capacidad de ver muertos), las noticias sobre la concursante se suceden dentro y fuera de la casa.
El pasado 18 de octubre, Carolina tuvo que sincerarse con Marta para explicarle los motivos por los cuales no podía dormir en la otra habitación: allí cohabitan dos fantasmas y no son suyos, uno es de Sofía, mientras que el otro es de Marina, siendo los dos espíritus varones.
La confesión más sorprendente de la catalana fue que el fantasma de Suso es el más constante de los tres, siendo también varón. Su intuición le ha llevado a pensar que podría tratarse del padre del catalán, que murió cuando el motero era un niño. Carolina ha afirmado que ha sido él quien ayudó al catalán a encontrar el disco de Juan Magan que le otorgó la inmunidad en la pasada gala.
Carolina
Carolina podría tener otro gran secreto
Durante la despedida de Quique, expulsado y en plató, la catalana dejaba entrever que podían haber un lazo de sangre que les uniese. Quique le recordaba de forma cariñosa a Carolina que seguía teniendo su pulsera, a lo que ella respondía con un efusivo "te quiero un montón, te la devuelvo cuando salga'". Durante el momento de emoción, a la propia catalana se le escapaba un "dale un beso a nuestra madre".
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Si bien es cierto que entre ambos mensajes ella se mostraba nerviosa, y que también le envío previamente un beso "a su madre", este desliz ha hecho que los más seguidores del programa desconfíen de su verdadera relación. Ya en el estreno del programa el "Super" le indicó a Marta que había 6 relaciones personales entre los secretos, algo que siempre ha estado en boca de todos ante la posibilidad de que la falsa relación entre Maite y Suso formase parte de estos lazos. Este lapsus, fruto de la emoción y los nervios, apunta ahora a que Quique y Carolina podrían ser hermanatros o incluso hermanos. De ser así, hay que reconocer que han sabido ocultarlo muy bien, hasta la sexta gala del programa.