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El capitán de "la nave del misterio", Iker Jiménez, ha desvelado en una entrevista para El Mundo alguno de los secretos más ocultos de su pasado en la radio y de sus inicios en televisión: ofertas rechazadas en grandes programas, salidas de otros con más pesar que ánimo y nuevas aventuras para el futuro de 'Cuarto milenio'
Iker estuvo a punto de trabajar en el todopoderoso 'Crónicas marcianas', pero su ética le hizo desistir del proyecto: "Dije que no porque para mí mis testigos son lo principal y veía que los trataban como a una mierda. Yo no me río de todo esto, en mi vida me reiré de un testigo que ha confiado en mí. Los de Crónicas me decían: 'Pero esto es tele, tío. Estás loco si lo rechazas...'. Y yo les contesté: 'Pues si ésta es tu tele, haz tú tu tele. Yo amo estos temas. Vivo por estos temas y quiero convertirlos en otra cosa. No sé cómo lo haré, pero no será saliendo en 'Crónicas marcianas''", confiesa Jiménez.Su programa "Milenio 3" en la cadena SER vio el final de sus días debido a el cansancio acumulado y al nacimiento de su hija, aunque él prefiere ser más crítico: "Si te cuento las campañas de desprestigio que nos han hecho... Hasta boicoteos de los mismos compañeros de emisora. Tengo un aprendizaje tan grande de hostias y de palos que me he blindado", asegura mientras afirma que siguió en Prisa por la gente y por los buenos salarios.
Paolo Vasile, el culpable de su entrada en Cuatro
Cuenta que decidió entrar en Cuatro por la disposición que vio en Mediaset, en particular en Paolo Vasile: "Vi que se iba a ir a la porra todo, familia, tele, radio, todo. Y hubo cierta sintonía con Paolo Vasile. En el momento de la firma, me dio la mano y me dijo: «Oye, tío, estoy contento de que estés conmigo. Estoy orgulloso de que estés conmigo». Hostias. Esas son las palabras que quería oír".
Si Iker Jiménez se cree todo lo que cuenta o si, por el contrario, se limita a transmitir a la audiencia historias guionizadas o poco contrastadas, es algo que entra dentro de su parecer y del de su público, pero por lo que él mismo dice, se siente bastante seguro de lo que hace: "La clave de todo es que seguimos creyendo en lo que hacemos".