ENTREVISTA FORMULATV.COM

Antonio Hernández ('Constructor a la fuga'): "Cada constructor reaccionaba de una manera. Ha habido momentos delicados"

El rostro del nuevo programa de laSexta habla de cómo ha sido la experiencia: "Ha llevado tiempo. Había veces en las que no sabíamos si íbamos a terminar".

Por Xabier Migelez El 10 de Noviembre 2015 | 10:02

Antonio Hernández

'Constructor a la fuga' es el nuevo proyecto de laSexta dispuesto a ayudar. Tras 'Pesadilla en la cocina' o 'El jefe infiltrado' llega el turno del sector de la construcción, un mundo muy agitado tras la explosión de la burbuja inmobiliaria y la profunda crisis del ladrillo que vive actualmente España. Al frente del nuevo equipo se encuentra Antonio Hernández, un profesional de más de 20 años de experiencia "dispuesto a devolver la ilusión a propietarios decepcionados".

Su función será ser el nexo de unión entre los denunciantes, cuya situación es límite, y los desaparecidos constructores con los que se enfrentará exigiendo responsabilidades: "Ha llevado mucho tiempo encontrar a los denunciados y había veces en las que ni siquiera sabíamos si íbamos a poder terminar el programa. El tema de las obras se complicaba también por la meteorología, así que no ha sido fácil".

Pero, a pesar de la dificultad, el albañil y constructor no puede estar más feliz con la experiencia. Formulatv.com ha querido hablar con él para conocer la adaptación del exitoso 'Cowboys Builders' que viene de la mano de Warner Bros ITVP España y que promete dar mucho que hablar: "Se busca al constructor para que, si ha cometido un error, lo reconozca. Ninguno de los constructores me ha recibido con agrado. Cada uno de ellos reaccionaba de una manera y ha habido momentos delicados".

¿Cómo llegas de constructor a presentador de 'Constructor a la fuga'?

Me enteré de todo esto y me presenté directamente a un casting. Me lo tome un poco como un juego. Me imaginaba que esto iba a ser muy grande, con todas las cámaras... tenía mi propia idea. Quizás fue todo un poco por curiosidad, me lo tomé como un juego y ¡mira dónde estoy!

De esa idea que comentabas que tenías al comienzo a lo que ha sido, ¿has notado mucho cambio?

Bueno, ya hablábamos de que me picaba un poco la curiosidad, me lo tome como una experiencia tipo "voy a presentar, voy a conocer el tema de las cámaras"... Luego me dí cuenta de que todo es más sencillo de lo que pensé, que no tiene nada que ver. Hay un equipo muy grande detrás, una oficina enorme, pero nada que ver. Ten en cuenta también que no conozco a la cadena, que siempre he trabajado para la productora y es algo más pequeñito.

El proceso de "denuncia" ha tenido su hueco, en otra temática, con 'Pesadilla en la cocina' donde se va a un trabajo mal hecho para solucionarlo. ¿Se parece a este nuevo proyecto en algo?

El programa es cierto que sí se puede parecer a 'Pesadilla', de hecho son de la misma gente, la misma productora. Pero solo se puede parecer, como bien dices, en el proceso, en la recogida de denuncia con el objeto de arreglar la situación. Realmente allí se arregla un restaurante y aquí es una familia.

Hernández es el rostro principal de 'Constructor a la fuga'

¿Cómo es el proceso que iniciáis en cada caso del programa?

Lo primero que se hace es recoger la denuncia. Los denunciantes llaman, nos cuentan su caso, me acerco para reconocer el inmueble y lo que ha pasado, y nos ponemos manos a la obra. A partir de aquí coordinamos el tema técnico con el jefe de obra ya que siempre hay un desaguisado tremendo: obras mal ejecutadas, inexistentes (gente que han pagado por obras que no están realizadas), constructores que han desaparecido por el motivo que sea... Siempre hay un problema muy gordo que la parte técnica va arreglar ya sea con el constructor o nosotros.

A las personas se les recoge la denuncia y se les intenta poner solución. Mientras intentamos localizar a los denunciados, a esta gente que casi siempre está desaparecida, que es muy difícil encontrar y que pueden llevar años desaparecidos. Localizarlos es tarea de Eugenia y lleva mucho tiempo. Evidentemente vamos a pedir explicaciones directamente al constructor, y eso lo hago yo. Intento buscarle para que me cuente qué es lo que ha pasado, que dé su versión. Y todo con el objetivo de que si, el tipo ha cometido un error, lo reconozca y se tomen las medidas necesarias para acabar lo que se dejó inacabado en su momento.

También, en muchos de estos casos, las familias habrán denunciado ya a ese constructor.

No te puedo confirmar que ha pasado en el 100% de los casos, pero es un tema, en determinados casos, que arrastra muchos años. Sí.

En Estados Unidos, Antonio, hay muchos formatos sobre construcción, formatos donde gente experta y amateur acaban participando. En España, podríamos decir que son novedosos. ¿Has tenido ocasión de ver formatos parecidos?

Todo lo que me llega a mí es un poco de oídas. Sí que sé que hay varios formatos, que hay uno en Inglaterra que lleva diez temporadas, y luego que hay otro en Estados Unidos, pero cada uno tiene sus variedades. Lo sé muy por encima porque tampoco me quería dispersar ni confundir. La productora quería darle su toque y hacerlo, un poco, de otra manera.

En España, por ejemplo, tenemos la figura del albañil, como es mi caso, que sé del oficio, de la parte técnica, que tengo una experiencia detrás... y creo que en los otros formatos, como es el caso del inglés, no existe esa figura ya que solo están el arquitecto y el investigador. Es, en definitiva, algo diferente. Lo que si es el mismo es el fundamento de todos los programas: ayudar a la familia, ayudar a los denunciantes y solucionar un problema para acabar en la ejecución de la obra inacabada.

Junto a Manuel y Eugenia se encargarán de la adaptación española de 'Cowboys Builders'

¿Qué tipo de casos os habéis encontrado?

Nos hemos encontrado casos verdaderamente graves. Imagínate, no hablamos de una chapuza como puede ser pintar mal o una puerta descolgada, algo que no tiene trascendencia y que no te privan de nada en tu día a día, que te puedes cabrear pero no es algo que realmente te perjudique. Estamos hablando de una gente que ha contratado una reforma, una casa en la que podían vivir, y de hecho vivían. Por ejemplo, fue el caso de una pareja que querían adoptar niños, el constructor hace el derribo, cobra prácticamente la obra entera y desaparece. Les deja la casa inhabitable, una escombrera. Estas personas, entonces, tienen que salir de su casa, irse a casa de unos amigos... imagínate panoramas de ese tipo.

¿Hay casos en los que esos constructores a la fuga hayan sido simples estafadores, que no eran constructores ni eran nada y que, aprovechando el momento de crisis de determinadas personas, han aprovechado para engañar?

Realmente hay profesionales de todo tipo. Hay personas que se pueden haber equivocado, que pueden haber tenido problemas con el estallido de la burbuja y se han podido ver obligados a ciertas actuaciones, y otras que no son constructores, que conocen algo del oficio y que simplemente se han limitado a engañar a los clientes. Sin ofrecer nada a cambio, se llevan su dinero.

¿Puede ser que con la situación de crisis actual se hayan disparado las opciones demasiado baratas para ser buenas y los inquilinos hayan recurrido a ellas?

En este sentido, no es el caso del programa, no ha sido un tema de precio. Es cierto que es un gravísimo problema derivado de esta época. El que se tiren los precios de esa manera perjudican y han perjudicado mucho porque fomentan el intrusismo. Ha afectado a profesionales de verdad, que pagan sus impuestos, que estaban dados de alta y que se han quedado fuera. Hay gente que necesitaba buscarse la vida, sin darse de alta, sin ni siquiera tener los conocimientos básicos, se metían a hacer obras ofreciendo precios irrisorios, y en la mayoría de los casos sin terminar las obras. Todo esto ha generado muchísimos problemas en el sector. En esta temporada, por lo menos, por ahí no va la cosa.

En esta aventura televisiva no estás solo, estás acompañado por un equipo...

Efectivamente. Soy un poco el que gestiona todo y da la cara, pero la parte técnica queda con Manuel Santos, una persona que lleva 30 años en el sector, sabe perfectamente lo que hace, técnicamente es bastante competente y se encarga de las obras. En la investigación está Eugenia Dos Santos, policía nacional, medalla al mérito, cinco años en los cuerpos especiales... es muy habilidosa y una gran profesional de la investigación. Ella es la que se encarga de encontrar y localizar a las personas, proporcionarme todos los datos con las pistas que le podemos ofrecer para buscarles.

Antonio se implica de lleno en la investigación y en cada caso del programa de laSexta

¿Repetirías la experiencia, Antonio?

Ahora mismo te diría que sí. Ha sido super complicado y muy difícil, pero, de todo corazón, te lo digo. La diferencia entre esto y 'Pesadilla en la cocina', que yo veo, es que hay una parte que llama, que son los denunciantes, y otra que no tiene ni idea de lo que estamos haciendo y que evidentemente no lo ponen fácil.

Ha sido muy costoso, en cuanto a tiempo me refiero, encontrarlos, y había veces en las que ni siquiera sabíamos si íbamos a poder terminar el programa. El tema de las obras ha sido un poco complicado por la meteorología, así que no ha sido fácil. En estos momentos me encantaría hacerlo de nuevo porque ya nos conocemos. Creo que lo disfrutaría mucho más.

¿Qué puede aportar este formato a la televisión actual, por así decirlo?

No soy ni de televisión, ahora desde que he hecho esto sí porque estoy algo más enterado, pero te diría, en mi humilde opinión, que es fresco. Realmente somos gente de la calle que tratamos un tema que está muy a flor de piel como son las obras, algunas mal ejecutadas, la burbuja, la crisis...todo lo que se ha vivido en estos años en España, muy relacionado con todo esto.

Es algo nuevo, que no se ha hablado de esto desde esta perspectiva, y los personajes, al final, como somos nuevos, tenemos ese toque de frescura que le pueden faltar a otros programas que ya llevan un tiempo en parrilla. En mi opinión, tenemos un buen producto y por ganas no han sido, porque todos hemos dado todo para que esto saliera bien.

¿Habéis llegado a vivir momentos tensos y complicados en la grabación del programa? Sobre todo con el reencuentro con esos constructores...

Sí, muy muy tensos. Ninguno de los constructores, sin contarte mucho, me ha recibido con agrado. Ten en cuenta que ninguno de ellos se esperaba mi visita. Cada uno de ellos reaccionaba de una manera, pero sí, ha habido momentos delicados.

En 'Constructor a la fuga' se intenta poner solución a los problemas de los denunciantes y sus casos

¿El programa tiene muy en cuenta las historias personales o se centra más en la reconstrucción y la búsqueda?

Realmente, el fundamento del programa es la parte emotiva, la de la familia, el problema en sí. Lo que pasa es que es muy denso el contenido, porque claro hay búsqueda, la parte técnica... pero está centrado en la familia y en el tema final, las personas.

Con ganas, supongo, de que el espectador vea este programa. Como es tu primera incursión en el mundo de la televisión, el tema de las audiencias, ¿te preocupa?

La verdad es que no. Sigo trabajando de albañil. Me gustaría que el resultado fuera bueno por todo el esfuerzo que esto ha supuesto. Me encantaría, de verdad, que gustase. No entiendo ni de shares ni de tantos por cientos, estoy más preocupado porque guste que por el tanto. El objeto del programa es gustar, que haya a una parte importante que le agrade, no me preocupan los shares.

Pero serás consciente de que un programa de este tipo, al final, suele ser visto por mucha gente y hay está la popularidad, que te reconozcan...¿le has dado vueltas a cómo puede cambiar tu vida?

No me lo he cuestionado. No lo he valorado, no he tenido mucho tiempo y he estado muy ocupado con el día a día, con salir adelante y demás. Realmente no tengo ni idea de la repercusión que puede tener. Sigo viajando en Metro, sigo andando por la calle tranquilamente y nadie me ha reconocido. También pesaba 5 kilos más e igual ni me reconocen.