Los espíritus de 'American Horror Story: Hotel' han conseguido que ya vea esta temporada como una continuación de "murder house", pero algo más mamarracha. Parece que los guionistas han decidido que si algo funciona, ¿para qué innovar?, por lo que con "Room 33" han querido dejar muy claro desde el minuto 1 que hay una relación muy estrecha entre la primera y la quinta temporada de la franquicia de terror.
Aborto en la mansión de la primera temporada
Y es que el sexto episodio de la serie arranca en 1926 con la Condesa, visitando la casa, que años más tarde ocuparían los Harmon, para someterse a un aborto. Bajo el nombre de señora Johnson y luciendo una enorme tripa, a pesar de solamente estar preñada de 3 semanas, el personaje de Lady Gaga es intervenido por Charles Montgomery, el primer propietario de la casa, donde realizaba abortos clandestinos. Durante la operación, el feto parece tener vida y ser una criatura sanguinaria. ¿Le sirvió d inspiración ese monstruito para crear a su pequeño Infantata? ¿Intervino la Condesa en la resurrección del niño que pulula por el sótano de la mansión?
Ramona Royale visita la habitación 33
Lo cierto es que Bartholomew, el feto amorfo de Lady Gaga, que no ha crecido a pesar del paso del tiempo, se hospeda en la habitación 33 y es el ser más querido de la Condesa. Eso lo sabe bien Ramona Royale (Angela Bassett), que quiere darle donde más le duele y aprovecha para ejecutar su plan un viaje a París de la Condesa, pero fracasa y el ser acaba dentro de una maleta de John Lowe.
La ocasión también le sirve a Donovan (Matt Bomer) para explicarnos a los espectadores, con la excusa de las chavalitas suecas, cómo funcionan los fantasmas del hotel Cortez (tal y como hizo Tate con Violet en "Murder House"). Los muertos no pueden abandonar el lugar y se ven atrapados allí hasta que no encuentran cuál es su propósito y así hacer su estancia en el hotel más llevadera.
Los Lowe, un matrimonio perturbador
En cuanto al drama familiar de los Lowe, cabe destacar que la serie nos ha recordado que el matrimonio tiene una hija, a pesar de que sus padres pasan olímpicamente de ella, mientras se hospedan en el hotel. Aquí el único niño que importa es Holden. Todavía no sé a qué juega el matrimonio ni quién de los dos está peor de lo suyo: si Alex (Chloë Sevigny) por hacerle creer a John (Wes Bentley) que está delirando y ve visiones; o él, por haber sido capaz de aguantar tantos días en el hotel, rodeado de fantasmas, vampiros y demás criaturas.
Alex, cada vez más cerca de la Condesa
Sea como sea, finalmente un John derrotado ha decidido que ya es hora de poner fin a su estancia en el hotel y regresar a casa, no sin antes catar la carne sueca. Lo que desconoce el policía es que en su maleta se esconde el feto de la Condesa.
Scarlett existe
De vuelta a casa, donde nos hemos encontrado con Scarlett -sí, los guionistas se han acordado de la hija de los Lowe-, Bartholomew ha intentado atacar a la pequeña, por lo que para evitarlo, John no ha tenido otra opción que hacer uso de su pistola, lo que todavía a atormentado más a la pequeña. Menudo par de pirados tiene la pobre como padres. Ha costado, pero los guionistas han optado por largar a la pequeña de la serie y mandarla a casa de su tía. Bye, bye, Scarlett.
La Condesa (Lady Gaga) acuna a su feto amorfo
Afortunadamente el feto, del que por fin hemos podido ver su aspecto, ha sobrevivido a los disparos y ha sido rescatado por Alex, la nueva gran aliada de la Condesa, porque es más importante este ser amorfo es más importante que su propia hija.
Liz y Tristan, un amor imposible
"Room 33" también ha abierto y cerrado, con trágico final, una trama para el personaje de Liz Taylor (Denis O'Hare), quien ha tenido la mala suerte de encontrar el amor, y ser correspondido, en Tristan (Finn Wittrock), el toyboy de la Gaga, algo que no ha sentado nada bien a la Condesa, que ha decidido deshacerse del yogurín sin temblarle el pulso: sus chicos son suyos y hace con ellos lo que quiere.
Denis O'Hare es Liz Taylor en 'American Horror Story: Hotel'
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