Miguel Ángel Silvestre se sincera y confiesa la presión que siente trabajando en EEUU

El actor Miguel Ángel Silvestre, catapultado a la fama por su papel de El Duque en 'Sin tetas no hay paraíso', ha concedido una entrevista a la revista Icon en la que se confiesa acerca de su nueva vida en Los Ángeles y su papel en la serie 'Sense8', además de dar su opinión sobre el escenario político español y la situación de los homosexuales alrededor del mundo.

Silvestre se encuentra ahora mismo rodando la segunda temporada de 'Sense8', la serie de ciencia ficción dirigida por los hermanos Wachowski ("Matrix") y producida por Netflix que conecta a varios personajes situados en diferentes lugares del mundo. El actor se pasará gran parte del año viajando de un país a otro, sin apenas tiempo para visitar España o Los Ángeles, su nueva ciudad de residencia.

El estereotipo de los latinos y la polémica de sus escenas homosexuales

Según cuenta Miguel Ángel, el día en el que conoció a todos los miembros de 'Sense8' Lana Wachowski celebró una fiesta en su casa. Allí le hicieron cantar una canción de Ricky Martin, a pesar de que a él no le apetecía en exceso. "Canto muy mal. Además, me estresa un poco tener que estar siempre defendiendo las expectativas que ellos tienen de un latino, que si eres apasionado, que si eres ardiente... Y si no eres así, te miran como diciendo: 'Ay, pensábamos que ibas a ser más...".

Lito, su personaje en la serie de Netflix, es homosexual. Algunas de las escenas que tuvo que interpretar causaron bastante polémica en Estados Unidos, y el actor ha comentado lo siguiente sobre ello: "Cuando viajo y veo los problemas que hay con la homosexualidad y su aceptación en otros países, pienso: 'Hostias, vengo de un país maravilloso. Venid a mi país para saber lo que es la libertad'. En nuestra personalidad hay cosas espectaculares que echo mucho de menos y de las que me siento muy orgulloso. Cuanto más lejos, más me doy cuenta y más las añoro".

"Me siento un tanto desesperado con la situación política española"

Durante la entrevista, Silvestre opinó sobre el convulso escenario político español. "Me siento totalmente desubicado", expresó. "Ha llegado un momento en el que me siento un tanto desesperado: no sé en qué lugar colocarme. Todo parece cambiar tan rápido".

El actor echa de menos algunos aspectos de su vida en España, pero sobre todo a su madre, con la que comparte un bonito recuerdo. "Este año nos hemos podido ver muy poco", confesó. "Ella conservaba todos los regalos que se hacían antes, como las medallitas de oro por la comunión. Fundió todo ese oro e hizo dos sellos que son el símbolo de la familia. Grabé una palabra significativa en su sello y ella en el mío, y cuando vino al estreno de 'Sense8' en San Francisco los chocamos y esa conexión ya está de por vida. Me lo pongo todos los días".