Vestían traje y corbata negra, y ocultaban sus ojos tras unas gafas oscuras. Fueron los primeros Men in Black (MIB), los verdaderos Hombres de Negro. En España aterrizaron el 10 de mayo de 1996, más de un año antes de que Tommy Lee Jones y Will Smith comenzasen a buscar extraterrestres. Rápidamente se hicieron conocidos y no había acto que se preciase sin la presencia de alguno de sus reporteros. A partir de aquel momento, los políticos empezaron a inventarse multitud de excusas con el fin de escaparse a sus incómodas y, en ocasiones, hasta impertinentes preguntas.
'Caiga quién caiga', también conocido como 'CQC', se estrenó en Telecinco con una audiencia bastante discreta, sin embargo, la cadena realizó una apuesta firme por el formato y lo mareó por su parrilla hasta que finalmente conectó con los espectadores. El formato de origen argentino empezó a saborear las mieles del éxito a raíz de entregarle sus icónicas gafas al rey emérito Juan Carlos I. Que un famoso o político aceptase las gafas del programa se convirtió entonces en señal de éxito.
El formato 'Caiga quién caiga' ha vivido diferentes etapas en nuestro país, cuatro concretamente: dos en Telecinco (1996-2002 y 2005-2008); otra en laSexta (2008); y una última, en versión femenina, en Cuatro (2010). Los mejores años del programa fueron en Telecinco, donde el formato fue renovado por un total de cuatro temporadas. Sin embargo, la fórmula experimentó un acusado desgaste y a mediados de enero de 2008 Mediaset España (entonces Gestevisión Telecinco S.A.) decidió cancelar su emisión, a pesar de que ya había comprometida con la productora la realización de una temporada más.
El Gran Wyoming, Juanjo de la Iglesia y Javi Martín, primeros presentadores de 'CQC' en España
Ese mismo año, en 2008, laSexta se hizo con los derechos del formato, pero 17 entregas fueron suficientes para comprobar que el recorrido de 'CQC' en España no daba más de sí. El programa necesitaba descansar, necesitaba oxigenarse, necesitaba adaptarse a los nuevos tiempos... y así, con un aire totalmente renovado, reapareció dos años después en la parrilla de Cuatro.
Por primera vez, el formato se presentó a la audiencia con un trío de presentadoras. Ana Milán, Silvia Abril y Tània Sàrrias fueron las encargadas de capitanear un nuevo equipo de reporteros entre quienes destacaron Rául Gómez y Estíbaliz Gabilondo que ya había trabajado para el programa en laSexta como sustituta de Gonzo. Gabilondo se convirtió en la primera reportera CQC en la historia del programa en nuestro país.
El regreso de 'CQC'
En sus dos últimas temporadas 'Caiga quién caiga' sobraba en la parrilla. El amante del formato agradeció su regreso, pero lo cierto es que el espectador no encontró novedad destacable como para seguirlo cada semana. Los resultados de audiencia evidenciaron un nulo interés que los directivos tuvieron que asumir no sin resignación. 'Caiga quién caiga' ha sido, es y será siempre un formato de calidad, de marca, de esos espacios que toda cadena desea tener en su parrilla,... eso sí, con un buen número de espectadores que por supuesto avalen su permanencia en antena.
Silvia Abril, Ana Milán y Tània Sàrrias, presentadoras del último 'CQC'
En sus últimas temporadas, los reporteros de 'CQC' no solo tuvieron que luchar por acceder a los famosos y políticos, sino que además tuvieron que ingeniárselas para competir con los clones de reporteros que en los últimos años habían salido de diferentes programas. Y es que las salidas de tono de los Men in Black ya no sorprendían, las preguntas incómodas ya no solo llegaban de los reporteros de 'CQC', por lo que los reportajes del programa empezaron a parecer una repetición de otros que la audiencia podía encontrar haciendo zapping. La proliferación de espacios de actualidad diaria, con conexiones en directo y con reporteros todoterreno a pie de photocall dejó caducas las piezas de 'Caiga quién caiga'.
Pero desde julio de 2010 el panorama televisivo y, sobre todo, la actualidad política ha cambiado y mucho, lo que vuelve a abrir las puertas al regreso de 'Caiga quién caiga'. Hoy más que nunca el espectador echa en falta el 'CQC' más irreverente de todos, el más sarcástico, el más inoportuno, el más crítico... Warner Bros IPTV España (Antes Eyeworks) no ha dejado de presentar nuevamente el formato a las cadenas en las últimas temporadas, sin embargo, a día de hoy se muestran reticentes a rescatar este viejo formato.
Esti Gabilondo, Raúl Gómez, Miguel Martín, Nacho García, reporteros de 'Caiga quién caiga' en Cuatro
Proliferación de las entrevistas amables
Si echamos un rápido vistazo por las parrillas televisivas veremos que vuelve a destacar un género: el género de la entrevista amable, de la entrevista pactada, de la entrevista promocional... '¡Qué tiempo tan feliz!', 'El hormiguero', 'En la tuya o en la mía', '2 días y 1 noche'... son formatos a los que los invitados acuden encantados porque saben de antemano que nada malo les va a suceder y que ninguna pregunta incómoda les va a hacer retorcerse frente a las cámaras.
Las excepciones las encontramos en laSexta. Prácticamente solo Ana Pastor logra poner entre la espada y la pared a sus invitados. Solo ella parece querer buscar los que otros dejan pasar o no se atreven a preguntar. Y por ello precisamente 'El objetivo' se ha convertido en un formato incómodo para los políticos; incómodo y, a su vez, necesario para quienes al final pretenden ofrecer frente a los espectadores (o votantes) una imagen de normalidad y sobre todo transparencia. Pero incluso a 'El objetivo' le falla algo y es la improvisación, porque aunque las preguntas del programa no sean pactadas cualquier invitado que acuda al programa de laSexta tiene el tiempo suficiente para prepararse cualquier tipo de cuestión y respuesta.
Lo más leído
Incluso Gonzo, exreportero CQC, recupera aquel espíritu crítico para 'El intermedio', pero sus apariciones son tan esporádicas que el espectador no termina de saborearlas. Son muchas las razones que hoy día nos llevan a pensar que 'Caiga quién caiga' podría encajar perfectamente en nuestra televisión, pero por otras tantas que desconocemos nadie arriesga por recuperarlo. ¿Acaso la actualidad política que vive el país no daría el juego suficiente como para volver a apostar por este formato? Nosotros creemos que sí, ahora más que nunca.