ABC tiene claro qué es le gusta a su público y ha decidido otorgarle nuevas temporadas a 'Once Upon a Time' y 'Quantico' tras los datos cosechados el pasado otoño. La noticia, por lo tanto, no es una sorpresa pero llega a pocos días de la vuelta de ambas tras un largo parón que las ha mantenido alejadas de nuestras pantallas y apenas dos semanas después de la repentina dimisión de Paul Lee al frente de la cadena.
Como viene siendo habitual, ha sido el co-creador de 'Once Upon a Time', Adam Horowitz, el encargado de anunciar la buena noticia a través de su cuenta de Twitter a la vez que agradecía a los fans de la serie el extraordinario seguimiento.Thrilled to announce that #OnceUponATime has been picked up for season 6! Thank you ABC and thank you to the most extraordinary fans ever!
? Adam Horowitz (@AdamHorowitzLA) 3 de març de 2016
El drama fantástico, que a partir del próximo domingo se dirige al Inframundo, tuvo un promedio de 5 millones de espectadores y 1.6 en demográficos a lo largo de la primera mitad de la quinta temporada, que es un 25 por ciento menos de lo marcado por la primera mitad de la cuarta, aunque los datos alcanzan los 7.3 millones y el 2.6 en demo tras la suma de los visionados en diferido.
Quantico, una apuesta de futuro
El drama policial encabezado por la estrella índia Priyanka Chopra tuvo un estreno fulgurante pero pronto se estancó. Se presentó en septiembre del pasado año marcando un magnífico dato, concretamente unos 7.1 millones de espectadores y 1.9 en demográficos, muy por encima de 'Revenge', su predecesora, pero tan sólo 4.5 millones de espectadores siguieron el final de la primera parte de la temporada. A pesar de la gran bajada, los datos son realmente buenos para una serie novata así que no es de extrañar que ABC haya decidido encargar una segunda temporada.
Los nuevos episodios tendrán un punto de vista bastante diferente ya que Alex Parrish ha dejado de huir. Transcurrirán tres meses después del estallido de la segunda bomba y veremos a la joven Alex y al resto de sus compañeros intentando lidiar con las repercusiones porque, ahora, ya nadie está libre de sospecha.