Comedy Central apuesta por la comedia sobrenatural 'Deadbeat' (Hulu) para su noche del martes. Protagonizada por Tyler Labine ("Tucker y Dale contra el mal"), esta nueva apuesta versa sobre un desafortunado y fumado médium que hará cualquier cosa por ayudar a los fantasmas de Nueva York a cerrar sus asuntos pendientes antes de dejar este mundo. Junto a él estarán Brandon T. Jackson ("Tropic Thunder") en el papel de su mejor amigo y "camello" de barrio; Cat Deeley, interpretando a Camomile White, una "médium celebrity" con la que Kevin entablará una relación de amor-odio; y Lucy DeVito ("Melissa y Joey"), hija del actor Danny DeVito que hará de asistente personal de la guapa y exitosa Camomile.
Kevin es un hombre con pocas pretensiones y con un don poco frecuente: puede ver y hablar con los fantasmas. Es el niño de "El Sexto Sentido" convertido en "El Gran Lebowski" (o algo parecido). Bendecido y maldecido con el don de poder comunicarse con los muertos, Kevin sobrevive como un "médium de alquiler", ayudando a los muertos a resolver aquello que les impide "ir hacia la luz".
Así, el joven decidirá ayudar a los fantasmas a cerrar sus asuntos pendientes en la tierra antes de irse al "otro mundo". Desde perder la virginidad, hasta participar en un concurso de perritos calientes, pasando por llevar a cabo una última actuación, los espíritus tienen temas inacabados de los más insospechados y Kevin será de todo menos ortodoxo para que puedan descansar en paz.
Camino de la tercera temporada
La serie, que ya ha sido renovada, es la primera comedia original de Hulu y la primera serie coproducida entre Hulu y Lionsgate, una creación de Cody Heller y Brett Konner, ("Wilfred" y "The Inbetweeners") que se aleja del resto de series de espíritus llevándose la muerte a la comedia más absurda y divertida.
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Este martes 8 de marzo a las 23:45h se estrena 'Deadbeat' en Comedy Central de la mano de Kevin, su mejor amigo Roofie, el inteligente y "emprendedor" camello del barrio, la tímida asistente de Camomile, Sue y un puñado de fantasmas más que dispuestos a irse al otro barrio con sus asuntos más que zanjados tras una buena dosis de humor.