Así fue la cita de Paula ('GH 15') en 'First Dates': anónima, asombrada por los abdominales de Silver y ¿final feliz?

Tras la visita de los hermanos Mateo a 'First Dates' como simples comensales que terminaron conquistando a la chica que tenía una cita a ciegas con otro hombre, Paula González, ganadora de 'Gran Hermano 15' llegó al programa este lunes 25 de abril dispuesta a encontrar el amor: "Nunca he tenido una cita a ciegas pero hoy voy a tener una y estoy bastante entusiasmada. Espero encontrar un chico morenito con muchos tatuajes. Me encantan los negritos porque es una cosa para mí que está a otro nivel. Me flipan. Sé que está el mito de que por supuesto están bien dotados y la tienen grande, que es estupendo y maravilloso y a todos nos gustan, pero a parte de eso me encanta el color de piel moreno/negro. Me atrae un montón".

Tras asegurar que nunca había estado enamorada realmente, entró en el restaurante y esperó a su cita en la barra. Tras un saludo muy efusivo, Silver se presentó a Paula contando que es entrenador y que vive en Valencia. Todo parece indicar que el chico originario de Guinea no conocía a Paula ya que la preguntó si estudiaba o trabajaba y esta le respondió: "No estudio ni trabajo pero tengo planes en la vida. Me gusta la psicología y educación social. Me gustan las cosas con niños. Me he dedicado este último año a la tele. Hay concurso que se llama 'Gran Hermano', no sé si lo has visto alguna vez...".

Silver admitió que no sabía quién era, se río y le preguntó por su posición en el concurso. "Ganadora", contestó sin reparo Paula. "¿Eres una famosilla?" le preguntó él y ella respondió "Dejémoslo en personaja". Más tarde, en el confesionario, Silver se sinceró: "He estado tranquilo todo el rato porque no sabia quién era. Me echaría para atrás tener una novia famosa. No me veo cenando con Paula o paseando por el parque y que la gente esté mirándonos".

Paula se queda anonadada con el cuerpo de Silver

Paula no ha tenido suerte en el amor ni tampoco lo ha buscado. "Soy lo peor. Estoy soltera porque salí de 'Gran Hermano' y empecé a vivir la vida loca. No quería saber nada de novios y relaciones estables", aseguró Paula tras pedirle que no se dejase llevar por su locura ya que aunque hablase como una niña pequeña, en realidad era bastante más madura de lo que parecía.

La ganadora de 'GH 15' se lanzó a la piscina y le pidió ver sus tatuajes, a lo que Silver fue algo reticente: "¿Y no te importa que otras chicas del restaurante me miren?", a lo que Paula contestó que no era celosa ya que cuando confía en una persona deja los celos totalmente atrás. El chico se levantó la camiseta y enseñó la frase que tiene tatuada en uno de sus pectorales, "La única batalla en la que se pierde es la que se abandona". Tras quedarse embobada mirando sus marcados abdominales, Paula solo acertó a contestar "que estuvo a punto de ponerla en el pie de la imagen de Instagram el otro día": "¡Está super duro! Es que ha habido un momento que le he tocado y eso era una piedra. Está bien pero no es el físico que a mí me gusta", afirmó más tarde en el confesionario.

Al ser preguntada por si hacía deporte ya que Silver era un adicto a dicha tarea, Paula se sinceró: "Hago intentos de deporte. Es decir, salgo a bailar casi cada día. Mi genética es súper top y gracias a Dios puedo comer obesidades cada día y que nada me afecte". Por último, la catalana volvió a hablar de algunos de sus defectos: "Soy hiperactiva sin receta ni nada. A parte, soy tripolar, no sé si te lo había comentado...", a lo que Silver aseguró que Paula estaba muy loca.

La decisión final

Tras termina la cena en el restaurante, la pareja se reunió para tomar la decisión final. Decidir si se darían una segunda cita o no. Silver fue el primero en contestar: "Le daría una segunda cita porque se muere de ganas".

Paula fu algo más crítica antes de anunciar su decisión: "Le falta un poquito más de altura. Sinceridad máxima. Tampoco soy un pivón máximo, ¿sabes? Si que la tendría pero no porque me muera de ganas. Me parece normal tener una segunda cita". Tras aceptar ambas partes que tendrían una cita, Silver le dio a Paula un beso en la mejilla.