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El 15 de abril del 2015 llegaba al prime time de Televisión Española 'Acacias 38', su nueva apuesta de ficción diaria producida por Boomerang TV con Sara Miquel, Sheyla Fariña y Roger Berruezo como protagonistas. Este nuevo proyecto de época situado en el Madrid de 1899, llegaba para revitalizar la sobremesa de La 1, franja horaria que venía flojeando desde hace años, concretamente desde el final de 'Amar en tiempos revueltos'.
Trece meses después de su estreno, con las bajas de Fariña y Berruezo, nuevas tramas y una audiencia que supera prácticamente todos los días el 10% de share, con más de 1.000.000 de fieles, Sara Miquel, la actriz que da vida a la malísima Doña Cayetana Sotelo, hace balance de su primera gran incursión artística a nivel nacional.Sara Miquel
¿Como te llegó la prueba para este personaje?
Me llamaron Yolanda Serrano y Eva Leire, las responsables del casting, para hacer esta prueba. De todo el proceso hasta obtener el papel, recuerdo que tuve que pasar varios filtros de la cadena, Cayetana es un personaje muy potente y no acababan de ponerse de acuerdo. Tenían algunas dudas y yo no había hecho nada visible antes.
Al final fue un acto de fe en el que tuvieron mucho que ver Yolanda y Eva, desde el principio confiaron en mí.
¿En todo este proceso tenías la corazonada de que el papel sería para tuyo?
Normalmente tiendo a pensar en el no, porque así me llevo menos tortas. Pero esta vez, tras saber cómo sería la serie, leer los primeros guiones y conocer un poco el personaje, tuve la sensación de que sí, que el papel estaba hecho para mí.
¿Cómo te preparaste el personaje?
Como tuvieron dudas hasta el último momento y no me llegaba la confirmación, fue luego todo muy rápido. Apenas tuve dos semanas para preparar el personaje antes de comenzar a rodar, y prácticamente 24 horas al día durante este tiempo, lo dediqué a modelar a Cayetana.
Con la coach y los responsables de la serie, conseguí humanizarla un poco. Al principio querían un personaje muy frío que prácticamente solo tuviera lado malo, y para yo entender a Cayetana y justificar sus actos, quise crearle un fondo destruído.
"Los malos son personajes más complejos, atormentados y con un pasado lleno de cosas con las que trabajar"
¿Te gustaba el hecho de que fuera mala?
Sí, me atraen los personajes villanos. Los personajes que obran mal y realizan acciones negativas a propósito, es porque tienen algo en su ser que no está bien colocado. Son personajes más complejos, atormentados y con un pasado lleno de cosas con las que trabajar.
¿Tuviste algún referente a la hora de su creación?
La verdad es que no. No me gusta contaminarme con ejemplos concretos. Obviamente hay millones de personajes villanos en el cine y la televisión increíbles, y al final sin darte cuenta robas cositas.
Personalmente, ¿has llegado a encontrar algunas cosas en común con Cayetana?
En el fondo no me parezco a ella, gracias a Dios no tengo este pasado ni esta maldad [risas], pero en el pronto y en el temperamento sí que me parezco un poco.
¿Y a empatizar con ella ante algunas situaciones?
Siempre. Sin empatizar con ellas sería casi imposible interpretarla correctamente y no sería creíble. La base de meterse en la piel de una persona así es entender sus motivos y la realización de sus actos.
Sara Miquel interpretando a Cayetana en 'Acacias 38'
¿Qué balance haces de este primer año en la serie?
Muy positivo. Yo comencé con mucha ilusión, desde el primer día he creído en este producto y me he entregado por completo. He apostado fuerte y he ganado en seguridad como actriz, aprendo día a día cosas nuevas. Estoy muy orgullosa de que hayamos recuperado una parte de esa complicada franja de TVE, del trabajo de todos mis compañeros, del producto que creamos desde cero y de mi labor en la serie.
¿Qué crees que tiene 'Acacias 38' para atrapar cada tarde al público?
Tiene autenticidad. Hemos creado un producto en el que los personajes son muy reales, sienten a mucho volumen y el público se puede sentir identificado con todos ellos en algún momento. No somos una serie de un solo tono, tenemos una amplia gama de colores que la convierte en dinámica, siempre pasan muchas cosas.
"La salida de los personajes de Sheyla y Roger fue dura para todo el equipo, un shock tremendo. Nadie se lo esperaba"
Nos hemos atrevido a hacer telenovela, algo fuera de lo cotidiano en la ficción española. Se buscó algo nuevo que pudiera funcionar en esta hora tan complicada, aparte de competir con otros productos, está la siesta.
¿Qué ambiente se respira entre el equipo con los datos de audiencia que cosecháis?
Estamos muy contentos. Tenemos una línea claramente ascendente. Poco a poco vamos ganando puntos y afianzándolos, no somos de picos. La gente que se asoma a vernos se queda, algo más importante que cosechar un día un gran dato y luego volver a bajar.
¿Tú los sigues de cerca o no les das mucha importancia?
Los actores tenemos un grupo de WhatsApp y todos los días estamos al tanto de lo que hemos cosechado en el último episodio emitido Si no fuera por este medio, no estaría todo el día consultándolos, sí de vez en cuando, pero no de forma habitual.
¿Qué ritmo de grabación tenéis?
Normalmente rodamos de 7 de la mañana a 7 de la tarde de lunes a viernes, pero no todos hacemos todas las horas todos los días. Hay semanas mortales y otras más tranquilitas. Yo prefiero trabajar mucho un día que poco muchos días, y tengo la suerte de que me lo respetan y también descanso entre semana después de jornadas muy intensas. Hay veces que llego a tener 25 páginas de guion yo sola.
Sara Miquel
Toda la trama que envuelve al momento en el que descubro que mi madre es Fabiana, con toda su crisis posterior, ha sido de lo más bonito que he rodado como actriz. Han sido momentos de ataques de ansiedad, de locura transitoria, lloros...
Estas secuencias de gran carga dramática las rodé a la vez en una semana. Lo viví tan intensamente que llegaba a casa destrozada físicamente, porque emocionalmente intento no hacerme daño y voy con mucho cuidado.
¿Qué te pareció la salida de los personajes de Sheyla y Roger?
Como compañera fue un shock tremendo porque nadie se lo esperaba, y mucho menos que pasara algo así con los protagonistas. El final que le han dado los guionistas me pareció poético, bien resuelto y bonito, pero ningún final hubiera sido bueno. Su salida de la serie iba a ser dura para todos sí o sí.
¿Cómo vivieron ellos ese último día de trabajo?
Supongo que se les haría cuesta arriba porque sabían que ese sería su último día en 'Acacias 38'. Todos estábamos a flor de piel, y las últimas secuencias que grabábamos con ellos fueron diferentes, no puedes obviar el hecho de que no les vas a tener delante más, al menos en este proyecto.
¿Qué nuevas aventuras te gustaría que viviera tu personaje?
Estoy muy contenta con lo que me viene. No pediría más de lo que me están dando. Estoy recibiendo mucha caña con subidas y bajadas importantes. He grabado ya cosas brutales y aún me quedan, y la verdad es que estoy alucinada y encantada.
Cuando dejas de lado el vestuario y el peinado, físicamente cambias bastante, ¿te suele reconocer la gente por la calle?
En general paso bastante desapercibida. Hay gente que me reconoce enseguida, pero por ejemplo, estuve en la Feria de Abril, y tras estar bastante rato en una caseta bailando, de repente vino una persona y me reconoció.
Por lo tanto, ¿el tema de la fama no ha supuesto un cambio drástico en tu vida?
Nada, cero, no soy Penélope Cruz [risas]. Al contrario, me hace ilusión cuando la gente me para por la calle para decirme cosas bonitas, que les gusta mi trabajo, la serie y mi personaje, algo que no deja de ser una satisfacción.