EN LA CUERDA FLOJA

La dramática situación de Jesús Quintero: de conducir en un Bentley descapotable a vagar por las calles de Sevilla

El locutor ha sido visto "disfrazado" a altas horas de la madrugada por las calles de su barrio en la capital andaluza.

Por Redacción El 5 de Junio 2016 | 12:29

El periodista que alcanzó el éxito gracias a 'Ratones coloraos' o 'El loco de la colina', Jesús Quintero, está pasando por los momentos más complicados de su vida, al borde del desahucio e incluso denunciado por sus propias hijas. Según comenta el periódico La Razón, al periodista se le puede ver "disfrazado de los pies a la cabeza" mientras pasea por su barrio del centro de Sevilla, más taciturno de lo habitual.

En la misma línea, el periódico apunta que Quintero parece un maremágnum de identidades de los invitados a los que ha entrevistado: "Parece un pisto de actor, estrafalario, político, saltimbanqui, celebridad de la prensa rosa, deportista o presidiario". El locutor es popularmente conocido como "un profesional del impago".

"Todo lo que le sobra de talento como comunicador, le falta de formalidad como empresario", comenta uno de sus empleados. El periodista llegó a ser propietario de un edificio entero con vistas de ensueño a la Giralda, y apostó sin éxito por un negocio de hostelería mientras quebraba el lujoso café Montspensier, en el que gastó millones de pesetas en la decoración y supuso un agujero económico imposible de levantar, "de su garaje hace meses que no asoma el Bentley descapotable", explica la cabecera de Marhuenda.

"El propio Jesús reconoce que no tiene ni idea de llevar la gestión del teatro, pero también es verdad que se trata de una persona muy generosa y confiada a la que han engañado en más de una ocasión", reconoce un colaborador de Quintero en palabras recogidas de ABC por Periodista Digital.

Jesús Quintero

Una llamada desesperada

"Me van a ejecutar en Cádiz, me van a ejecutar en Huelva, por favor Luis, arregla esto ya, por favor te lo pido", rogaba el onubense al presidente de la entidad para que mediara con Caixabank. Quintero insistía a Pineda mientras le recordaba: "Yo te he hecho unos trabajos, Luis".

La crítica situación de Quintero, que asegura tener todas las puertas de la televisión cerradas, mostraban un peso económico al que no podría hacer frente: "A partir de ahora pago 9.000 euros todos los meses. Yo no tengo dinero, no tengo trabajo, mis hijas no pueden estudiar y me tienen denunciado por lo penal, es como acabar con mi vida".