Este viernes, 3 de junio, Mark Salling ('Glee') acudió a los juzgados para declarar sobre los cargos de los cuales estaba acusado. El actor, de 33 años, se enfrentaba a dos acusaciones, recibir y poseer pornografía infantil. En diciembre, el equipo de Crímenes de Internet en Contra de Menores de dicho departamento policial, consiguió una orden para registrar la casa del actor, donde encontraron una extensa colección del material prohibido.
Salling se declaró inocente tras las preguntas del juez federal Rozella A. Oliver y finalmente quedó en libertad tras pagar una fianza de 150.000 dólares, aunque en un principio intentaron que fuera detenido sin fianza. En el caso de resultar culpable, podría enfrentarse hasta un máximo de 20 años de prisión.Ahora el actor, una semana después, se ha personado en un juicio durante el cual la acusación ha recomendado que Salling permanezca bajo custodia dado el riesgo de que no vuelva a presentarse en las próximas audiencias, si se acoge de nuevo a la libertad bajo fianza.
Mark Salling acude al juicio
Las consecuencias de las acusaciones
Salling fue detenido y acusado de posesión de pornografía infantil en diciembre, pero al cabo de unas horas, y después de pagar una fianza de 20.000 dólares, la estrella salió en libertad. Estas acusaciones han hecho que el actor haya sido despedido de su proyecto más reciente.
El director Adi Shankar declaró en un comunicado que pagará por las escenas que volverán a grabar y que donará parte del dinero que genere esta emisión a instituciones que ayuden a niños que han sufrido de abuso sexual. Esta no es la primera vez que Salling se mete en graves problemas legales. En el 2013 su entonces novia Roxanne Gorzela presentó una denuncia en su contra por violencia, asalto sexual y estrés emocional.
