Luis Ángel, el bilbaíno que entró a 'Quién quiere casarse con mi hijo' en su primera temporada en busca del amor, no tuvo la suerte que esperaba. Y es que el romance no surgió con ninguno de sus pretendientes, sino entre ellos. Juan Carlos y Cristofer protagonizaron una de las escenas que más llamó la atención a los seguidores del programa y es que los aspirantes al amor del empresario compartían una historia de amor a la vez que "competían" por ser el elegido final.
Después de una final de infarto en la ciudad del amor, la chispa no consiguió encenderse en Luis Ángel que, mientras dormía solo, en la habitación de al lado sus dos pretendientes arreglaban sus "cuentas pendientes". El afectado posteriormente descubrió el pastel, llegando a irse con otro de sus favoritos, expulsado unas semanas antes por sentirse traicionado.
Según ha podido saber FormulaTV.com, Cristofer fue agredido la noche del domingo en un supuesto ajuste de cuentas. A pesar de que sus atacantes portaban armas blancas, Cristofer no ha sufrido daños graves, por lo que no ha peligrado su vida. No obstante, según revela nuestra fuente, los agresores confundieron a la víctima con otra persona que había tratado de robarles previamente.
Cristofer y Luis Ángel
Gran acogida del formato
El estreno de la primera temporada de 'Quién quiere casarse con mi hijo' en 2012 cosechó un gran 10,9% colocándose como una de las primeras opciones de la noche y rozando los 2 millones de espectadores (1.911.000). Después de este espacio, dos temporadas más respaldaron el éxito de este date show.
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El programa ha dejado a grandes personajes que han sido carne de reality. La última de ellas ha sido Mari Carmen que después de convencer a la organización en 'Pasaporte a la isla', donde Cristian se proclamó vencedor, ha sido una de las concursantes estrella de la última edición de 'Supervivientes'.