En la temporada 2002/03 La 1 apostó por un nuevo magazine para cubrir sus mañanas. En aquel entonces cogió los espacios 'Saber vivir', 'Así son las cosas' e incluso la cocina de Arguiñano de La 2 para crear un contenedor en el que tuviesen cabida todo tipo de secciones a el fin de llegar a un gran público. Desde entonces, 'Por la mañana' ha sufrido grandes variaciones en su formato, pero lo más importante es que a lo largo de estas últimas seis temporadas ha logrado hacerse con una audiencia fiel que lo ve cada mañana a pesar de las ofertas de la competencia.
Su presentadora, Inés Ballester, se muestra contenta al frente del magazine. "Hacemos la televisión que quertemos. Además un programa de este tipo te da la oportunidad de hacerlo de mil maneras diferentes. Si ocurre algo podemos tirar la escaleta abajo y realizar una apuesta totalmente nueva y arriesgada".
A pesar de su larga trayectoria en televisión, afirma que este es su momento y que 'Por la mañana' su programa. "Me permite disfrutar y cuando hay actualidad estar ahí, y eso a mí me mantiene viva. Me pone mucho. La mañana que sé que hay alguna noticia grande que cubrir, me pongo en tensión y es lo que más me puede gustar del mundo".
FórmulaTV.com ha tenido la oportunidad de charlar distentidamente con Inés Ballester y esto es lo que nos ha contado.
'Por la mañana' está ya en su sexta temporada. Son muchos años y muchas horas en directo...
Es un lujo estar al frente de un programa durante seis años, esa es la sensación que tengo. Realmente hacemos la televisión que queremos en 'Por la mañana', y eso sería impensable en un horario de tarde o de prime time. Yo he tenido la oportunidad de vivir en directo los acontecimientos del 11-M, los funerales del Papa... Cosas que no pasan en un prime time. Yo siempre he dicho que me da igual que me llamen presentadora o periodista. Cuando ocurre alguna noticia es cuando siento que doy lo mejor de mí, es cuando me siento fuerte y segura. Me siento muy feliz con esta fórmula. En la tarde y en la noche el ritmo es otro y las cosas ocurren por la mañana. Estoy muy agradecida porque me han dejado estar ahí, contarlas, enriquecerme y, sobre todo, aprender. En seis años no he tenido ocasión de aburrrirme ni un solo día.
¿Ha habido algún momento en el que tuvieras la sensación de caer en la monotonía?
En estos seis años han pasado muchísimas cosas, el programa también ha cambiado bastante su formato, hemos pasado de hacer corazón a no hacerlo, de hacer cocina a no hacerla, de tener tertulia a no tener... Se le ha dado muchas vueltas al programa.
Por primera vez el pasado verano te tomaste un descanso.
Este verano dije que necesitaba un mes y medio o dos meses de vacaciones porque me notaba cansada y que no estaba al 100%. Los jefes lo entendieron y me dieron vacaciones. Eso me ha permitido volver con las pilas cargadas. Pero fue más bien agotamiento personal mío.
También es cierto que tal y como hoy día está la televisión es mejor no dejar un programa a no ser que te echen.
Realmente ahora mismo no hay ningún programa que dijera "me gustaría hacer esto". Un magazine lo que tiene es que lo puedes hacer de mil maneras distintas y eso con otros formatos dificilmente se puede hacer. La mayoría de programas son cerrados y requieren de otro tipo de fórmulas. 'Por la mañana' es un programa abierto. Es un verdadero lujo, ya que si ocurre algo tiramos abajo toda la escaleta y hacemos una apuesta decidida por el tema. Otra cosa es que funcione o no, pero al día siguiente podemos volver a hacer un programa totalmente diferente.
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Desde hace muchos años se habla de la guerra de las mañanas. ¿Cómo llevas la lucha por la audiencia de la mañana?
Yo siempre digo que las audiencias es un exámen que debemos de pasar. Yo entiendo que forma parte de nuestro trabajo. Si no tuviesemos audiencias no sé yo si haríamos del mismo modo el programa porque nos van marcando desde los temas hasta la forma de hacer las cosas. Hay secciones que no nos han funcionado y hemos dejado de hacerlas y otras que han funcionado se mantienen. Yo como soy positiva me lo tomo en ese sentido, creo que las audiencias nos permiten corregir el día a día.
Con los años se crean los hábitos y también se fideliza a la audiencia.
Creo que eso precisamente lo tenemos a nuestro favor con respecto a la competencia. Yo sí creo que hay un público fiel hacia nosotros. Se están fragmentando mucho las audiencias. Te queda la duda de por qué la gente elige tal vez lo más novedoso. Pero bueno, al final, hay mucha gente a la que le gusta tu trabajo y el tono que le damos en La 1. La audiencia ya sabe de antemano que el tono que se les va a dar a los diferentes temas en TVE. Nosotros somos muy respetuosos, sin sobresaltos. El público sabe que si ocurre algo nosotros se lo vamos a contar. Siempre intentamos llegar los primeros y la gente eso ya lo tiene asumido. Cuando ocurren acontecimientos importantes la gente elige La 1.
¿Hay algo que todavía hoy día te siga sorprendiendo cada mañana?
Me sigue emocionando muchísimo las historias de la gente de la calle. Cuando llevas mucho tiempo te permites compartir las cosas con la gente. Siento que soy más yo. Creo yo que comparto confesiones con ellos. Pensamos que lo hemos visto todo pero hay gente que vive en situaciones tremendas... Aprendemos todos los días.
Si tuvieras que elegir entre los programas que has presentado hasta el momento, sin duda, te quedarías con...
Con éste. 'Por la mañana' me permite disfrutar y cuando hay actualidad estar ahí, y eso a mí me mantiene viva. Me pone mucho. La mañana que sé que hay alguna noticia importante que cubrir, me pongo en tensión y es lo que más me puede gustar del mundo. 'Por la mañana' me ha permitido ser muy yo. No necesito estar forzada para nada. Estoy muy tranquila, muy relajada.
Has presentado de todo: espacios informativos, programas de videos impactantes, magazines, reality shows... ¿echas de menos esa variedad de géneros?
Lo cierto es que cada vez que me toca hacer algún concurso, siempre pienso que no es lo mío. Ahora estoy más cerca de los informativos que nunca. Me gusta mucho la política, la sigo mucho y si tuviera que hacer ahora algo sería una tertulia política. Hace mucho que no hago tertulias tranquilas. En general, el género del magazine es una mezcla de todo. Por suerte, me han dejado hacer lo que quería y eso ha sido gracias a que la gente que he tenido a mí alrededor ha confiado mucho en mí. Si se decide hacer un concurso, corazón, sucesos, entrevistas... las abordaríamos sin problema. El tiempo me ha enseñado de todo.
Hace unos 6 años presentaste 'El Bus', el primer reality show en la historia de Antena 3. ¿Cómo recuerdas esa etapa?
Ultimamente hablo mucho de 'El Bus', porque Quim que es mi compañero ahora estaba entonces de guionista en el programa. Ahora mismo con esas audiencias sería el éxito de la temporada (risas), lo que pasa es que entonces nos tocó salir después del boom de 'Gran hermano' y dio la sensación de fallido. Ahora visto desde la distancia se hizo un cásting muy inocente, de gente muy normal. No queríamos gente rara. Dio poco juego porque el formato tampoco se prestaba demasido a hacer grandes cosas. Los concursantes se pasaban todo el encierro en el bus o en un pequeño cercado. Hacíamos el programa desde diferentes ubicaciones y eso conllevaba unos grandes problemas técnicos. Aún así fue un lujazo viajar por toda España junto a Liborio García. Personalmente fue una de las mejores experiencias que he tenido.
Junto a 'Confianza ciega' fue uno de los realities de mayor éxito (A3TV) en su momento.
Lo que pasa que al emitirse tras el exito del primer 'Gran hermano' parece que fue decepcionante. Era blanquísimo.
¿Llegó a hablarse alguna vez de una segunda edición?
No, yo creo que ni se planteó una segunda edición porque técnicamente no sabes la de problemas que tuvimos. Era un programa muy complicado de realizar y de producir.
Como bien has dicho un magazine cuenta con todo tipo de secciones e informaciones, pero... ¿en cuál te sientes tú más cómoda?
A mí me gusta la actualidad. Cuando conseguimos transmitir lo que está pasando, con la intensidad del momento en el que está pasando no hace falta casi ni que yo intervenga. Yo me callaría y dejaría que la vida transcurriera a través de lo que ofrecen las cámaras. Son cosas que has de saberlas y para ello necesitas experiencia. Yo estoy disfrutando mucho. Ahora soy capaz de estar callada minutos enteros y cuando eres joven te horrorizan los silencios. Disfruto experimentando que las cosas se pueden hacer de maneras muy diferentes.
Hoy día triunfa 'España directo', y tú hace años presentaste en Antena 3 un programa muy similar llamado 'En Antena'
Es verdad (risas). Era un formato muy parecido. No teníamos los medios que tenemos ahora, los despliegues, las unidades móviles... Siempre tiene que haber un primero y a mí me ha tocado en muchas ocasiones ser la primera. De todo, al final, he aprendido y siempre con buenos recuerdos de los equipos que he ido dejando atrás.
¿Te ves muchos años madrugando para ir a 'Por la mañana'?
Duermo relativamente mal y madrugo mucho. Además cuando eres madre, ese vicio de levantarte pronto lo tienes ya más que asumido. Yo sigo ejerciendo de madre. Incluso cuando trasnochaba me levantaba temprano. Profesionalmente no tengo ni idea. Siempre hay gente que confía en tí para otros proyectos, pero espero que éste dure mucho.
Se ha llegado a hablar de una versión matinal de 'España directo'. No sé si te han llegado esos rumores...
No me ha llegado nada, si te digo la verdad. No me cuentan los cotilleos de pasillos.
¿Cómo afronta 'Por la mañana' este nuevo año? ¿Habrá alguna novedad destacable
No. Cuando llegó el nuevo equipo (Luz Aldama, Javier Pons, Carlos Fernández) se dio un giro al programa. Ellos tienen muy claro el formato y creo que han acertado. Somos una oferta muy diferenciada de la competencia y realmente este es el formato que querían y el que estamos haciendo. Si están pensando en más cosas... no creas que hablo yo mucvho con los jefes.
¿Te han llegado a proponer alguna nueva propuesta aún estando en un magazine diario y de tanta duración?
Pues sí. Cuando este verano trascendió que yo dejaba el magazine o que me lo quitaban para poner a otra persona, de repente empezaron a llamarme de otros sitios, de otras productoras, gente con la que yo había trabajado... para proponerme cosas concretas y otros para decirme que aunque no tenían nada en su cadena supiera que no iba a estar ni un sólo día sin trabajar si yo no quería. Ha sido uno de los momentos más bonitos y emocionantes que he vivido yo en mi carrera. Pasó este verano. Escuchar eso da muchísima paz y a mí eso nunca me había ocurrido.
La 1 recuperó en diciembre el segundo lugar en el ránking de audiencia. ¿Cómo ves la programación de la cadena?
Creo que han hecho una apuesta que les está dando resultado, están haciendo una programación diferenciada del resto. Realmente hay unas exigencia por parte del público. La televisión pública no puede hacer determinados productos. Nadie puede decir que no estamos haciendo una televisión competitiva. Creo que están consiguiendo una televisión de calidad.
Hace unas semanas Ana Rosa comentaba que últimamente parecía que la gente se decantaba más por los equipos que hay en los programas, más que por los espacios en sí. ¿Tienes tú la misma percepción?
Yo siempre defiendo que un mal formato, un mal programa no lo salva ni un buen equipo, ni un buen presentador. Eso lo sabemos todos. Luego están las fidelidades. Ana Rosa tiene su público y aunque un día haga un programa más flojo seguramente mantendrá su audiencia. Pero es una cuestión de gustos, de opciones. Te digo yo que como hagas 5 o 10 días seguidos un programa aburrido o escandaloso -en nuestro caso- la audiencia no lo perdonaría. Yo no creo que haya una fidelidad extrema por parte del público. Hay gente que triunfa en una cadena y luego tropieza en la competencia.
¿Qué diferencia 'Por la mañana' de otros magazines matinales?
Más que un magazine, ahora mismo yo creo que hacemos un programa de actualidad donde recogemos todo lo que está sucediendo en España en ese momento. La apuesta nuestra ha sido por la calle. Intentamos ser los primeros y contar las cosas mejor que nuestra competencia.
¿Cómo se organiza el equipo para preparar el programa de un día? ¿Cómo es el planning?
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En el equipo hay gente que tiene diferentes horarios. Unos entran a las 6 de la mañana, luego hay gente que está por la tarde y otras personas que están de guardia a otras horas. Mi jornada empieza a las seis y media, cuando me levento. Procuro oir diferentes emisoras de radio, veo al menos los titulares del informativo matinal y me recogen para ir a TVE. En el trayecto me repaso la prensa diaria. Para las 08:00 los temas ya están más o menos decididos, a esa hora tenemos la primera reunión. Luego bajo a maquillaje, peluquería y repaso la documentación de los temas. A las 10:15 horas, tenemos otra nueva reunión. Y a la tarde me voy para mi casa. Estoy siempre muy pendiente de las noticias porque me gusta. Aún así, me niego a estar en televisión 12 horas como he podido estar anteriormente.