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'Sígueme el rollo' es el nuevo concurso presentado por Sara Escudero que llegará a Ten el próximo 26 de septiembre. Pensado como un programa diario de lunes a viernes a partir de las 21:45, el formato de Secuoya tiene todas las claves para convertirse en uno de los buques insignia del canal. Jaime Guerra, director general de contenidos del Grupo Secuoya, ha sido el encargado de presentar su nueva gran apuesta de la temporada: "Hemos tenido la suerte de producirlo en España. Se ha hecho en 11 países. Por un lado es un concurso, por otro lado hay cámara oculta y luego está el humor".
Sara Escudero y Jaime Guerra en la presentación de 'Sígueme el rollo'
Sara está entusiasmada con el proyecto y quiere dejar claro que no hay nada forzado: "Si había tensión es porque se vivía así. Ha sido espectacular porque ha sido muy de verdad. Te sorprendía la cantidad de matices de las parejas. El 80% acababa emocionado, excepto dos disgustos como un divorcio que se terminó solucionando".
"Todos han sacado al niño pequeño"
Respecto al casting que han escogido, Jaime Guerra ha dejado claro "que hay gente de lo más diversa", detalle que ha sido secundado por Sara con algunos ejemplos: "Tuvimos un macarrilla que el tío cuando se vio de una determinada manera le dio un golpazo al plato y se cayó. Al final pidió perdón. El que se enfada, se enfada. Me sentí un poco Mercedes Milá cuando decían que esto era un experimento psicológico pero con humor. Ha habido tres invitadas muy cañeras. Todos, sin excepción, han sacado el lado mas cañero. ¿Sabes lo que es tener al Míster España al lado y poder tocar? Todos han sacado al niño pequeño".
Ten presenta 'Sígueme el rollo' en el FesTVal de Vitoria 2016
Sara ha querido desvelar una parte más de la mecánica del programa: "Los tres primeros niveles suelen ser mas normales y en los dos últimos es donde se ha dado el giro. Por resumir diría que la persona que ponga Ten va a ver que no está preparado, que no hay guión. Llegas a conseguir un micromundo. No hay nadie en este equipo que no haya tenido ilusión por participar, hasta el dueño del restaurante. Ha sido un placer"
Cambiará de escenario en la próxima temporada
Respecto a cómo hacen para poner un pinganillo a alguien con el pelo corto para que no se le vea, Jaime Guerra ha desvelado el secreto: A los que no podíamos ponerle el pinganillo se les ponía un esparadrapo y hacían creer que se habían cortado. Está todo muy bien escondido, nadie nos ha pillado.
Una de las dinámicas originales del programa es el cambio de restaurante tras varias entregas. Ha sido el directivo el que ha desvelado cuándo se va a producir ese cambio: "El restaurante tenia como 6 meses de preparación de las bromas y el resto seguía trabajando. Eso es nuestro set. La intención es seguir y cambiar la localización como el americano. Va a estar en torno a 22 capítulos antes del cambio".
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