Aunque parezca increíble, menos de la mitad de los actores españoles tienen la suerte de trabajar de su profesión. Sin embargo, por si esto fuera poco, el dato más preocupante en torno a esta información es que, del total de artistas, apenas un 8,17% pueden llegar a mantenerse mes a mes de los ingresos que les aporta la interpretación.
Estas cifras nacen de una investigación llevada a cabo por la Fundación AISGE en la que han querido dar luz a la precaria situación en la que se encuentra una industria que, si se analiza su evolución, no cuenta con muy buenas perspectivas de futuro. El porcentaje antes mencionado no se queda solo en un número. Ese dato supone que más de un 91% de estos profesionales no recibe más de 12.000 euros anuales por su labor profesional, ya sea en teatro, cine o televisión.
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La audiencia ya está más que acostumbrada a ver a los mismos rostros ocupando horas y horas frente a la pantalla. Pero lo que muchos no conocen es que ese pequeño colectivo que cobraría una cantidad superior a los 30.000 euros al año, no sube del 2,15% del total de actores de nuestro país. Esto, que no deja de ser una preocupación de primer nivel para el sector, ha obligado a que más del 46% tenga que buscarse otro empleo al margen del de actor para poder cubrir los gastos necesarios para mantener un nivel de vida medianamente aceptable.
La mujer, la gran perjudicada de esta situación
Si se centra la atención en la figura de las mujeres, los datos son, si cabe, aún peores. "Las actrices cobran menos, trabajan menos días, se enfrentan con mayor frecuencia al problema de trabajar sin contrato y sufren una inserción laboral más débil". Cuando la tasa de desempleo para ellas está en torno al 52%, para los actores se reduce notablemente hasta un 46%. Además, poniendo en el foco la comparación entre los ingresos medios de unos y otros, las actrices son las que destacan dentro del segmento de menos de 600 euros anuales, con un 35% frente al 24 de los hombres.
