Este martes, durante la emisión de 'Gran Hermano: Límite 48 horas', han saltado todas las alarmas en Twitter. Un mensaje publicado por un usuario que vinculaba a Adara con un trabajador de Telecinco ha indignado a los seguidores del programa, que consideran que este parentesco no es fruto de una casualidad.
La concursante cuenta con varias publicaciones en Facebook que han sido comentadas por uno de sus amigos en la red social. El chico, que además es de Alcobendas, al igual que Adara, afirma en su perfil de la red social que es Jefe de Estudios en Telecinco y trabajador de Mediaset España.La concursante tiene vínculos a través de Facebook con un supuesto trabajador de Telecinco.
Lo que podría ser una simple casualidad ha cobrado una dimensión mayor cuando se ha comprobado que el supuesto trabajador de Telecinco tiene publicadas varias fotografías desde la sala de control de las galas de 'Gran Hermano'. Este hecho conecta directamente al amigo de Adara con el programa en el que concursa en la actualidad.
Se desconoce si la relación entre la concursante y el chico es tan solo una amistad virtual sin mayor parentesco entre ambos, o bien mantienen una amistad más profunda. No obstante, el vínculo entre ambos y el programa se ha convertido en razón suficiente como para que los seguidores del programa den la voz de alarma. ¿Hay tongo en 'Gran Hermano'?
Jorge Javier hace creer a Adara y Bea que han sido expulsadas de 'GH 17'
Por primera vez en 'Gran Hermano 17', a dos días de la gala semanal, la organización del programa ha decidido salvar a dos de las nominadas dados sus bajísimos porcentajes y dejar que la expulsión sea cosa de dos. Así las cosas, la batalla entre Adara y Bea adquiere otra dimensión ahora que ambas son las únicas nominadas.
Además, hasta que se produzca la expulsión tendrán que convivir alejadas del resto, en un nuevo apartamento. A pesar de lo ocurrido, los concursantes creen que se ha producido una doble expulsión. Incluso Jorge Javier Vázquez ha acudido al plató de 'Gran Hermano: Límite 48 horas' para hacer más creíble la falsa expulsión.