Corría el año 2001 cuando 16 jóvenes entraban en la Academia más famosa de la televisión y robaban el corazón de los españoles... y su concepción del buen gusto. La moda de todo un país se encontraba en su momento más crítico de las últimas décadas y las caras de Rosa, Bisbal y Bustamante se convirtieron en el estampado más trendy de camisetas, mochilas, llaveros y hasta ropa interior.
No había ni una prenda ni un objeto cotidiano que se librara de ser customizado por el merchandising de 'OT 1', por no hablar de coleccionables ridículos y marcas absurdas a las que los triunfitos pusieron cara, aprovechando el tirón que tenían en el momento. Han pasado 15 años y, con 'OT. El Reencuentro' a la vuelta de la esquina, hemos querido desempolvar el merchandising más tróspido de nuestra adolescencia para ir al concierto de Barcelona con todo puesto, estilo árbol de Navidad versión 'OT'.
¿Alguien ha dicho colapso de la industria?
10 Discos a granel
Resulta obvio, pero debíamos empezar por ellos. Las ediciones con más éxito de 'OT' acostumbraban a sacar un disco a la semana recogiendo las canciones de la gala, además de un álbum oficial con la canción de turno compuesta por los concursantes. Sin embargo, todo el mundo quería aprovechar el éxito y en 'OT 1' hubo también discos especiales por doquier: 'OT canta Disney', 'OT, el disco del deporte', el disco en colaboración con Coca Cola, los villancicos de Navidad... Resulta casi imposible saber el número de álbumes que se editaron porque, además de las 14 galas, los especiales ya señalados y el dedicado a Eurovisión, después se relanzaron los discos por agrupaciones temáticas, centrándose solo en los finalistas o en determinados estilos musicales. Si a estos les sumamos los que después grabó cada triunfito... ¿alguien ha hablado de saturación de la industria musical?
Antes de 'OT 1' tener fotos de otra gente era de stalkers
9 El álbum de fotos
¿Quién no recuerda cómo ese año la gente se dedicaba a intercambiar fotos de 'OT' en el patio del colegio? Bisbal entrenando, Bisbal cantando, Bisbal arreglado, Bisbal arreglado en primer plano, Bisbal con Chenoa... Por algún extraño motivo, la gente quería conservar todos los momentos de los triunfitos en una especie de álbum familiar, solo que en realidad no era familiar y tener un libro lleno de fotos de otra gente ha sido toda la vida un poco de acosador. Con lo kitsch que era todo, no entendemos cómo no prefirieron lanzar el álbum de cromos adhesivos.
Atención a los llaveros siluteados
8 Los mecheros y llaveros
Hoy en día, con lo denostado que está el tabaco, sería impensable que los ídolos del momento quisiesen poner su cara en un mechero (bueno, tampoco es que Gisela, Vero y compañía tuviesen mucho poder de decisión). Sin embargo, en aquellos locos años 2000, tener tu mechero con la cara de un triunfito era la excusa ideal para iniciar una conversación con otro fanótico como tú. "¿Tienes fuego? ¡Anda, tú también eres fan de Geno!" era la frase para ligar del momento.
Una lectura apasionante
7 El 'OT' más cultural: los libros
Los habías visto pasar por los cástings, los habías visto superar las canciones de cada gala, los habías visto sudar la gota gorda con Poti y aguantar las monsergas de Nina, también adelgazar 25 kilos, los vídeos caseros de sus vacaciones de Navidad en casa y cruzar la pasarela una y otra vez. Pero todavía no te resultaba suficiente y creías que un libro sobre David Bisbal que no había escrito David Bisbal podía revelarte todos los secretos de David Bisbal. 'OT' se apuntó a la fiebre literaria con volúmenes de mucha foto y poca letra dedicados tanto al programa como a los triunfitos, que tenían como para llenar páginas y páginas tras apenas cinco meses de reality. Así de cultivados éramos en los 2000.
Seguro que también había cojines a juego
6 La (bata)manta
No, no era una batamanta, pero nos habría encantado ver la prenda más famosa de la teletienda con la cara de David Bustamante estampada en ella. Los españoles hemos sentido siempre una extraña debilidad por poner en la colcha de la cama aquello que nos apasiona, como el escudo del Atlético de Madrid. En 'OT 1' lo sabían y de ahí que hubiese hasta mantas de nuestros triunfitos, que nos protegerían en sueños con sus melódicas voces. ¿Os imagináis a un niño pidiendo por Reyes una manta de Àlex Casademunt? Hubo un tiempo en el que esto ocurría.
El premio de consolación de Javián
5 La Academia de juguete
Por si no tuvieras suficiente con todo tu vecindario queriendo ser cantante por la fiebre 'OT', las jugueteras se pusieron manos a la obra para crear una cantera de artistas desde pequeños, con todos los terroríficos berridos que ello conlleva. Esta Academia en miniatura tenía todo lo necesario para que tu hijo acabase dando una patada al aire a lo Bisbal: dos micrófonos, unas teclas que parecían el autotune, una cinta con bases musicales y una bola de luces de colores. ¡Si hasta los niños de la caja llevaban las camisetas que popularizaron los triunfitos! Con colocarte en un extremo de tu pasillo ya tenías una pasarela que cruzar cada vez que quisieses montarte las galas en tu casa.
El artista captó a Bisbal en el momento justo de disponerse a dar una vuelta
4 Las figuritas del Belén
Podías ponerla en el Belén o junto a la colección de botellines de Sagrillas, estas figuritas de los triunfitos en miniatura te combinaban con cualquier elemento de la casa. Fijándonos en la de Bisbal, no le faltaba detalle: la camiseta sin mangas con estampados imposibles, los pantalones de cuero acampanados, el prominente bíceps resultante de las clases de gimnasia, el matojo de tirabuzones... ¡y hasta brazos articulados! Cuidado, que estaban esculpidos con tanto dinamismo que, los pusieses como los pusieses, el pequeño Bisbi no perdía la posición previa a la doble vuelta y patada. Y encima, si te hacías con la de Chenoa, podías montarte tus propios culebrones. ¡Larga vida al escultor!
El de Nuria Fergó huele a brisa de esperanza
3 Los perfumes de 'OT'
Rebuscando en las páginas de anuncios encontramos que alguien, 15 años después, continúa vendiendo en Internet estos pequeños perfumes de los triunfitos sin haberlos usado, literalmente. Decimos perfumes porque vienen en frasco pequeño, pero la caja deja claro que es "eau de toilette" de la barata. ¿Olerá cada botecito de forma diferente? ¿Tendrán una gota de sangre de cada triunfito como la colonia de Lady Gaga? ¿Alguna vez se pondría Natalia su propia fragancia? Las preguntas que se nos vienen a la cabeza son muchas sobre estos perfumes con más pinta de estar destinados a decorar el lavabo rosa de una tía abuela que nunca los abrirá que otra cosa.
Los chicles de 'OT' sabían igual que el resto de chicles de la tele
2 Los chicles de fresa insulsa
La versión barata del álbum de fotos coleccionable eran los chicles con pegatinas, esos chicles de sabor fresa insulsa que lo mismo valían para 'OT 1' que para los 'Power Rangers'. Como en el capítulo del puerto de 'Los Simpson', había un encargado de envolver los mismos chicles en diferentes papeles y listo. La felicidad de comerte un chicle que te pudiese evocar un programa de televisión es a día de hoy todo un misterio sinestésico del marketing de la década pasada, pero con la tontería de coleccionar las pegatinas para completar tu póster seguro que más de una madre tuvo el cerebro taladrado con las demandas de sus hijos.
¡A mis pies, Bisbal!
1 Los calcetines bordados con la cara de Bisbal
Solo hemos encontrado los de la cara de Bisbal, pero nos consta que también los había de Bustamante y de Rosa. Llevar a tu triunfito favorito oliéndote los pies y siempre dispuesto a sonreírte cada vez que te descalzabas debe ocupar, sin duda, el Top 1 del merchandising tróspido del programa. Seguro que más de un padre tuvo que coserle los tomates a unos calcetines de Rosa de España porque su hijo quería tenerlos a punto para ponérselos -de nuevo- mientras sonaba el "Europe's living a celebration" desde Estonia.
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