La fama y el dinero, como el propio David Bustamante ha reconocido en el segundo documental de 'OT. El reencuentro', fue uno de los aspectos que más les costó gestionar al salir de la Academia. Para ello, necesitaron la ayuda de psicólogos una vez finalizado el concurso, aunque durante todo el programa tuvieron la ayuda de una profesional que les preparó para lo que iba a suceder.
La experta en esta materia ha querido entrar en directo en el programa de Televisión Española, 'La Mañana', para dar las claves que ayudaron a los triunfitos a gestionar esas "nuevas experiencias" que el concurso les traía. "Ni siquiera nosotros éramos conscientes de lo que iba a suponer", ha querido dejar claro la doctora María Palacín. "Digerir la fama es muy difícil. El fracaso pronto tiene un apoyo moral que te ayuda a superarlo, en cambio la fama es mas complicada de gestionar por la falta de apoyo social", remarcaba Palacín.
María Palacín, psicóloga de la primera edición de 'OT', en su intervención en 'La Mañana'
En sus propias palabras, lo que necesitaban era comprensión "de la sociedad, pero la gente no podía comprender que tardasen tanto tiempo en adaptarse". Es cuando otro de los expertos, que se encontraba en el programa matinal de TVE, ha querido matizar que cada concursante asumió la fama conforme a su propia personalidad: "David Bustamante era un hombre sencillo y bueno, vino a ganar mucho dinero de golpe y con ayuda lo gestionó bien".
"Sus vidas ya no iban a ser las mismas"
Otro de los aspectos que se han tratado en esta conversación es el cambio de vida al que se iban a enfrentar. "El estrés se tiene que gestionar mediante un proceso de adaptación. Hay que saber llevar también la perdida del anonimato, de que tu vida va a ser otra", ha recalcado María Palacín, refiriéndose a todo lo que les iba a esperar fuera.
Chenoa llegó a reconocer que hubo momentos "que quería volver a la academia. Encontraba más seguridad dentro que fuera". Y en relación a esto, Palacín ha querido también sacar el ejemplo de Rosa López diciendo que había crecido dentro "de una vitrina" que era el programa. La entrevista ha acabado reconociendo que donde más apoyo deberían recibir era de "sus familias, pero ellas tampoco estaban preparadas para todo lo que les venía encima".
