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Lejos quedan ya esos cara a cara que parecía que habían conseguido algo imposible en la casa de 'Gran Hermano 17', la concordia entre Miguel y Adara. Las nominaciones de esta semana siguen escociendo entre los concursantes y mientras Clara se pasea vencedora por Guadalix, Adara entra en el trapo con un solo movimiento de ceja.
Clara y Miguel se pavoneaban en la radio de la gran noche de la gala frente a un Pol y una Adara abatidos ante la que puede ser su última semana juntos. "Hay que entender a mis colegotes que están un poco rabiosos con el tema", bromeaba Clara hablando directamente a la triste pareja. Un envido ante el que la exazafata no se achantaría: "Rabia tendrás tú, que tienes que nominarnos a los tres". Se trataba de un juego de provocaciones donde los problemas habituales entre las concursantes desembocarían sin frenos en una nueva discusión.Por su parte, Miguel intentaba seguir con su conversación con Clara sobre los divertidos juegos de palabras que utilizaron para su salida del armario en la gala y escoger su recorrido de Halloween. Adara no les dejaba continuar dispuesta a enfrentarse a las provocaciones y a recordarle su "amistad" con Pol: "Me estas vendiendo la moto con tu jueguecito sucio", consiguiendo que el modelo saltase: "Eres una homófoba y estás obsesionada conmigo. Déjame en paz". Fue una discusión a cuatro, donde Pol y Clara también se enzarzaban volviendo a poner en cuestión a la pareja: "Tenéis una relación muy tóxica. No me importáis una mierda", sentenciaba la comercial.
Miguel y Clara, más unidos que nunca
Gracias a la entrada de la madrileña en el Club y tras la marcha de Fernando hace dos semanas, el modelo y la comercial se han convertido en una pareja inseparable. El mal momento por el que pasa el gallego provoca que haya encontrado a Clara como su principal fuente de desahogo, quien le pide que no estropee su concurso: "Yo creía que tenía un amigo de verdad y no", decía entre lágrimas.
La cruzada contra el grupo minoritario ha sido continua desde el principio del concurso donde Clara y Miguel siempre han perdido. Con Pol en la palestra, seguramente, su suerte cambiará pero la marcha del luchador genéticamente perfecto resultaría un duro golpe para el "trampantojo", que lleva toda la semana enfrentándose a los reproches de su examigo, pero un paso más para establecer este fuerte vínculo de cara a grandes duelos para las próximas semanas en la sala de expulsiones.