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'Operación Triunfo' no es solo "Mi música es tu voz", es mucho más que eso. El 29 de septiembre de 2003, 17 jóvenes con una mochila cargada de ilusión entraron en la Academia más famosa de España para demostrar su talento a todo un país. Pero no todo fue de color de rosa, ni mucho menos. FórmulaTV ha tenido la oportunidad de conocer la experiencia de muchos de los protagonistas de la tercera edición de 'OT', una generación que, según ellos, sufrió el desgaste de un formato cuya cara más oculta está dejando a relucir los secretos más desconocidos de la que les vendieron como una "auténtica fábrica de cumplir sueños". ¿Fue realmente un fracaso? ¿Cuáles fueron los motivos por los que 'Operación Triunfo 3' dejó de ser un fenómeno social?
Los concursantes de 'Operación Triunfo 3'
1 Una edición de compromiso con TVE
"Ellos tenían un compromiso con TVE que acababa después de las tres primeras ediciones, y lo que hicieron con nosotros fue 'terminar de matar a la burra' para después relanzarla en Telecinco". Y así es como sucedió. Un año y medio después, 'Operación Triunfo' aterrizó en la privada con un formato totalmente renovado que supuso el renacer del concurso con una subida de casi un millón y medio de espectadores. "Tuvimos promoción cero, interés cero por parte de la productora, porque venía bien ver morir el formato para luego volver a verlo modernizado en otra cadena", admite Mario, uno de los finalistas de 'OT 3'. "Ellos sabían perfectamente lo que hacían y cómo lo hacían con nosotros, explotaron la vaca hasta que no daba más leche".2 'OT 3', olvidada hasta por la propia cadena
A lo largo de los trece años que han pasado desde que finalizase la andadura de 'Operación Triunfo' en la pública, el estigma de que la tercera es la "edición olvidada" siempre ha estado presente. "Lo que más me molesta es que nos excluyan, porque seguimos luchando para estar en esto con mucho más mérito que los demás", relata Miriam. Y es que según la versión de muchos de ellos, el hecho de que su generación pasase mucho más desapercibida que las demás fue una cuestión intencionada por parte de los responsables del formato. "Te da coraje al ver la comparativa con otras ediciones. Todo lo que hicimos fue porque nosotros lo conseguimos. Con la 1 y con la 2 hicieron un montón de cosas que con nosotros no hicieron", comenta.
Tal y como relata Fede, más conocido al otro lado del charco como Sonny Monreal, en su edición "no pusieron todo el empeño que tenían que poner en cuanto a producción, entrevistas o giras. Ni siquiera las canciones eran tan buenas como las de las ediciones anteriores, eran temas que no emocionaban a nadie". Queda claro que, como ellos mismos expresan, "no te conviene dar promoción a un sitio del que te vas", por lo que es comprensible que no tuviesen presupuesto "ni para vestuario", como nos ha contado Sonia. Según los triunfitos de esta edición, una de las pruebas más fiables de que la propia organización quisiese hacer de ésta la "edición olvidada" mucho antes de acabar con ella se demuestra hoy en día, ya que cuando se ponen en marcha especiales por parte de TVE haciendo un repaso a los momentos más destacables del concurso, sus nombres no solo no aparecen, sino que se tratan con sorna recurriendo como broma a su poca presencia en las grandes plataformas de comunicación. Pero en fin, al tratarse de una cuestión ya asumida por ellos mismos, algunos como Bea confiesan que se ríen entre ellos, porque el hecho de no tener tanta repercusión social "fue una suerte" para poder seguir con sus vidas.
3 Ni rastro de los contratos
"No sabíamos qué habíamos firmado, lo que queríamos era entrar". Esta es la versión oficial de la gran mayoría de los participantes de 'OT 3'. Sin copia de ningún tipo, los 17 jóvenes que decidieron confiar en un programa de televisión todas sus ilusiones se encontraron de bruces con una auténtica "Biblia" que apenas pudieron comprobar en los 45 minutos previos al arranque de la Gala 0 y su consecuente entrada en la Academia, tal y como han expresado concursantes como José, de Castellón. "Con la ilusión que teníamos, era imposible no firmar", confiesan.
Pero claro, este acto tan solo fue el inicio de un futuro profesional repleto de "zancadillas" en el que, por motivo de las supuestas innumerables cláusulas que conformaban el contrato, les tuvieron "maniatados" durante los más de dos años que tardaron en darles la "carta de libertad". "En todo ese tiempo estaba totalmente perdida, teníamos miedo de hacer algo y que luego nos pudieran vetar de una o de otra forma", relata Sonia. Alguno de sus compañeros decidió rebelarse y presentarse en las oficinas de Gestmusic para releer qué habían firmado exactamente y volver a dejarlo allí. "Hasta que conseguimos la carta de libertad, sufrimos unas amenazas y unas coacciones para poder cantar con quien nos diese la gana que duraron mucho tiempo después de salir de la Academia", declara Israel al referirse a esta cuestión.
Ramón, Vicente y Miguel, los tres finalistas de 'Operación Triunfo 3'
4 Un futuro profesional repleto de "zancadillas"
Y como era de esperar, cuando Gestmusic "decidió dar carpetazo" a esta tercera entrega, llegó "el abandono total y absoluto". "Yo salí un lunes, y el martes estaba en mi casa sin saber qué iba a ser de mí; tenía que retomar mi vida y no sabía para dónde tirar justo cuando me habían puesto el caramelo en la boca", apunta Sonia, la veterana de su edición. El aprieto en el que se encontraron "era para tener que hacerte un seguimiento psicológico", porque en un momento en el que "ni hacían ni dejaban hacer", los 17 se encontraron sin poder recurrir a la marca 'OT' para actuar, sin tener la oportunidad de recurrir a plataformas paralelas y con las ganas de hacer una gira por su cuenta que nunca llegó por la imposibilidad de juntarse más de tres de los participantes en un mismo escenario.
"Estábamos blindados", coinciden muchos de ellos. "En una gala benéfica en Lorca tuvimos que ir todos al abogado para pedir una autorización, y eso duele, porque no estamos haciendo nada malo". Pero esto no fue lo más duro del hecho de que la organización actuara como cortapisas de sus incipientes carreras en la música. "Guarrearon muchísimo desde que salimos. Primero nos dijeron que allí nos llevaban ellos y que no podíamos contactar con ningún representante. Al cabo de unos meses de ver que no nos llamaba nadie, les llamamos nosotros haciéndonos pasar por gente que quería contratarnos y nos dijeron que no nos llevaban ellos y que no tenían ni idea de cómo ponerse en contacto con nosotros", asegura Israel.
5 Las cuestionables intenciones con el sistema de votaciones
Una de las novedades "estrella" con las que contó la tercera edición de 'Operación triunfo' fue un cambio total de la dinámica del concurso. A diferencia de las dos primeras entregas, la organización decidió que fuese el público quien votase cada semana, quedando en la palestra los cinco concursantes con menos apoyo de la audiencia. De este grupo, un salvado por los profesores, otro por parte del jurado y un último por los compañeros de Academia se librarían de la expulsión, que una vez más estaría en manos de los mensajes y llamadas de los seguidores del concurso.
"El primer error fue cambiar el sistema de votaciones. Creo que hacer que el público votara cada semana a todos los concursantes fue para ganar más dinero y luego invertir esa inyección en la nueva cadena", reflexiona Miriam, una de las protagonistas de esta tercera generación 'OT'. Otros como Jose, que salió del concurso tras tres semanas de encierro, asegura que "con los ingresos en votos ganaron más que en ninguna otra edición del programa antes emitida".
Y esta no es la única sombra que emborrona las cuestionables intenciones por parte de la organización de poner en marcha este giro estratégico. Tal y como se rumoreó en su momento, tanto en esta como en otras ediciones de 'Operación triunfo', una supuesta manipulación en los votos sigue estando en el pensamiento de muchos. "A ciencia cierta no te puedo confirmar algo que no he visto, pero uno tiene sus sensaciones y sus impresiones, he visto detalles que luego vas encajando", nos confesaba Mario. "Es imposible que estén dispuestos a dejar en manos del azar el rumbo de un programa con tanta repercusión, supongo que habría un cierto porcentaje para que ellos lo jugaran como quisiesen", continúa. Otros compañeros como Fede tampoco toman como algo descabellado esta posibilidad, afirmando que "si tienes una discográfica y toda España quiere que salga alguien, pero tú crees que vas a ganar más dinero con otra persona, ¿tú qué harías?".
6 Un supuesto fracaso que sigue generando beneficios
Coincidiendo con las duras declaraciones vertidas por parte de Toni Cruz en las que habla de esta edición como una auténtica "cagada", todos los resortes saltaron por los aires cuando Israel desveló que "después de trece años no es que hayan ganado dinero con nosotros, es que siguen ganándolo". "Con la inocencia que teníamos entonces no lo veíamos como un negocio, sino como la oportunidad de empezar una carrera, no de que otros hicieran carrera con nosotros, que fue lo que realmente hicieron", apunta. Y es que toda la polémica con respecto al reparto de royalties que ha sacudido los cimientos de otras ediciones también tiene su hueco en la tercera. "A mí me siguen llegando royalties cada seis meses. Al principio eran unos ingresos de unos 3.000 euros y hoy en día es una cantidad irrisoria, pero eso es lo que me estoy llevando yo que tengo un 0,07% de cada disco. El otro casi 100% se lo está llevando él, por lo cual, que se lave la boca antes de hablar de nosotros", sentencia en alusión al comentario del creador del formato.
Borja y Miriam en la Gala 0 de 'Operación Triunfo 3'
7 La marca triunfito, ¿un lastre a nivel profesional?
"A nivel profesional no ha sido muy favorable dentro de que a nosotros tampoco nos han ayudado, ha sido un camino muy difícil", reflexiona Sonia con respecto al peso que ha supuesto la marca 'OT' en sus vidas. "Al salir de la Academia hice un single que estuvo a punto de entrar en Vale Music, pero al final por la etiqueta de ser de 'Operación Triunfo' no me lo cogieron". Un dato muy esclarecedor que coincide con la experiencia de Sonny, que "para entrar en 'Hoy no me puedo levantar" tuvo que pasar "muchos más castings que los demás, porque a raíz de 'OT' parecía que tenía que convencer más a la gente de mi talento".
"Hay gente muy válida, pero el ser triunfito puede convertirse más en un estigma que en una ayuda", comentaba Israel haciendo referencia a Mai Meneses, primera expulsada de la segunda edición que, con el tiempo, llegó al estrellato al darse a conocer con un nuevo nombre: Nena Daconte. "Se ocupan más de recordarte lo mal que fue tu edición que de valorarte musicalmente", asume. Porque como bien dice Mario en otra entrevista, "parece que si no sales en la radio no haces nada, y eso no es así, porque nos estamos partiendo la vida por seguir con la música". Otra cuestión que ya levantó polémicas en los inicios del concurso, es que "a los músicos también les jorobó mucho que tuviésemos un apoyo que ellos no tenían. Cuando ibas con la coletilla OT, muy poca gente te sonreía". Y es que, aunque muchos lo consideren un fracaso, 'Operación Triunfo 3' "fue disco de oro con el recopilatorio", con el que vendieron cientos de miles de ejemplares que aún a día de hoy siguen trayendo cola.
8 'Crónicas marcianas' y su papel decisivo en el dato de audiencia
A priori parece una tontería, pero el hecho de que el formato no tuviese cabida en otros programas de televisión conllevó a que la marca 'OT' no estuviese en boca de todos y esto puede ser el motivo para que dejase de ser un fenómeno social. Más allá de las galas de los lunes y algún que otro debate en programas de la pública, no se hablaba de 'OT' en ningún otro sitio, lo que provocó que solo los espectadores que seguían la cita semanal con el espacio estuvieran al tanto de lo que sucedía dentro de la Academia.
"En 'Crónicas marcianas' no salimos, a pesar de ser de la misma productora". Para el late night presentado por Sardá, aunque comentaron la Gala 0, 'Operación Triunfo' dejó de existir de la noche a la mañana, lo que provocó inevitables diferencias con respecto al impacto brutal que supuso para otras ediciones el hecho de que sus contenidos fuesen el centro de las tertulias más seguidas por la audiencia. "Los de las dos primeras ediciones reventaron todo el mercado musical y, obviamente, para nosotros ya no quedaba hueco, entonces a la cadena no le interesaba meterse en ese conflicto. Es por eso que nos cortaron todas estas vías. La audiencia se controló cortándonos el grifo tanto de Crónicas como de Los 40 Principales", confirma Mario.
9 ¿Una Academia para cantantes o para productos?
"A lo largo del tiempo ves cómo se maneja la vida de las personas, que como persona no importas, importas como producto, como un número", declara Mario. Y es que al igual que ha sucedido con otros formatos de telerrealidad, la presión por el encierro y las cámaras era todo un hecho palpable. "Hice un casting muy bueno, estaba muy enfocada en mi objetivo profesional, y cuando entré me desinflé mucho, estaba muy perdida, con los temas que me ponían no me acababa de encontrar". Este argumento defendido por Sonia coincide directamente con el que expresó Alejandro Parreño ('OT 1') en unas suculentas declaraciones para 'OT. El rencuentro' en las que confesaba no haber salido muy contento del programa por su falta de afinidad con los temas que le hacían cantar. "Proponía temas y no me dejaban hacerlos, me encasillaron por el latino, con una imagen del tipo Jennifer Lopez en la que no encajaba. Era todo un poco artificial, y a mí eso me perjudicó", cuenta la cantautora.
Mario, que en estos momentos se encuentra inmerso en su proyecto Inuit, habla de favoritismos al afirmar que "un par de semanas me daban temas que no me gustaban y a otros compañeros les dejaban cantar por Los Beatles o Robbie Williams. Yo solo estuve nominado una vez, y para elegir un tema me pusieron muchísimas trabas. Supongo que habría rifirrafes entre la productora y según qué artistas, pero esa vez me llevaron a una reunión para hacerme cambiar de idea". Según su experiencia, "el golpe de realidad es evidente, porque yo quería ser músico, no la realidad que te planteaban allí, en la tele te vendían una ficción". Nur, una de las más jóvenes del concurso, está satisfecha con haber podido desvincularse del formato porque "si hubiese continuado con ellos, igual me habrían obligado a hacer cosas que no habría querido hacer". Y es que nunca hay que olvidarse de que, como nos ha dicho el propio Israel, "yo no quería ir a 'Gran Hermano', entré en 'OT' para conseguir una carrera musical".