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"Hecho histórico" lo denominaba Jorge Javier Vázquez. "Tomadura de pelo", jaleaban las redes. Lo cierto es que el duelo con sabor a final que se vivía el pasado jueves 17 de noviembre en la 17ª edición de 'Gran Hermano' no iba a dejar indiferente a nadie. Clara o Adara abandonaría el concurso dejando a una buena parte de la audiencia del reality huérfana de su campeona.
La rivalidad entre ambas se había trasladado a la calle, y el juego al que 'Gran Hermano' está acostumbrando a la audiencia trae consigo consecuencias como ésta. 'GH VIP' abría la puerta a los sorpassos, las remontadas imposibles y, por lo tanto, un baile de cifras que se han trasladado en las posteriores ediciones. Unas carreras de vértigo de las que no ha quedado exenta de vivir esta edición, donde hasta el último momento puede cambiar el futuro de un concursante dado por sentenciado.Porcentajes tras la expulsión en 'Gran Hermano 17'
Las quejas no son nuevas, pero el hecho de que solamente tres llamadas evitasen la salida de Adara han dolido, y mucho. Lluís, hermano del "cucho" Pol, estallaba durante la gala a través de su cuenta de Twitter, acusando al programa de estar manipulado. El atractivo hermano del luchador genéticamente perfecto increpaba a la audiencia su capacidad de consentir los tongos del reality, llegando a asegurar que si Jorge Javier Vázquez llegara a admitir que el programa es una gran mentira y llamara a la audiencia "tonta" en su propia cara, 'Gran Hermano' mantendría los datos. Un malestar que no quedo reflejado mucho tiempo en las redes, puesto que según apunta Lluis le cerraron la cuenta del pájaro azul poco después.
Las tres llamadas del victimismo
Lo cierto, es que 'Gran Hermano' ha sabido aprovechar muy bien los duelos que propician los enemigos íntimos de Guadalix. Tanto, que no es la primera vez que el programa vive este tipo de acusaciones y que obligaron a que en la 15ª edición, y tras los numerosos movimientos en redes por la "sospechosa salvación" de la que después sería la ganadora de la edición, Paula, el programa "presentara" entre el público al tan odiado notario en una gala de similar tensión a la vivida la semana pasada.
El pasado duelo supuso una continua actualización de los datos donde uno de los porcentajes no paraba de subir y comerse al enemigo, donde la duda real reside en cual de las concursante fue la que hizo esa remontada. Mientras Jorge Javier bromeaba con que "tenía que llegar yo para que esto pasara", Clara tenía, valga la redundancia, claro cual era su destino: "Estaba claro Adara, por mucho que quieran poner tensión, no hay tensión alguna", admitía la comercial tras conocer su expulsión. Una victoria con una base sólida según la expulsada, puesto que tal y como admitía desde la sala de expulsiones: "Son tres llamadas de diferencia que se basan en un victimismo absoluto".