Ana Pastor reconoció en 2015 que una persona a la que iba a entrevistar en 'Los desayunos de TVE' le mandó un mensaje al móvil advirtiéndole de que si le preguntaba por un tema concreto su futuro en TVE podría tener los días contados. "No voy a decir el nombre, pero cuando alguien se permite el lujo de decirte eso es porque quizá alguna vez le ha funcionado. ¿Qué ocurrió? Que se sentó a mi lado y yo hice exactamente la entrevista que quería hacer. Es verdad que un tiempo después ocurrió lo que ocurrió", aseguró la periodista.
Ana Pastor presenta 'El Objetivo'
Con Ahmadinejad llegó la fama
Aquellos momentos de tensión y aquellas preguntas duras hicieron de Ana Pastor un fenómeno televisivo que incluso llegó a trascender las fronteras de este país. Lo hizo con su entrevista al presidente iraní Mahmud Ahmadinejad. Le preguntó por la "ejecución de homosexuales" y por la lapidación de mujeres, y Ahmadinejad se resbaló como una pastilla de jabón poniendo en duda que el "pueblo europeo pueda intervenir en los asuntos iraníes". Sin embargo, de aquella entrevista el titular que dio la vuelta al mundo no fue que Ahmadinejad reconociese que en Irán se violan los derechos humanos. No. Lo que todavía se recuerda es que el velo de Ana Pastor fue deslizándose poco a poco hasta dejar completamente descubierto su pelo.
Ella dice que ni se dio cuenta de que había perdido el velo, pero incluso aunque fuera consciente, aunque lo hubiera dejado caer como gesto reivindicativo, no es culpa suya que toda la atención mediática se centre en un detalle tan insignificante. La culpa es de quienes priorizaron aquella anécdota como si se hubiera tratado de una sublevación. Sea como fuere, Ana Pastor, como cualquier persona que se expone ante el gran público, sabía que se estaba convirtiendo en un personaje televisivo. Y como tal, son importantes una serie de cualidades que te hagan especial, que te diferencien de los demás: las formas, el estilo, los gestos, el tono... Es decir, la telegenia.
Críticas y alabanzas
Sobre Ana Pastor se ha dicho que es valiente, crítica, incisiva, imparcial... Pero también lo contrario, que en el fondo es más benevolente con la izquierda, que su insistencia resulta contraproducente y que utiliza el lenguaje no verbal para desacreditar las respuestas que no le gustan: una sonrisa pícara, el ceño fruncido, la mirada que se desliza y las apostillas casi onomatopéllicas; una técnica peligrosa que impacta en el subconsciente de los espectadores y que para muchos semiólogos es la forma con la que algunos comunicadores le dicen a la gente qué tiene que pensar. Podría ser o no el caso de Ana Pastor, pero sin duda es algo que deben tener muy presentes los profesionales de la comunicación, y algo que deben cuidar mucho aquellos que pretendan ser todo lo neutrales que permita la naturaleza humana.
Y al menos neutral parece Ana Pastor si nos fijamos en los momentazos que ha compartido con algunos de sus entrevistados. PP, Podemos, PSOE, Ciudadanos, Izquierda Unida, Esquerra, Marine Le Pen, Rafael Correa... Ninguno se libra de tener que responder a alguna pregunta incómoda y hay políticos de todos los partidos que, por el motivo que sea, han acabado protagonizando alguno de esos momentos icónicos que regala la televisión. Aquí van algunos de ellos.
1 Encontronazo con Cospedal por la independencia de TVE
Los seguidores de Ana Pastor están acostumbrados a que en todas sus entrevistas se produzcan pequeños momentos de tensión provocados por alguna pregunta delicada o por la insistencia de la periodista. Sin embargo, el encontronazo con Cospedal por la independencia de TVE fue diferente. En primer lugar porque la pregunta que desencadenó el enfrentamiento no la hizo Pastor sino un tertuliano de 'Los Desayunos', y también porque la presentadora entró al debate aportando su propia opinión de los hechos, algo que enfadó bastante a la secretaria general del PP.
2 ¿Ha acogido inmigrantes en su casa?
Ana Pastor vestía una chaqueta negra de cuero, quizá un anticipo de cuál iba a ser el tono de la entrevista. Frente a ella estaba sentada la líder del Frente Nacional francés, Marine Le Pen, la mujer que está alimentando el discurso racista y homófobo en Europa. Y sobre ello le preguntó la periodista, sobre la crisis de refugiados que está regando de muertos las costas del mediterráneo.
3 Difícil papel de moderadora
A Ana Pastor también le tocó lidiar con los enfrentamientos entre los tertulianos de '59 segundos'. Épico fue el que protagonizaron Isabel San Sebastián y José María Calleja cuando este acusó a la periodistas de haber "engordado" a ETA. San Sebastián se enfadó sobremanera y pidió que se rectificaran estas palabras o abandonaría el plató. Calleja se mantuvo firme, así que la periodista se fue por donde había llegado.
4 "Aquí los asuntos importantes no solo los decide usted"
Las entrevistas que concede Esperanza Aguirre suelen ser siempre una lluvia de titulares, y si quien le hace las preguntas es Ana Pastor, los momentazos están garantizados. Así ocurrió en octubre de 2010, cuando la por entonces presidenta de la Comunidad de Madrid asistió al plató de 'Los Desayunos'. Nada más empezar la entrevista, Pastor le preguntó por unas declaraciones de Miguel Ángel Revilla, y Aguirre se negó a responder porque consideraba que había otras cuestiones más importantes sobre las que hablar. Pastor le dijo lo siguiente: "Ya sabe que aquí las cuestiones importantes no solo las decide usted". Un día después, Aguirre criticó que la entrevista había sido "un interrogatorio", y, al cabo del tiempo, la periodista reconoció que quizá no estuvo "acertada".
5 Alfonso Guerra se niega a contestar
Precisamente porque Ana Pastor se ha convertido en un personaje televisivo (en una referencia informativa o en una polemista, depende de quién lo diga), son muchas las veces que le han preguntado a ella misma por cuáles han sido sus entrevistas más peliagudas. Una de ellas fue esta con el socialista Alfonso Guerra, "que no quiso contestar a nada", dijo Pastor.
6 Anita Pastor
La entrevista con el presidente de Ecuador subió de tono cuando le preguntó por su ley de medios. Rafael Correa le contestó con otra pregunta: "¿Usted cree que yo soy un represor?", provocando así que la periodista saliese al paso con una de sus frases más populares: "No estoy acostumbrada a responder preguntas en las entrevistas". Pero además, Ana Pastor pidió al presidente ecuatoriano que no le llamara "Anita". Poco después, Pastor explicó en una conversación con estudiantes que le incomoda que una persona con la que no tiene confianza le trate con tanta cercanía.
7 Rubalcaba se cierra en banda
Con el ex ministro del Interior no hubo mal rollo pero Ana Pastor no desaprovechó la oportunidad para insistir tantas veces como le fue posible. Pero Rubalcaba es un orador muy hábil y no duda en cerrarse en banda cuando no le apetece responder a alguna pregunta. Y claro, Pastor insiste.
