'Cámbiame': Natalia llena de amor el plató con una cita a lo 'First Dates'

Una vez más, el programa de estilismo más famoso de Mediaset ha vuelto a demostrar que además de cambiar físicos, puede cambiar vidas. En esta ocasión, 'Cámbiame' ha reencontrado a dos personas que se conocieron en un episodio anterior y que nunca más volvieron a verse, pero entre los dos surgió un flechazo y se encendió la llama del amor. Se conocieron el pasado 26 de octubre cuando ambos acudieron a 'Cámbiame' con historias diferentes pero con el mismo objetivo: cambiar de estilo.

El miércoles 7 de diciembre, Carlos regresaba al programa pero, esta vez, no para pedir un cambio. Tras la frase "Fue que no, pero igual dentro de poco es un sí", entró y se atrevió a pedir una cita con Laura. "Se me olvidó pedirle el WhatsApp, ese día hablamos muchísimo y ahora quiero reencontrarme con ella", dijo el chico antes de que Natalia se levantara de su silla para proponerle un cambio instantáneo. Lo que él no sabía era que Laura también estaba allí.

Después de recortarle la barba, cambiarle el color del pelo y ponerle un look mucho más elegante, las puertas se abrieron para recibir a Laura, que le repitió una y otra vez lo guapo que estaba y se lanzó a abrazarle. Natalia hizo de Carlos Sobera y pidió que sacaran una mesa para que pudieran disfrutar de una cita a lo 'First Dates' en medio del plató. El encuentro concluyó con un beso y con los estilistas bailando al son de 'Love is in the air'. Ahora les toca continuar en la calle con lo que el programa ha empezado.

La pareja se conoció en el programa

Carlos, un chico de 27 años, llegó al programa pidiendo que le enseñaran a afeitarse y a cortarse el pelo, pero no llamó la atención ni de Pelayo, ni de Cristina, ni de Natalia, que no dudaron en apretar el pulsador. Laura, una rubia de 22 años, pisó la pasarela para contar su triste historia: sus padres se divorciaron, pasó tres años ingresada por trastornos alimenticios y tuvo una hija muy joven. Ahora es madre soltera y buscaba un cambio inmediato. Esto tocó el corazón de Natalia, que se encargó de ayudarla. Los dos pasaron mucho tiempo hablando y hasta el miércoles no habían vuelto a verse.