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La primera mitad de la temporada siete de 'The Walking Dead' llegaba a su fin el pasado domingo 11 de diciembre en Estados Unidos y el lunes 12 en España. Los seguidores de la serie se mostraron muy decepcionados con algunos capítulos de la midseason porque no contenían escenas interesantes y con el final porque no les gustó ver a Rick, el líder de Alejandría, como una persona débil y sumisa a Negan.
Rick y Aaron en "Hearts still beating"
En cuanto a su personaje, Lincoln reconoció que se había tragado el orgullo durante mucho tiempo pero que, después de todo, Rick "ha aprendido muchas lecciones sobre la mala toma de decisiones, a escuchar a los demás, sobre la compasión, la previsión y todas esas cualidades que el orgullo pudo haberle arrebatado" y, que el final del capítulo, "es el comienzo del resurgir, pero todavía hay un camino por recorrer".
¿Qué pasó con Rick en el final de la midseason?
El episodio "Hearts still beating" puso punto y final a la primera mitad de la séptima temporada. En él pudimos ver cómo Rick volvía a casa, después de un tiempo buscando provisiones, y se reunía con el líder de los Salvadores para entregárselas. Durante su viaje, Aarón y él se jugaban la vida atravesando un río plagado de zombies con una barca llena de agujeros.
Después de la tempestad siempre llega la calma, y eso le ocurrió a Rick. Cuando pensaba que las cosas no podían ir peor, se reunió con Michonne, que le dio un discurso esperanzador. La chica le recordó que ambos están juntos en todo y que deberían unirse para terminar con la situación. La charla sirve a Rick para reaccionar, sacar su lado más valiente y partir hacia Hilltop para reunirse con los suyos y, entre todos, pensar un plan para acabar con Negan.