La expresidenta de Madrid no duerme agusto desde que Manuela Carmena aplicó el protocolo antipolución. La capital se ha unido a una medida que se hace en distintas ciudades europeas: la restricción de los vehículos por las matrículas pares o impares. El jueves, los coches con la matrícula par no podían circular por la M-30, tal y como le sucedió a la política del Partido Popular, quién montó un drama al ser una de las afectadas: "Estoy encerrada", lamentaba la portavoz de la formación azul en la cadena esRadio.
Esperanza Aguirre en 'El programa de Ana Rosa'
Como no nos ha quedado claro su opinión, Aguirre ha acudido al plató de 'El programa de Ana Rosa' para afirmar que en su candidatura también estaba previsto trabajar contra la contaminación: "Si hubiera seguido gobernando el PP, me hubiera tocado aplicar el protocolo, pero estos señores han bajado los límites por debajo de los de los de la OMS", decía. Es la primera vez que España toma consciencia real del problema que se vive en Madrid, pero la diputada asegura que "con el protocolo de la señora Botella también se hubieran tomado medidas restrictivas".
"Se hubiera activado el escenario uno: reducir la velocidad en la M-30 y en algún caso el aparcamiento", comentaba la exalcaldesa, a lo que una colaboradora del programa ha replicado que no se realizó "porque estaba diseñado para que no se aplicara nunca". Por su parte, Miguel Ángel Carmona, miembro del PSOE, ha aconsejado a los espectadores que se metieran en la maldita hemeroteca de Google. "Como te lo has estudiado, da gusto. Como venías a debatir conmigo", contestaba con ironía Aguirre. En 2015, la exsenadora prometía que "no le temblaba la mano" para limitar el acceso de coches por contaminación.
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Las calefacciones son el problema
El presentador del formato de Cuarzo Producciones, Joaquín Prat, le ha lanzado una pregunta a Aguirre: "Cuando ve las imágenes de la boina cubriendo Madrid y el aire que respira usted como vecina del centr, ¿qué haría?", a lo que la invitada ha aconsejado que ha luchado muchísimos años contra la contaminación y sugiere que nos centremos en el problema de las calefacciones. Parece que a la portavoz del PP le preocupa más la contaminación que generan los radiadores, que solo se usan en los meses de invierno, que la polución que expulsan los coches.