'Las chicas del cable': "Hace falta que se apueste realmente por las mujeres en televisión"

Lidia, Carlota, Ángeles y Marga son 'Las chicas del cable'. Cuatro jóvenes aguerridas, defensoras de sus derechos y luchadoras que, a pesar de vivir casi un siglo antes que las actrices que les dan vida en la serie, cuentan con sorprendentes similitudes. Y es que Blanca Suárez, Ana Fernández, Maggie Civantos y Nadia de Santiago también son pioneras. Mientras que sus personajes representan la incursión de la mujer en un nuevo terreno laboral, ellas hacen lo propio protagonizando el primer proyecto de Netflix en España. Un reto intenso y difícil de afrontar al que todas se enfrentan con optimismo, ilusión y, por qué no, desconocimiento.

A. Fernández: "Todavía no somos conscientes de lo que estamos haciendo"

"Yo creo que todavía no estamos siendo muy conscientes de lo que estamos haciendo", relata Ana, que vuelve a la televisión después de su breve incursión en el género de época gracias a 'Amar es para siempre'. "Cuando entras en la dinámica de rodaje, piensas que estás haciendo una serie semanal, para una cadena de aquí, y que irán saliendo los capítulos y se irá luchando por la audiencia. Pero esto es otro concepto. Creo que estamos dentro de una revolución a nivel televisión como hace años se cambió del blanco y negro al color. Hasta que no salga, no vamos a ver la proyección en nuestras vidas, en nuestras carreras o en el proyecto. Estamos un poco a expectativas", asevera con entusiasmo.

Maggie, que ya encabezó el avance de la ficción de la mano de 'Vis a vis', coincide con su compañera de elenco en que, "al ser una cosa nueva, no hay ningún tipo de referente en España que nos pueda decir lo que va a ocurrir". Aunque, como dice Nadia, "al final nosotros vamos a trabajar, a crear un personaje, a defenderlo, y la metodología es la misma", Ana Fernández asume que, en lo que se refiere a las jornadas de grabación, sí que han encontrado diferencias: "Cuando haces una serie nacional, desde que la estás haciendo, se van publicando cosas. Aquí no nos han dejado subir a redes ni contar nada en estos tres meses. En ese aspecto nos hemos tenido que adaptar".

Así son 'Las chicas del cable'

"Lidia es una de las cuatro chicas que se incorporan en el primer capítulo a esta compañía de telefonía", explica Blanca, la protagonista indiscutible de las tramas. A la hora de tratar de definirlo, "es muy complicado hablar de mi personaje porque tiene muchos secretos". "Las primeras personas que no saben absolutamente nada del pasado de Lidia son sus propias compañeras. Es una persona que no tiene familia, que ha estado sola casi toda su vida, y que ha tenido que sacarse las castañas del fuego continuamente", añade. "Llega a la compañía por casualidad, y de repente, se topa con una bofetada de su pasado bastante importante".

Ana Fernández comienza comparando su personaje con una ardilla. "Imaginaos cómo es Carlota", comenta entre risas. "Ella es la rompedora, la que tiene un humor muy irónico, la que se ríe de todo. Siempre va con una sonrisa, con unos andares más modernos, incluso con un toque sexy. Viene de una familia acomodada y marca esa diferencia de intentar romper y avanzar. Ella busca su libertad a partir de encontrar este trabajo, pero tiene una familia de una saga muy militar, y está siempre con esa lucha", apunta.

En el caso de Maggie Civantos, su carrera da un vuelco radical al encarnar a Ángeles, "la más veterana de la compañía". "Está casada, tiene una hija y, aunque es la más conservadora, este personaje va a tener una evolución a lo largo de la temporada porque se va a ir desprendiendo de sus miedos. Es una mujer muy de la época, bastante sumisa, pero en el fondo a mí me gusta describirla como una mujer llena de libertad por dentro", defiende orgullosa. "Aunque esta historia es de los años 20, hoy en día estos personajes existen. Va a tener mucho drama, grandes conflictos, y tendrá que ir cambiando para hacerse fuerte. Al principio es muy frágil y sensible, pero con el tiempo se va a hacer fuerte a través de los referentes que tiene a su alrededor".

A. Fernández: "Al ser una producción de Netflix, en el rodaje nos hemos tenido que adaptar"

Por último, está Nadia de Santiago. Con la candidez que le caracteriza, la actriz afronta el papel de Marga, una joven inocente que llega desde su pueblo para, después de la muerte de su madre, buscar una nueva oportunidad en la ciudad de la mano de su abuela. "Es una chica que nunca ha salido, para ella todo es nuevo, todo es diferente, y se tiene que amoldar. Tiene muchas ganas de aprender, es una persona muy abierta a todo", cuenta.

Aunque no pertenezca al cuarteto de amigas protagonistas, es imposible no hablar de Ana Polvorosa y de su labor como Sara. "Es la jefa de las telefonistas, una tía 100% feminista que está muy en pro de la mujer que, de hecho, da charlas y tiene una faceta sufragista en su lucha por los derechos de la mujer". Para ella, lo que le apasionó del proyecto fue, independientemente de que se hablase también de la compañía de teléfonos, que ocupase el rol de un personaje con una actitud inconformista, algo que le une, en mayor o menor medida, al resto de sus ahora compañeras. "A mí quien me vuelve loca y a la que he utilizado para hacer este personaje es Robin Wright ('House of Cards'). Como yo interpreto un poco a la jefa, una persona superprofesional, severa, a la que le gusta hacer bien las cosas, me gustaba mucho esa disciplina inglesa que tiene", desvela, salvando las distancias.

Tal y como se puede apreciar al analizar una a una a las protagonistas, parece bastante evidente el interés por marcar la diferencia entre las cuatro chicas del cable. Y así lo confirman las propias implicadas. Desde el maquillaje y el vestuario hasta la forma de moverse y expresarse, todo está cuidado para que cada personaje plasme en sí mismo su propia personalidad. "Eso nos ha ayudado mucho a la hora de empezar con el rodaje, porque en ese momento tienes que tenerlo todo muy claro para que cuando digan 'acción' no falte ningún detalle", confiesa Ana Fernández. "Cada una venimos de mundos diferentes", completa Nadia, lo que les ha impulsado aún más a hacer lo más evidente posible esas distinciones. Según Blanca, además, "ha habido que tomar bastantes decisiones acerca de hasta qué punto ficcionamos los personajes e incluimos ciertos toques de actualidad dentro de ellos".

La mujer en el audiovisual: "Hace falta que se apueste realmente por nosotras"

Como representación del sector audiovisual español, y más concretamente de las mujeres que forman parte de él, 'Las chicas del cable' tienen clara su postura sobre la acusada ausencia de personajes femeninos en televisión. "Ahora es cuando se está empezando a ver, pero ni mucho menos ha llegado a su punto cumbre el hecho de que una mujer sea la protagonista de la historia. No es lo que prevalece", defiende Polvorosa, que ya experimentó la excepción a la regla con series como 'Aída'. "Y esto en series, porque en cine todavía queda mucho", añade una Maggie más reivindicativa que nunca. "El cine de acción para mujeres, por ejemplo, no existe. Creo que hay un campo muy interesante para descubrir y para mostrar que las mujeres podemos ser fuertes sin tener que ser hombres ni tener que ejercer ese rol. No se hacen historias de este tipo", sentencia.

M. Civantos: "Creo que a veces infravaloramos muchísimo al espectador"

"De las películas que se han hecho en 2016, la mayoría son protagonizadas por hombres. No hay mujeres interesantes, siempre están supeditadas a los personajes masculinos, y creo que habría que revisar esto", completa. A modo de justificación, Nadia de Santiago trata de achacar esta situación a que "normalmente los guionistas y los directores son hombres", algo que Civantos cuestiona de forma irrefutable. "Hay mujeres que escriben, pero luego hay productores que deciden que no. Hace falta gente que ponga el dinero en la mesa y que no le asuste tener a una protagonista de acción que sea mujer. El problema está en que la gente que realmente tiene el poder no apuesta porque piensa que las mujeres queremos ver una cosa determinada, y creo que a veces infravaloramos muchísimo al espectador. Sí que hay guionistas mujeres que además defienden el papel de la mujer, el problema es que luego los productores piensan que estamos años atrás. El espectador va evolucionando también y va demandando más".

En su opinión, "en la ficción en general hacen falta mujeres más fuertes, diferentes. Hace falta que se apueste realmente por nosotras". Para aportar el toque de humor a este interesante debate, Ana Fernández, recurriendo al tono de su rol como Carlota, defiende 'Las chicas del cable' porque "los hombres son complementos de las protagonistas". "Tanto como esposo, como padre, como amigo, como novio o como jefe, hay una parte que se me asimila a la trama de 'Sexo en Nueva York', donde hay cuatro tías y los hombres son accesorios. Eso está muy bien, porque en esta serie se ve a los personajes masculinos mucho más débiles a como eran en la época. Se les va a ver el plumero", desvela.

Con la cuestión de la mujer, era imposible no poner encima de la mesa la diferencia salarial, presuntamente aún más llamativa entre actores. "Yo no sé lo que cobran los demás, pero sí que es verdad que a nosotras se nos exige más. Tenemos que estar más guapas, más divinas, más todo siempre. Y eso sí es cierto", comenta Maggie. "¿Por qué Richard Gere es atractivo con 60 años y Gina Rowland no? ¿Quién dice eso?", reflexiona. "Creo que, en ese sentido, sí que lo sufrimos las actrices españolas aquí, en Estados Unidos, en Francia y donde sea. En un cásting te miran hasta el último lunar o cómo tienes el pelo, y sin embargo a un hombre no. Ellos no salen en las revistas con un 'arg' y nosotras sí". Blanca Suárez, más acostumbrada a participar en proyectos para la pequeña pantalla, se suma a esta opinión para decir que, según su sensación, "cada uno cobra en función de su momento" profesional.

Netflix: Un nuevo peldaño en la ficción española

La irrupción de Netflix al panorama audiovisual español, así como la entrada de otras plataformas de contenido bajo demanda como Amazon o HBO, ha allanado el terreno para un nuevo capítulo en la ficción española. "Ahora mismo, lo que está ocurriendo es que se está globalizando todo, por suerte. De repente hacemos en España una serie para todo el mundo. Me da la sensación de que estamos abriendo un poco la mente para trabajar para todo el planeta", explica Blanca Suárez, que se muestra muy a favor de "todo lo que sea compartir y aprender de nuestros vecinos de Estados Unidos". "Con apuestas por temáticas muy novedosas, al tener muy claro que no pueden llegar a todo el mundo, hacen diferentes series dirigidas a distintas minorías para que todo el mundo pueda ver la serie que le apetece, no la serie que le tiene que gustar a la abuela, al padre, al hijo y al primo. Estaría bien que las cadenas generalistas también apostasen por eso, por hacer productos más arriesgados que puedan tener más calidad", defiende la actriz, que a lo largo de su extensa carrera ha formado parte de numerosos proyectos como 'El barco', 'El internado', 'Lo que escondían sus ojos' o 'Carlos, Rey Emperador'.

B. Suárez: "Estaría bien que las generalistas apostasen por productos más arriesgados"

"Creo que es importante que, al menos, respeten el producto", señala Maggie Civantos. "¿Qué es arriesgado? Hay historias que no tienen por qué serlo, porque lo que a mí me gusta no le tiene por qué gustar a mi madre. Es importante respetar el producto, y eso a veces se lo saltan. Los productos tienen una historia, y no tiene que estar sujeta a unos números contabilizados de una forma totalmente obsoleta, porque hay mucha gente que lo ve en emisión, y otra mucha que lo ve por internet. Está cambiando todo muy rápido, y no está dando tiempo a asimilar los cambios. Si se respeta el producto, se respeta al espectador", sentencia, dejando entrever su descontento por la cancelación de grandes producciones como 'Vis a vis' que, a pesar de no contar con un seguimiento espectacular, gozaba del apoyo de la crítica y de una legión de seguidores que semana tras semana demostraban su fidelidad.