La alta aceptación de audiencia en su primera temporada, y el sobresalto que crea el mundo de la adolescencia en los hogares españoles, han sido las razones por las que Cuatro ha decidido estrenar una nueva temporada de 'SOS Adolescentes', el coach más visto de la cadena.
Producido por Magnolia TV, el programa volverá a la cadena el próximo viernes 11 de enero (23:10h) de la mano de su conductora habitual, Ana Isabel Saz-Marín, psicóloga especializada en educación infantil y juvenil y en mediación familiar.
La nueva edición mantendrá el formato de tres bloques, con todas las secciones fijas que han dado credibilidad al proyecto. No obstante, en esta segunda temporada se incluirán algunas novedades que intentarán mejorar el programa:
Por un lado, los capítulos incluirán mayor número de grabaciones con quejas y opiniones de los adolescentes y de sus grupos de amigos.
Además, con el fin de favorecer el desarrollo de conductas y actitudes como el compromiso, el esfuerzo y la autoestima, se pondrán en marcha dinámicas de autogestión, tareas en las que el adolescente tendrá que asumir responsabilidades para conseguir recompensas.
Se desarrollarán más dinámicas familiares y especiales para los padres y se promoverá la lectura en los adolescentes. Y finalmente, siempre que se pueda y el programa lo permita, los adolescentes tendrán que aportar su granito de arena a la sociedad desarrollando un trabajo social en bien de la comunidad.
La experiencia acumulada en la primera temporada y su constante estudio sobre los adolescentes, harán posible que nuestra psicóloga, Ana Isabel Saz-Marín, aporte luz y algunas soluciones a los conflictos que rodean esa etapa tan difícil que es la adolescencia.
Primer caso: un adolescente marcado por la muerte de su padre
Nicolás tiene 15 años y vive con su madre Mari Cruz y su hermana Azahara de 12 años, en Córdoba. El padre de ambos murió hace tres años y desde entonces Nico se comporta en casa como un tirano. Exige que su madre y su hermana se lo hagan todo y, cuando alguna de las dos se resiste, aparecen las amenazas y los golpes, especialmente hacia la pequeña de la casa. El chico ha asumido el rol de hombre de la casa y el problema es que actúa de la misma forma que lo hacía su padre, es decir, autoritariamente. Su comportamiento a todas horas es muy agresivo.
Mari Cruz, la madre, tiene aficiones muy parecidas a las de su hijo. Le gusta el messenger, hablar por el teléfono móvil y vestirse como una adolescente. Además, le cuesta asumir las responsabilidades propias de una madre.
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Ana Isabel Saz plantea a toda la familia diferentes ejercicios para conseguir más comprensión, respeto, comunicación y tolerancia entre ellos. Juegos en los que los hermanos han de defenderse y lecturas que les ayuden a tener perspectivas más amplias son sólo algunas de las propuestas de la psicóloga de SOS Adolescentes para este primer caso.