Pablo Iglesias ha sido el último invitado de 'Salvados'. El líder de Podemos se sentó junto con cinco votantes a los que había decepcionado con el paso del tiempo y que estaban algo desencantados con las últimas actuaciones de la formación morada. En círculo y con ambiente de debate, fueron exponiendo las distintas situaciones que ha pasado el grupo político en los últimos tiempos.
Pablo Iglesias en el programa de Jordi Évole, 'Salvados'
Sin embargo, Pablo se dio cuenta de la "falta de pluralismo" que había seguido el presentador, Jordi Évole, a la hora de elegir a los invitados. Ninguno de los presentes simpatizaba con las ideas de Juan Carlos Monedero. Algunos de ellos argumentaban que "Monedero tendría que haber cerrado la boca en muchas ocasiones" ya que, según ellos "no tiene medida ni en la forma ni en el fondo".
"No sé si lo vas a emitir, pero te voy a hacer una crítica", saltó el líder de Podemos, en desacuerdo con que todos los presentes que estaban en contra de Monedero, "podría haber en la selección de personas al menos una cercana a las ideas de Juan Carlos". A pesar de las críticas que estaba recibiendo el político, Iglesias argumentó en defensa de su compañero: "No siempre estoy de acuerdo con él en las cosas que dice, hará cosas mal a veces, pero me enfada el linchamiento del que ha sido objeto. Es verdad que no se calla, pero a veces está muy bien que diga ciertas cosas".
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Jordi Évole: "Haz la crítica que quieras"
Después de esta tormenta en la que llovieron los cuchillos, Jordi Évole le contestó muy tranquilo. El presentador le explicó que no le había preguntado previamente a los votantes presentes acerca de su opinión sobre Monedero, al que definieron en el programa como "payasín" o "francotirador". "Haz la crítica que quieras", seguía el presentador, sin embargo ahí ya Pablo Iglesias no tenía nada más que decir.