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Vestida de negro y sentada en un sofá blanco junto a Khloé Kardashian y Kourtney Kardashian, Kim Kardashian ha contado entre lágrimas cómo vivió la peor experiencia de su vida y qué es lo que se le pasó por la mente en el segundo episodio de la temporada 13 de 'Las Kardashian'. Así, tras varios meses, la estrella de la televisión ha roto su silencio.
Kim Kardashian habla del robo que sufrió en París
"Uno de los hombres me tapó la boca con unas cintas para que no gritara. Luego me agarró de las piernas, yo me resistí. No quería, no tenía ropa debajo del albornoz. Me tiró a la cama y pensé 'Vale, ha llegado el momento'. Van a violarme. Me preparé mentalmente para lo que iba a suceder, pero al final no pasó. Solo me ató las piernas con las cintas", ha relatado entre lágrimas la mujer de Kanye West.
Su madre, Kris Jenner, también ha contado cómo se sintió. "Es devastador tener que escuchar que uno de tus hijos temió por su vida, pensando que iba a morir y que iba a dejar a dos niños pequeños solos", afirma entre lágrimas.
Un robo valorado en 10 millones de dólares
Kim Kardashian no recibió ningún disparo, en su lugar, la metieron en la bañera maniatada donde la encontraron más tarde. Los ladrones salieron de la habitación del hotel con joyas valoradas en 10 millones de dólares. Entre ellas se encontraban unos pendiente de diamantes Lorraine Schwartz, dos pulseras de diamante de Cartier, un Rolex de oro, y el anillo de pedida que le regaló West.
Sobre el por qué pasó, Kim Kardashian no lo tiene claro. "Creo que nos siguieron en todo momento. Retransmití lo que estaba haciendo por mis redes sociales. Dije dónde estaba. Todo el mundo sabía que estaba fuera. Ellos simplemente aprovecharon la oportunidad", ha especulado la estrella de televisión.