La suerte parece estar de lado de María Castro. Ahora es una conocida actriz de la serie 'Sin tetas no hay paraíso', pero anteriormente ha desempeñado muchos papeles. Fue competidora de gimnasia rítmica desde los 6 a los 17 años, trabajo como modelo en una agencia de Vigo y comenzó en televisión gracias a que superó el cásting de 'Avenida de América'. A partir de ese momento María no ha parado de trabajar.
Dice que le han dado muchas oportunidades, pero lo cierto es que no le han regalado nada. Su constancia y su esfuerzo le han abierto las puertas de su sueño. "Estoy cumpliendo mi sueño de niña. Estoy en una cadena nacional, con una serie de gran audiencia, haciendo un personaje principal y en una serie semanal, no puedo pedir más".
Según María, 'Sin tetas no hay paraíso' no cuenta con un número cerrado de capítulos, "sólo espero que la audiencia siga respondiendo y que mi personaje no muera, estoy disfrutando muchísimo y me gustaría poder seguir trabajando en ella".
Modelo de pasarela, presentadora, publicidad, teatro, doblaje, cine, cortometrajes, series... Has hecho de todo.
He hecho muchas cosas porque las hacía mientras estudiaba. Primero hice INEF y luego magisterio. Las cosas se consiguen durmiendo poco, trabajando mucho, estando lejos de la gente que quieres tener cerca y, sobre todo, con mucha ilusión y con mucho esfuerzo. A veces se hace muy duro porque tienes que compaginar tres trabajos a la vez. Lo importante es que tengas la cabeza en su sitio. Me he ido organizando muy bien y por ahora no he tenido ningún problema (risas). Supongo que el hecho de haber sido gimnasta profesional te da la disciplina suficiente para enfrentar todo esto y mucho más.
No te cierras a ninguna disciplina...
Eso es porque me gusta todo. No hay nada que a priori descarte. Todo lo que sea una buena historia o un buen guión me entusiasma, me da igual que sea para cine, televisión, teatro o para expresarlo con la voz en un doblaje. Todo me aporta muchísimo y me llena.
¿Cómo llega a tus manos el papel de Jessica de la serie 'Sin tetas no hay paraíso?
A través de un cásting de la productora Grundy. Yo ya había hecho otras pruebas para otras series como, por ejemplo, 'Yo soy Bea'. En aquel momento tenía otra oferta y la verdad es que no sabía por cual decidirme. Al final hice el otro trabajo y dejé 'Yo soy Bea' aparcada. Se ve que Carlos Manzanares confió en mí en aquel momento y por ello me ofreció hacer la prueba para 'Sin tetas no hay paraíso'. Al principio la prueba no era para mí personaje, era genérica. Al final vieron que encajaba muy bien para el personaje de Jessica.
Por lo que me dices estuviste a punto de formar parte del elenco de 'Yo soy Bea'.
Tenía otras ofertas en ese momento y me decanté por otra. En esos momentos nunca sabes cual va a ser la mejor opción y terminas por decantarte. Ahora me alegro del paso que dí porque si hubiera hecho 'Yo soy Bea', no estaría con haciendo 'Sin tetas no hay paraíso'.
¿Qué sensación se le queda a una cuando luego ve que la serie en la que le habían propuesto participar es un gran éxito de audiencia?
Cuando tomas una decisión ya no puedes pensar y mirar atrás. Es imposible saber lo que hubiera pasado si hubiese elegido ese otro camino. Hay que mirar al futuro, no puedes sentirte mal por una decisión que en su momento consideraste la más apropiada.
Estamos super contentos. Yo confiaba mucho en el proyecto porque los guiones me parecen estupendos y los compañeros son excelentes. Creo que es una serie que tiene mucha valía y que está muy bien rodada. El hecho de que tenga tantos exteriores no hace sino enriquecer aún más la producción. Muchos creíamos que iba a ser un gran éxito, lo que pasa que en televisión nunca sabes como puede responder la audiencia. Grandes series han caído y otras, en principio, con peor calidad están triunfando. Los datos del primer capítulo los tomamos con cautela. Mucha gente sigue los estrenos para ver de que va la serie, aunque los datos de los capítulos siguientes demuestran que la serie está gustando. Mantener la audiencia a partir del segundo capítulo es muy significativo. Ójala siga subiendo.
Es una de las series actuales con mayor número de exteriores.
Cuando se trata de una adaptación siempre hay un mayor temor porque existe un producto con el cual puede compararse. ¿Existió ese miedo antes del estreno?
Yo lo cierto es que no quise caer en la tentación de ver la serie original. Me leí el libro por conocer la temática, para conocer el mundo que rodea a estas chicas. La chica que en Colombia hizo de Jessica lo hizo de manera excelente y no me gustaría compararme con ella. La historia nuestra ha cambiado mucho, así como el personaje. No estamos en Colombia y, por lo tanto, cambia la trama, cambian los personajes, personajes que en la original no estaban están ahora, otros desaparecen... La ilusión nuestra era hacer un producto nuevo, sin pretensión de compararnos con nadie.
Tranquiliza en parte. Sabes que cuentas con una gran cadena, la más vista, pero también sabes que si el producto no funciona desde el principio corres el riesgo de que lo quite de pantalla. Si va bien sabemos que la van a apoyar, que le van a dar muchísima publicidad -como se la ha dado-, pero también éramos conscientes de que si la gente no la veía era un factor en nuestra contra. Es un arma de doble filo, pero ¿quién puede aspirar a más?
¿Está cerrado el número de capítulos de 'Sin tetas no hay paraíso?
¿Qué supone para tí participar en una serie como 'Sin tetas no hay paraíso?
Mi sueño. Desde chiquitita mi sueño era ser actríz de una serie de televisión. Ni el cine, ni el teatro eran cercanos para mí. Ahora, en una cadena nacional, con una gran audiencia, haciendo un personaje principal y una serie semanal que siempre está más cuidada porque se graba de una manera más lenta, estoy cumpliendo mi sueño. Concretamente el personajo que encarno me encanta, hasta ahora siempre me había todado hacer la parte contraria: la niña dulce, la niña introvertida, la niña que llora o personajes más cómicos. Jessica es un personaje muy duro y con mucha vida interior. Era todo un reto mostrar una cara de mí que no había enseñado nunca. Se trataba de cambiar totalmente de registro.
Es todo lo contrario. Lucía no paraba de llorar, mientras que Jessi no hace más que hacer llorar. Lucía era un personaje con muchísimo sentimiento, era muy humana, se preocupaba mucho de la gente, si oía a alguien mal enseguida se preocupaba, con su madre era super tierna... ¿Cómo es Jessica? Con su madre es nefasta, sus amigas le importan más bien poco, lo que quiere es salir adelante en su vida, es super ambiciosa y no le importa tragarse a quién sea por el camino. Realmente sólo se quiere a sí misma. Nadie la ha querido y se ha creado a sí misma. Parece super cruel, fría y calculadora pero es por algo, tiene su motivo. Ella también siente aunque no lo demuestre.
Jessi se presenta como una chica guapa, inteligente y persuasiva que siempre se sale con la suya en el mundo por el que se mueve. Así es tu personaje, ¿cómo eres tú?
No tengo nada que ver con Jessica (risas). Si algo con ella tengo en común es que yo también soy muy luchadora, aunque de una manera "legal", no de manera tan dura e insana como ella. Cuando te mueves en un deporte como lo estuve yo, siempre quieres ser la mejor, quieres mejorar cada día. Soy muy constante. No tengo nada que ver con su forma de vestir, ni con su formar de actuar, ni de hablar, ni de ser... Soy muy cercana, me abro mucho a la gente y me gusta que la gente esté alegre. Jessica sólo disfruta cuando hace daño.
¿Tienes la suerte de poder elegir tus trabajos o tienes que pasar las pruebas y cástings como cualquier otra profesional?
Hay de todo. Hay cástings abiertos y otros más cerrados en los que normalmente te suelen llamar porque ya te conocen o te han visto en algún otro trabajo que has realizado. Esa es una de las partes buenas de trabajar en televisión: si gustas a una persona te suele llamar directamente, ahora bien, si no gustas te veta. Es la fuerza de la tele. Hasta ahora he tenido mucha suerte. Me fuí de Galicia a Madrid para buscarme un hueco y desde un principio tuve suerte. Me dieron muchas oportunidades de entrada. Eso sí, nuestro trabajo es un poco incierto, es dificil saber lo que estarás haciendo mañana.
¿Qué es lo que más te atrajo de este proyecto de ficción?
El guión me gustó muchísimo. Me pasaron los primeros dos guiones y disfruté mucho. Aunque se trate de una historia dura, creo que es muy positivo que pueda reflejarse en televisión. Es un mundo que creemos que está muy lejano, pero es una realidad que también está presente en España. No es una historia de ficción, hablamos de una realidad. 'Sin tetas no hay paraíso' es una serie para disfrutar, pero a la vez una serie que nos hace pensar. Es un tema real, un tema del que debemos hablar, no puede ser tabú. Creo que la dureza de la historia me llamó la atención.
Siempre que se lleva a televisión estos temas, hay alguna asociación o colectivo que lo critica publicamente. ¿Cómo lo ves?
Dejo a Telecinco que se pelee con ellos. Yo sólo digo que antes de juzgar la serie hay que verla. 'Sin tetas no hay paraíso' es el nombre de un libro y se ha creado una serie basada en ese libro. Realmente lo que se defiende es que sin tetas sí hay paraíso. Las chicas de la serie están buscando el paraíso, y no se dan cuenta de que lo tienen en su casa. Lo están buscando fuera y están arruinando su vida en esa búsqueda. Antes de juzgar nada, hay que ver lo que hay realmente detrás de lo que se cuenta.
Tu primer papel como actríz fue en la televisión de Galicia (TVG). ¿Cómo recuerdas esos inicios?
Empecé en la serie 'Avenida de América' con un personaje llamado Sara. Hacía de adolescente. Lo más exitoso en mi paso por la TVG fue 'Platos combinados'. Estuvo once años de emisión, y yo hice cinco. Fue una verdadera escuela para mí. Tuve la oportunidad de trabajar con actores maravillosos. Cuando empecé no tenía ningún tipo de experiencia.
¿Tenías muy claro que querías trabajar de la interpretación?
Hice gimnasia rítmica 12 años de mi vida. Fui campeona gallega y subcampeona de España de pelota (1996). El hecho de entrenar tantas horas me impedía hacer nada más. El deporte de competición es lo que tiene, entrenaba diariamente 3 horas y los fines de semana 4 horas cada día. Tenía tiempo para eso y para estudiar. Cuando me retiré y empecé INEF, dejé la gimnasia y fue cuando me planteé luchar por mi sueño. Cuando me propusieron 'Avenida de América' en casa me decían que no fuera porque tenían mi carrera bien encauzada. Lo probé porque era mi sueño. Ahora disfruto de lo que más me gusta en este mundo que es interpretar.
¿En cuál de tus facetas profesionales te sientes más cómoda?
Me quedaría con la de actríz. Modelo sería lo que primero descartaría. Fue lo primero que hice para buscarme un hueco en la tele. Me lo pasé muy bien y conocí a gente maravillosa. Pero el mundo de la interpretación me ha la posibilidad de prepararme mucho más de cara al futuro. Como modelo estás más limitada. Una actriz tiene muchos campos por los que puede moverse, muchos registros que probar, muchos personajes que crear... Presentar también me gusta mucho, de hecho, en TVG he presentado diferentes galas. Lo ciertoes que el directo me llama mucho. Todo lo que hago me lo tomo muy en serio, tal vez demasiado en serio.
¿Es 'Sin tetas no hay paraíso' una serie con final felíz?
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Creo que el original no acaba en final felíz, no estoy segura. No te lo puedo decir porque no nos lo han contado. Sólo espero que no se muera para poder seguir trabajando.