'Big Little Lies', la versión de alta alcurnia de 'Mujeres desesperadas', llegó este domingo a su final tras siete breves pero intensas semanas en antena en HBO España. No en vano, la ficción interpretada y producida por Nicole Kidman y Reese Witherspoon ha ido creciendo en adeptos semana y semana y, tras superar los 7 millones de espectadores en EE.UU. en su penúltimo episodio, es ya el producto más exitoso de HBO desde 'Juego de Tronos'.
No vamos a descubrir la rueda con el final, ya que la historia está basada en un libro y el desenlace se corresponde con el de la novela, pero no por ello el último capítulo deja de ser una brillante hora de televisión repleta de futuribles nominaciones a los Emmy. A partir de aquí, obviamente, todo son spoilers, así que continúa leyendo bajo tu responsibilidad.
Y el muerto es...
'Big Little Lies' ha tenido, desde su principio, una estructura peculiar. Sabemos que había una muerte pero, a diferencia de la técnica narrativa habitual en este tipo de productos, no sólo no conocíamos la identidad del asesino, tampoco la muerto en sí. Y el motivo es tal vez obvio, porque como todo el mundo esperaba, la víctima es Perry (Alexander Skarsgard).
Ziggy confesó el autor del bullyimg a Amabella
En ese sentido, el capítulo comienza con Ziggy (Iain Armitage) confesándole a su madre el verdadero autor de las agresiones a Amabella: Max, uno de los gemelos de Celeste. Jane (Shailene Woodley) va corriendo a contárselo a Celeste, a la que del último capítulo a éste le ha dado tiempo a comprar y montar medio Ikea en su nuevo apartamento ella solita.
Celeste descubre así que sus hijos "han heredado" las tendencias violentas de su padre y acelera su marcha tras una brevísima visita a su psicóloga, brillantemente interpretada por Robin Weigert. Toda esta primera parte del capítulo es tal vez demasiado acelerada y anticlimática: la serie ha ido construyendo las relaciones de las madres muy poco a poco basándose en el bullying a Amabella y la supuesta culpabilidad de Ziggy, y la resolución de todo es demasiado rápida y simple. Sobre todo porque cuando Celeste le confiesa la verdad a la malvada Renata (Laura Dern), a ésta parece importarle poco la verdad y despacha en un par de perdones lo que tanto le había indignado en los seis capítulos anteriores.
Y el asesino es...
Nos trasladamos a la fiesta de Elvis y Audrey Hepburn, a la que acude todo el pueblo y parte del extranjero, porque ahí no para de llegar y llegar gente. Las primeras en hacer acto de presencia son Jane y Madeline (Reese Witherspoon). Esta última aprovecha la asistencia de su ex amante Joseph para irse bebiendo hasta el agua de los jarrones. Jane, por su parte, acude con su cita de última hora Ah-pero-eras-hetero Tom.
Renata, dress to impress en la final de 'Big Little Lies'
Mientras tanto, cuando Celeste y Perry están a punto de salir para la fiesta, éste descubre por un mensaje que su mujer está a punto de dejarle. La cara de Nicole Kidman al saber que su marido es consciente de todo es sublime, como lo es el tenso viaje de la pareja hasta llegar hasta la fiesta. Se ha alabado mucho la interpretación de Kidman con toda esta trama de violencia doméstica, pero tampoco debemos olvidarnos de Skarsgard, interprentando a ese hombre violento que es consciente de sus errores pero a la vez incapaz de controlar sus impulsos.
Curiosamente, la salvación de Celeste es Renata, que observa a la pareja metidos en el coche y acude a saludarles. Es en ese momento cuando aprovecha Celeste para escaparse a la fiesta (y contarle la verdad sobre Max a Renata). En la fiesta, Celeste intenta escabullirse de su marido. Al final, éste acaba encontrándola junto a Madeline, Renata y Jane. Es la primera vez que Jane ve a Perry, y es ahí cuando también descubre que es su violador. A partir de aquí las chicas no vuelven a hablar en la final. Perry pega a Celeste delante sus amigas, incapaces de defenderla hasta que aparece por sorpresa Bonnie y le empuja causándole una muerte accidental. Todas prometen cubrirse entre ellas e insisten ante la policía que la caída de Perry fue fortuita...
Algunas consideraciones sobre el final y la serie...
- 'Big Little Lies' ha sido una serie sobre el sufrimiento de Celeste pero también sobre la relación de un grupo de cinco mujeres con sus envidias, celos, infidelidades y traiciones. El capítulo final es un desenlace muy satisfactorio para la trama de Celeste pero que ignora en cierto modo todo el resto de subtramas y relaciones entre los personajes femeninos.
- Renata, que durante seis capítulos se nos ha presentado como una villana de libro, superprotectora de su hija Amabella, acaba de repente como la BFF de Madeline y Jane, y no parece tener ningún problema con que su hija juegue con el niño que hasta ayer la estaba maltratando.
- Lo mismo sucede con Bonnie (Zoë Kravitz), un personaje infrautilizado y que no tragaba especialmente a ninguna de las otras madres, que acaba como la más amiga de todas ellas tras esa noche. El libro sí ofrece una explicación a las acciones y a la reacción de Bonnie (le confiesa a Celeste que su padre abusaba de su madre). Sin embargo, la serie omite toda esta parte y no parece interesada en profundizar en Bonnie en ningún capítulo.
- Y en ese sentido, si la historia es tan terrible y el desenlace es tan obvio: una mujer maltratada que se defiende su violento marido. ¿Por qué juega tanto el montaje con las frívolas declaraciones del resto de vecinas del pueblo en comisaría poniendo a las cinco mujeres a caer de un burro?
Y algunas preguntas sin respuesta...
- ¿Sabe Ziggy cuando juega en la playa que Max y Josh son sus hermanastros y Celeste su madrastra?
- ¿Confiesa Madeline su infidelidad a Ed?
- ¿Por qué todo el mundo canta tan bien ese grupo de amigos?
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