Llega la quinta edición de 'La última cena' en Historia, donde esta vez el protagonista será Quique Dacosta, tres estrellas Michelín, el cual escenificará una de las cenas más conocidas de la propia historia: la de Jesús y los apóstoles, es decir, la última cena. En ateriores ediciones se ha contado con figuras como Dabiz Muñoz o Paco Roncero. En este único programa, se podrá ver los cinco platos inspirados en dicho acto y en los alimentos que pudieron formar parte de él. El 7 de abril, Historia abrirá sus puertas para que degustemos visualmente el menú especial que ha preparado el chef de origen extremeño y valenciano de adopción.
Quique Dacosta, de 'La última cena' con sus ingredientes
Dacosta ha recogido el testigo de la directora general de The History Channel Iberia y ha explicado que "nuestro lenguaje es la comida. En la cocina española es innovación y evolución, el reto era ver cómo sería la última cena hecha por mí. Me he ido a lo mediterráneo, está muy apegado a una diversidad maravillosa, las representaciones no son sólo de la última cena, también, por ejemplo, el campo de los olivos...".
El cocinero ha confesado que se ha sentido "muy cómodo, pero he tenido que hacer un trabajo introspectivo. He buscado inspiración en los métodos y en los alimentos, investigar en el pasado para construir un nuevo futuro". Dacosta ha comparado su creación con cómo sería si viésemos una representación de la última cena original con teléfonos móviles: "Sería tan descolocante...". Sobre el sabor, el chef admite que "como cocinero, intento cocinar sabores amables aunque hable de momentos difíciles". También ha querido ahondar en "la conservación de los productos, no nos lo planteamos, ni hacer un encurtido con ello. No haríamos el jamón curado de sal, por eso quería que viéramos como serían aquellos ingredientes, que tenían un motivo de cocinarlo y conservarlo".
Quique Dacosta presenta 'La última cena'
Inspiración terrenal
Quique Dacosta ha contado la manera en la que ha conseguido inspirarse para poder realizar estos cinco platos: Cuerpo y sangre de Cristo, las lágrimas, el mar y la montaña o monte de los olivos, el cordero y la codorniz y el Jarofe, los cuáles hemos tenido la oportunidad y comprobar su exquisito sabor. "Se trata de meterte en el papel", afirmó el cocinero, añadiendo: "Cuando os digo que lo he traído a mi territorio, he buscado en el cuadro de Leonardo Da Vinci, pero también vas yendo a diferentes países del mundo y ves los diferentes alimentos que había en las representaciones de la última cena".
El chef ha comentado que es una muestra de que "los códigos de la cocina como altar y escenario de nuestra propia historia. No hay nada más representativo de un pueblo que su mesa". Sobre los cinco platos creados para la ocasión, Dacosta ha matizado que ha "querido equilibrar los cinco platos con platos de esta temporada".
Tras hablar del programa, sobre la estética, Dacosta ha admitido que "me dejo llevar por mi propio sentido, he querido hacerlo muy real. Todos los sentidos están muy bien marcados, los bajos sentidos están ganando importancia, son un valor maravilloso: el placer, la felicidad, el gusto, el tacto...". El cocinero ha explicado que la espiritualidad de los platos se encuentran en la diferencia: "Comer y beber es el acto, pero nosotros buscamos algo más. Representamos nuestra cultura, la innovación en la cocina.". Normalmente, nunca he hecho platos para Semana Santa, es la primera vez". Para terminar, Dacosta ha sentenciado que "creo que la ventana de la televisión, bien usada, es una herramienta maravillosa".