El 2 de abril llega el esperadísimo estreno de 'La casa de papel', la nueva producción de Vancouver que contará el mayor robo jamás visto, ni más ni menos que 2.400 millones de euros, a la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre. Alba Flores y Úrsula Corberó, las dos protagonistas femeninas de esta particular banda de atracadores, han visitado 'El hormiguero' antes de su aterrizaje en Antena 3.
Alba Flores y Úrsula Corberó tirando pasteles en 'El hormiguero'
Las actrices se han mostrado encantadas con la ficción: "tiene mucho rock and roll, nos juntamos lo mejor de cada casa", aseguraba Úrsula Corberó. Mientras, Alba Flores bromeaba con que "en vez de irnos a tocar nos vamos a robar". Y es que la imponente cifra económica que pretenden obtener los ladrones ha dado pie a las bromas de Motos a raíz de la actualidad: "ni en el canal de Isabel II".
Un rodaje intenso donde el nombre real de los personajes es uno de los secretos mejor guardados. "Nos líamos ya todos un poco. A mí me llaman Alba y a Alba, Úrsula", explicaba la actriz de 'Física o química'. Una entrevista donde ambas han adelantado algunos detalles de sus personajes: "Tokyo no es chunga, es buena, pero ha tenido una vida complicada", señalaba Corberó, a quien su cambio de look le ha supuesto un amargo disgusto. "No hablemos de eso porque ha sido heavy", se lamentaba.
Úrsula Corberó y las armas
Por su parte, Alba Flores, que interpreta a Nairobi, experta en falsificaciones, relataba sus problemas en el colegio para imitar la firma de su madre: "Estuve una época queriendo saberme su firma porque, de hecho, ella me pidió que la aprendiese porque estaba harta de firmar circulares. Aún así no hubo manera".
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Pero si hay algo que gusta conocer de las series son las anécdotas del rodaje, donde la conocida actriz de 'Vis a vis' ha compartido la mala pata de su compañera con las armas: "Tengo que decir que nos pusieron la típica foto del secuestrador con la rehén y solo dio a la rehén", narraba entre risas. Un complejo proceso de aprendizaje donde Corberó concretaba su relación con la pistola: "Me daba mucho respeto, estaba bastante cagada. Me impresionó muchísimo". Tendiendo en cuenta esta mala puntería, el programa de 7 y acción ha propuesto a las actrices liarse a tartazos contra atracadores y rehenes y, como era de esperar, el presentador ha terminado pringado de merengue.