Si hay una serie de moda que ha sembrado la polémica alrededor del mundo esa es, sin lugar a dudas, 'Por 13 razones'. Desde que se estrenó el 31 de marzo, la ficción de Netflix ha recibido innumerables críticas, tanto positivas como negativas. Muchas personas piensan que una serie de esta índole es necesaria para comprender lo que se esconde detrás del suicidio, pero otras opinan todo lo contrario.
Hannah Baker, protagonista de 'Por 13 razones'
En Nueva Zelanda lo tienen claro. Aunque antes de varios episodios de la producción de Selena Gomez se puede leer un texto que advierte de la aparición de imágenes que pueden herir la sensibilidad del espectador, para los responsables de la televisión de Nueva Zelanda, eso no es suficiente. Por ese motivo, han decidido crear una nueva calificación específica para esta serie pero que pretenden utilizar también para futuros proyectos.
Hasta el momento, las series neozelandesas solo podían estar dirigidas a todos los públicos, prohibidas para menores de 16 años o prohibidas para menores de 13 años. Desde ahora y debido a lo explícito de 'Por 13 razones', también existe la prohibición a menores de 18 años. Un comunicado publicado en el blog del Office of Film and Literature Classification, ha explicado las razones de esta decisión.
Nueva Zelanda, uno de los países con mayor tasa de suicidio
Según la OFLC, las calificaciones que ya existen en el país "no abordarían el daño causado a los jóvenes de 16 y 17 años, que están estadísticamente en mayor riesgo de suicidio". Aunque la prohibición es para personas de menos de 18 años, los menores de edad sí podrán ver la serie siempre y cuando estén supervisados por un adulto. Además, al comienzo de la ficción y en cada capítulo, "Netflix tendrá que mostrar una advertencia clara" indicando la clase de contenidos a los que se enfrentará el espectador y la nueva calificación.
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"La serie ignora la relación entre el suicidio y la enfermedad mental que a menudo lo acompaña", explica el comunicado, haciendo referencia a la poca objetividad de la ficción y alega que "Nueva Zelanda es uno de los países con la tasa más alta de suicidio en adolescentes de la OECD" y que, por ese motivo, el éxito de Netflix podría afectar todavía más a los adolescentes del país.