Crítica de la segunda temporada de 'Sense8': Más thriller y sentimientos con un equipo totalmente conectado

Desde que llegase el famoso especial de Navidad de 'Sense8' a Netflix, éramos muchos los que esperábamos con ganas el estreno de la segunda temporada para ver qué es lo que ocurría con los sensates en estas nuevas entregas. En FormulaTV hemos tenido la oportunidad de poder visionar los primeros episodios de esta segunda temporada y ver cómo Lana Wachowski ha continuado la ficción de Netflix. ¿Habrá mantenido la buena calidad de la primera o como suele decirse, segundas partes nunca fueron buenas?

Para aquellos que no recuerden el final de la primera temporada, el punto de partida será el intento de conseguir sobrevivir a las amenazas de Whispers junto a Riley y así poder saber dónde se encuentra cada sensate. Al estar conectado con Will, tratará de descubrir dónde se esconde. Capheus, Kala, Lito, Nomi, Sun y Wolfgang intentarán ayudar de la mejor forma posible, pero también tendrán que hacer frente a su propia realidad. Una manera de encontrar una forma de vivir y protegerse, además de seguir buscando cuál es su propia identidad.

En una serie siempre hay ese de temor de cómo arrancar tras una espera entre temporada y temporada, pero la realidad es que 'Sense8' lo consigue a la perfección. Con el especial de Navidad lograron dar expectativas bastante jugosas al espectador con lo que le esperaba en la segunda temporada, pero es cierto que no dieron demasiados avances. Con los primeros episodios ya se puede ver la esencia que hizo tan famosa a la ficción de Netflix, esa mezcla de acción y tensión junto con sentimientos e historias que dan esa humanidad a los personajes. Lo bueno que tiene esta nueva entrega de episodios es que, al no tener que presentarnos a los sensates, pasamos directamente a la acción desde el principio. Desde el primer episodio ya se empiezan a dar claves importantes de un juego trepidante de supervivencia, llevado de manera dinámica.

El engranaje perfecto de los sensates

Es cierto que ahora la historia tiene cierto foco en Will, interpretado por Brian J. Smith, y Riley, en la piel de Tuppence Middleton, pero lo bueno que tiene 'Sense8' es que, al ser un reparto coral, no descuida el resto de historias y aunque no se puede dar detalles, hay un equilibrio que sigue dando esa sensación de grupo y de familia que dejó en la primera temporada. Hablando de Smith y Middleton, es importante subrayar que el primero realiza una labor interpretativa más trabajada que en la primera temporada. De alguna manera ensombrece la actuación de Middleton, pero la realidad es que ambos siguen siendo un cóctel artístico que tiene muy buena conexión. Tal vez, las circunstancias del personaje de Smith han ayudado al actor a realizar una actuación más redonda, pero eso no quita que sea de aplaudir.

En cuanto al resto de los sensates, Doona Bae, Jamie Clayton, Tina Desai, Max Riemelt, Miguel Ángel Silvestre y la incorporación de Toby Onwumere como Capheus, es de destacar que se nota que se sienten muy a gusto con sus personajes. Clayton sigue siendo esa Nomi con fuerza, pero con ciertas debilidades que ya se pudieron ver en la primera temporada, Aun así, con el tándem que hace con Freema Agyeman, Amanita, sigue convirtiéndolas en una de las mejores parejas de la serie. La incorporación de Onwumere, en sustitución de Aml Ameen por desavenencias con la producción, es bastante satisfactoria. Es cierto que al haberlo visto ya en el capítulo de Navidad no impacta tanto en la segunda temporada, pero aun así, Ameen daba un toque más de ingenuidad a Capheus y esto es algunos de los detalles que hacen que a Onwumere le cueste todavía conectar con el personaje.

Nuestro actor nacional, Miguel Ángel Silvestre, en esta segunda temporada tiene una mayor carga dramática sobre su personaje y en especial, de esa imagen de la fama y del sensacionalismo. Junto a Eréndira Ibarra y Alfonso Herrera hacen un trío muy especial. Ibarra como Daniela es uno de los personajes secundarios más queridos de la serie y en la segunda temporada sigue demostrando por qué. Herrera, por su lado, demuestra por qué es el partenaire perfecto para Silvestre. Se puede notar esa conexión y tensión sexual que ponen esa pizca de picante en la serie. Con respecto a los secundarios, Daryl Hannah esta espléndida como Angelica Turing y lo bueno es percibir una mayor profundización en su personaje y ver a la actriz desarrollar su interpretación de una forma diferente a lo que se pudo ver en la primera temporada.

Mejora como el buen vino

La riqueza de las tramas hace que se vea que todavía hay mucho que contar de los sensates y hay giros de guion que provocan realmente sorpresa en el espectador. Es verdad que en el primer episodio es más un episodio de reencuentro con el público, pero incluso en este ya ocurren cosas que serán vitales para el transcurso de la temporada. La calidad de los guiones hace que la espera haya merecido la pena, siguen viéndose las razones por las que ya en la primera temporada fue considerada una de las series de Netflix más destacadas. Lo que le diferencia de la primera entrega de episodios es que han elevado el nivel de misterios y de suspense y esto es fantástico. La forma en la que se han innovado y ha dado pie a las nuevas tramas está muy conseguido.

A nivel técnico volvemos a encontrarnos con una serie muy cuidada con la imagen y el sonido. Es alucinante cómo se cuida cada detalle y lo impresionante que es poder ver los diferentes lugares de rodaje que ha recorrido la serie. Ya en la primera temporada se vio este cuidado en la imagen y es algo que, por suerte, se ha seguido manteniendo. La fotografía es espectacular y junto con la dirección artística eleva a 'Sense8' a una serie de ciencia ficción y thriller visualmente muy enriquecida. La utilización de exteriores es lo que también le dota de mayor realismo, al igual que haber un número variado de localizaciones. No se puede negar que el sello de Netflix en estos casos sea impecable. Es algo que se ha ido repitiendo en la mayor parte de sus ficciones originales y que, sin duda, el espectador agradece enormemente.

Para terminar, la segunda temporada de 'Sense8' como ya adelantaba el episodio de Navidad llega con mucha acción, drama, misterio, thriller y, cómo no, sensualidad, sentimientos y amor. Lana Wachowski, junto a J. Michael Straczynski, ha sabido llevar por un buen camino la nueva tanda de episodios de los sensates. Los giros de guion y la introducción de nuevos elementos hace que la ficción de Netflix avance de una forma enriquecida. Queda 'Sense8' para rato y se puede percibir en la forma en la que se ha encaminado tanto al grupo protagonista como a todos los personajes secundarios que le rodean. Todavía no se puede decir si es mejor que la primera, pero lo que queda claro es que está al nivel de ella y que todavía hay mucho que contar. Esperemos que tenga la misma, o mayor, recepción que tuvo la primera temporada de 'Sense8'. Una serie de ciencia ficción con una calidad estupenda.