No hay día en el que los concursantes de 'Supervivientes' no se echen los trastos a la cabeza. Las discusiones están siempre presentes en los tres bandos. La convivencia en la isla no es nada fácil y hasta los más tranquilos no pueden evitar sacar las garras en algún momento. En esta ocasión, José Luis y Leticia Sabater se han convertido en los protagonistas de una nueva polémica generada en torno a las nominaciones.
José Luis y Leticia Sabater en 'Supervivientes'
Cuando José Luis enseñó a cámara el cartel con su nominado de la semana, Leticia se quedó perpleja al leer y escuchar su nombre. Sabater, como todos los concursantes, ya tenía escrito el nombre de la persona a la que iba a nominar pero, en ese momento, decidió cambiarlo por el de José Luis. Ya en la Palapa, la tensión fue apoderándose del ambiente.
"Déjame en paz, no tengo nada que hablar contigo, traidor", gritó Leticia dirigiéndose a su nuevo enemigo. José Luis no se cortó ni un pelo en afirmar que ella le había intentado manipular pidiéndole que votara en contra de Janet. Cuando la que participó en 'Quiero ser monja' escuchó esas palabras, el gesto de su cara tornó en sorpresa y no dudó en preguntar a sus compañeros por la veracidad del comentario. José Luis buscó el apoyo de Eliad, que prefirió no mentir y reconocer que había sido el propio exconcursante de 'MasterChef' el que había pedido la nominación de Janet.
Del amor al odio
Mientras se subían todos a la barca para regresar a su playa, Eliad reiteró su decepción con José Luis por las mentiras que estaba soltando por la boca. Una vez en tierra firme, Leticia lanzó otro órdago al de Albacete: "Te voy a pegar una hostia cualquier día que vas a salir volando" y, sin pelos en la lengua, gritó a los cuatro vientos: "Tus mentiras me las paso yo por las pelotas, gilipollas".
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"Vete por ahí, enséñale las tetas por ahí a toda la isla, que es lo único que sabes hacer", le reprochó José Luis a la cantante de "Toma pepinazo", que no dudó en ponerle los puntos sobre las íes: "Enseño las tetas cuando me da la gana, chaval. Tú bien que miraste estando casado. Tanto casado y tanto casado y bien que miraste". Hace unos días tonteando y ahora en guerra. Va a ser verdad eso de que del amor al odio hay un paso.