A pesar de sus mediocres resultados, NBC ha sorprendido anunciando la renovación de 'Taken' por una segunda temporada. La precuela de la saga de films de Luc Besson protagonizada por Liam Neeson tendrá una nueva tanda de dieciséis episodios, seis más que la primera.
Clive Standen en 'Taken'
'Taken' debutó el pasado mes de febrero con un total de 7,5 millones de espectadores y un 1,6 en demográficos, por debajo de 'Timeless', la serie a la que sustituyó, aún teniendo a 'The Voice' como apoyo. El promedio de su primera temporada fue de 5,3 millones de espectadores y 1.1, prácticamente a la par en demográficos de las otras debutantes 'Timeless' o 'Chicago Justice' y por encima de 'The Blacklist', 'Blindspot', 'Shades of Blue' y 'The Blacklist: Redemption'.
Alex Cary ('Homeland'), quién desarrolló el proyecto de adaptación a la televisión y sirvió de productor ejecutivo y 'showrunner' de 'Taken' durante su primera temporada, no formará parte de la nueva temporada, aunque todavía no se sabe quién ocupará su lugar. Se espera que el nuevo responsable de la serie le de un giro e introduzca elementos procedimentales en la línea de otros dramas como 'The Blacklist' o 'Blindspot'.
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Así es 'Taken'
Clive Standen, conocido por su papel de Rollo en 'Vikings', encarna a una versión joven de Green Beret, el personaje que popularició Neeson, que ve como su mundo se derrumba después de sufrir una dura tragedia personal. Mientras lucha por superar el trauma del incidente, Mills es empujado hacia una carrera como operativo de la CIA, un trabajo que le despierta sus aptitudes más peligrosas.