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Donald Trump sabe en qué invierte sus esfuerzos, y si tantas veces ha criticado a 'Saturday Night Live' por las parodias que de él se hacen, es porque el programa tiene capacidad suficiente como para desprestigiarle. Pero además de las quejas del presidente, hay otro detalle que pone de relieve la segunda edad de oro que está viviendo la comedia más veterana de la NBC: los índices de audiencia.
Imitación de Donald Trump y Vladimir Putin en 'Saturday Night Live'
El programa más visto
Su telegenia, su impulsividad, su descaro, su lenguaje no verbal... incluso su aspecto físico, son elementos que lo convierten en el blanco perfecto de las imitaciones, y esa es la base sobre la que se levanta 'Saturday Night Live': parodia, ironía, sarcasmo, sátira y mucho talento en las imitaciones, a cargo del actor Alec Baldwin. Esa es la clave para poder aprovechar el filón que representa Trump.
La combinación de todo lo anterior se dio el pasado mes de enero. Se emitió entonces un sketch navideño en el que el presidente ruso, Vladimir Putin, entraba en casa de Trump descolgándose por la chimenea, como si fuera Papá Noel. Y como él, trajo un saco de regalos para obsequiar al nuevo presidente estadounidense, que acababa de nombrar secretario de Estado al responsable de la petrolera Exxon Mobile, un empresario muy amigo de Putin. En el sketch, Trump se disculpaba por no poder corresponder a tanto obsequio, pero el presidente ruso le dejó claro Trump ya había hecho todo lo que tenía que hacer: "El regalo eres tú". Casi 11 millones de personas vieron aquel capítulo de 'Saturday Night Live', y las críticas del presidente fueron en aumento.