Rakel, ganadora de la cuarta edición de 'Top Chef': "Esto ha sido mi estrella Michelín. Es flipante y brutal"

Después de numerosas galas, platos complicados y pruebas llenas de tensión, la cuarta edición de 'Top Chef' llegaba a su fin. El 17 de mayo fue el día elegido para coronar a Rakel como la ganadora de la temporada. Ha sido un duelo muy reñido frente a Víctor en el que la cocinera ha salido victoriosa gracias a los votos de los 25 espectadores invitados a una cata a ciegas.

La tensión ha estado presente durante todo el cocinado en el grupo de Rakel pues parecía que el tiempo no era suficiente nunca. Al final, ha conseguido conquistar con su entrante y su postre: "hemos ganado, esto es flipante y brutal. El ganar supone que las cosas pueden ser reales, que lo que hago está bien y que, de aquí, a por más cosas". Después de todo el estrés, tocaba el momento de la felicidad y los agradecimientos: "Muchísimas gracias. Esto ha sido mi estrella Michelín".

La victoria parece haberle sabido mejor después de lo poco conforme que estaba con su elaboración dulce y lo justa que había emplatado. Una vez más, el carácter de la cocinera fluyó y se mostró muy nerviosa. Ya con todo terminado, quiso agradecer, sobre todo al jurado, la paciencia que le habían mostrado: "gracias a todos. Disculpadme porque sé que os he hecho sufrir".

Me dieron el pase directo a la final 14 Estrellas Michelín. Me da la victoria un jurado popular. Democratización de la cocina. GRACIAS ? pic.twitter.com/n5Xqqt78De

? Rakel Top Chef (@rakelkarak) 17 de mayo de 2017

Víctor: "No considero haber fracasado"

La otra cara de la final fue Víctor, el concursante de 'Top Chef' que quedó en segunda posición. El cocinero, apenado por no haberse llevado el título, difícilmente pudo expresar lo que sentía en ese momento tras quedarse a un pasito del éxito: "no considero haber fracasado, mi plato es bueno. La realidad es como es y hay que asumirla y aceptarla. Ganar delante de mis padres hubiera sido lo máximo".

A diferencia de su compañera, que se mostró muy insegura en el cocinado, Víctor tuvo claro desde el principio que sus platos podrían hacerse con el título: "me veo ganador, he hecho una cocina, cocina, y no ensamblaje". El apoyo y el calor de sus compañeros, al igual que de los familiares, presentes en el evento no fueron suficientes y sus elaboraciones quedaron por detrás de la que fue, hasta el momento, su máximo rival a batir.