Telecinco y su gran apuesta por los formatos musicales: pros y contra de su estrategia

Es innegable que el entretenimiento es el género estrella de la parrilla de Telecinco. La cadena liderada por Paolo Vasile tiene infinidad de formatos de este tipo y ha decidido crear su propio modelo televisivo alrededor de ellos. En su parrilla destacan especialmente los talent shows, un tipo de formato que en los últimos meses está ganando gran presencia en su prime time. ¿Por qué? ¿Es casualidad esta apuesta? ¿Es necesario seguir lanzando formatos de este tipo? Hoy en FormulaTV analizamos las razones de esta firme apuesta y las posibles consecuencias de la misma.

'Factor X', el último "fichaje" musical

Sin duda la música ha conquistado por completo la programación de Telecinco, por ello poco sorprende que la cadena haya decidido adquirir un nuevo formato de talentos que llegará en unos meses, 'Factor X'. El programa regresa a nuestro país aunque no lo hará en Cuatro, como en sus dos primeras ediciones, será una firme apuesta de la cadena principal del grupo. De esta forma, se unirá a 'La Voz' y 'La Voz Kids', los otros grandes programas de música. Pero, ¿Realmente es necesario un programa musical más?

¿Por qué comprar 'Factor X'?

Hay varias razones que podrían justificar esta compra. Por un lado, evitar que el formato caiga en manos de la competencia. ¿Qué pasaría si Antena 3 comprase 'Factor X' y lo enfrentase a 'La Voz'? Sí, podría ser algo totalmente perjudicial para Telecinco. Quizá lo mejor es hacerse con el formato, potenciarlo internamente y a la vez complementar la apuesta musical de 'La Voz', ofrecerle una alternativa... dentro de la misma cadena.

¿Rotación con 'La Voz'?

Otra posible razón sería el dar descanso al formato que protagonizan Malú, Juanes, Manuel Carrasco y Pablo López. Cuenta con dos ediciones anuales (una de adultos y otra infantil) y por ello podría ser interesante contar con 'Factor X' para rotar ambos programas. Ninguno de los dos se desgastaría, se evitaría que la audiencia acabase agotada y se enriquecería el prime time de la cadena con rostros distintos. El problema vendrá si la intención es encadenarlos ya que el público podría acabar cansado de ver tres programas de música de forma consecutiva en una misma temporada, podría ser totalmente perjudicial para todos.

¿Por qué los talent shows? Dan buena imagen

Muchos se preguntan la razón por la que Telecinco está decidida a apostar por el género del talent. No sorprende ya que es un tipo de programa muy familiar, que consigue reunir a público de todas las edades, los targets son muy variados y sí, publicitariamente hablando, eso es muy importante. Es algo que no sucede con apuestas como 'Sálvame' o 'GH' que están mucho más limitadas, aunque sean también muy rentables publicitariamente hablando.

Además, para una cadena como Telecinco también es importante destacar que formatos musicales como estos dan una imagen muy positiva a la cadena, se rebaja el tono de agresividad que podemos encontrar en otros programas, son apuestas que se alejan del conflicto y que consiguen transmitir una sensación positiva a la audiencia. Aunque pueda parecer algo sin importante, sí, la tiene, es vital cuidar la marca y con programas así que funcionan y no "manchan" la parrilla encontramos una solución perfecta.

La música funciona en Telecinco

Más allá de la imagen es vital la audiencia y sí, 'La Voz', 'La Voz Kids' y 'Got Talent España' cumplen con creces en este aspecto. La edición de adultos logró en su cuarta edición una buena media del 24,1% y 3 millones de espectadores mientras que la infantil ha logró en su última tanda un 22,9 y 3.129.000 espectadores. Por otro lado, el formato de talentos presidido por Santi Millán anotó en su última edición un 25,7% de cuota media y 2,8 millones de espectadores. Sí, son datos especialmente positivos que mejoran incluso cuando hablamos de Target Comercial, por ello no sorprende que se siga apostando por ellos, funcionan muy bien, ocupan todo un prime time y además generan mucho contenido en la web y redes de la cadena.

¿La audiencia se cansa de los realities?

Apostando por el género musical, Telecinco está empezando a dejar de depender de los reality shows. Temporadas atrás, este tipo de formato era vital en su parrilla pero poco a poco ha dejado de tener tanto peso, a excepción de 'Supervivientes' que sí tiene gran presencia gracias al alto rendimiento que a día de hoy sigue demostrando. 'Gran Hermano' y 'GH VIP' sí han dejado de tener tanta importancia y tampoco son vitales en el resto de magacines de la cadena; a día de hoy, Telecinco sí podría sobrevivir perfectamente sin este tipo de programas.

Por ello es inteligente que se haya logrado encontrar un recambio que además permita crear imagen de cadena, logrando que la audiencia identifique a los talent shows con Telecinco, al igual que sucede con Antena 3 que ha conseguido que el pública que busca series de calidad acuda a ellos para comprobar cómo son sus apuestas. Publicitariamente hablado es vital marcar este punto diferencial respecto a la competencia.

¿Y si el público se cansa de los talent shows?

Parece que son todo ventajas, pero no... esta firme apuesta por la música podría también tener consecuencias negativas. Es imposible estar encontrando nuevo talento durante muchos años consecutivos y con tantos programas en activo. Es posible que la generación de nuevos artistas que quieren dar el salto a la música a través de televisión se acabe agotando de una forma u otra. ¿Acabaremos viendo a las mismas personas pasar de un programa a otro? ¿Encontraremos al mismo perfil de concursante en todos los programas?

Por otro lado, el encadenar tantos formatos musicales también podría llegar a agotar a la audiencia, al igual que sucede con los realities. Quizás sería mucho más interesante contar con entretenimiento más variado y rotar el tipo de programas a lo largo de la temporada. ¿No sería inteligente reservar un trimestre, otro a la música y uno final a otro tipo de género? Sería quizás lo más lógico para "cuidar" un tipo de formato que es muy valioso pero que corre el riesgo de morir de éxito.