JUSTICIA

Charlie Sheen ('Dos hombres y medio') es denunciado por una exnovia por exponerla al VIH

No es la primera vez que el actor se enfrenta a una demanda de este tipo tras su confesión en 2015.

Por Xavi Gallart El 24 de Junio 2017 | 16:32

Una nueva polémica ha rodeado al actor Charlie Sheen. El protagonista de 'Dos hombres y medio' ha sido otra vez demandado por exponer a una mujer al VIH. Pese a que el nombre de la mujer se desconoce, sí que han trascendido detalles del proceso judicial que no dejan al actor en muy bien lugar. Al parecer Sheen expuso deliberadamente a la mujer a la enfermedad durante varios encuentros sexuales en 2015, tal y como fuentes policiales han apuntado a medios de comunicación estadounidenses.

Charlie Sheen durante su confesión pública

Pese a que no se conoce quién es ella, de momento es referida como Jane Doe en los documentos, aunque lo que sí se sabe que es una inmigrante rusa. La chica ha declarado que el actor primero le dijo que no era portador de ninguna enfermedad de transmisión sexual, para luego más tarde confesárselo. Al parecer, tras el encuentro sexual sin protección, Sheen le dio dos pastillas que actuarían para prevenir el contagio.

Tras esto, la desconocida acudió rápidamente al médico para tomarse el tratamiento antirretroviral. Charlie en vez de disculparse la culpó a ella por exponerse y como "consejo" le dijo que dejará de tomar las medicinas ya que, según él, "era innecesario". Pero no sólo eso, si no que si no le había dicho nada antes era porque "no era de su incumbencia". En los documentos judiciales también aparecen otros comentarios reprobables de índole racista.

Antecedentes

En 2015 su exprometida, Scottine Ross, también denunció al actor por un motivo similar. Al parecer Sheen había mentido sobre su enfermedad a su pareja, lo cual podría haber ocasionado un contagio. Scottine también comentó durante su juicio que el actor le obligó a abortar durante el periodo que estuvieron juntos. Una imagen la de Charlie Sheen que se aleja de la de mujeriego simpático y cobra tintes más oscuros y desagradables.