CRÍTICA

'Lolita tiene un plan' necesario para TVE en el que la naturalidad es la clave

El nuevo formato de TVE y Gestmusic acierta en su estreno con un programa interesante, dinámico y diferencial respecto a la competencia.

Por Cristian Quijorna El 8 de Agosto 2017 | 12:22

Era complicado, parecía imposible y posiblemente pocos apostaban por ello pero sí, Televisión Española esta vez sí lo ha conseguido, el plan que llevaba meses ideando con Lolita Flores es efectivo, gusta y tiene todos los ingredientes para enganchar al espectador habitual de la cadena pública. 'Lolita tiene un plan' acierta en su estreno; se ha logrado conseguir un producto de calidad, entretenido, dinámico y que convence mucho.

'Lolita tiene un plan', nueva apuesta de La 1

Hay decenas de programas de entrevistas, los hay ahora y los ha habido siempre, no nos engañemos. Este es un género clásico, que funciona y que a día de hoy encaja muy bien en la parrilla de todas las cadenas ya que aporta buena imagen, es sencillo de programar y puede ofrecer mucha visibilidad frente a otros medios o en redes sociales. Pero precisamente ese es su gran inconveniente: a día de hoy es muy complicado lograr que un producto nuevo destaque, no pase desapercibido y ofrezca algo diferente el espectador, que no sea una versión más.

Este riesgo es precisamente el que corrían Gestmusic y TVE; se arriesgaban a caer en clichés clásicos del género, a parecerse demasiado a programas de la competencia o a acabar creando un producto desfasado pero no, no lo han hecho, han logrado un programa sencillo pero efectivo, que engancha, que aporta naturalidad, frescura y que sí tiene una marcada diferencia respecto al resto. Es más que un simple programa de verano.

Se consigue lo difícil: naturalidad

Es muy complicado lograr naturalidad en un formato como este; es habitual que se perciba claramente el guion o las pautas marcadas previamente pero 'Lolita tiene un plan' escapa de ello y se diferencia. Posiblemente esa es su gran baza: la naturalidad que desprende. El espectador sí tiene la sensación de estar viendo una conversación entre amigas en la que las preguntas fluyen, donde se cambia de tema de forma natural, en el que sí hay una complicidad real. La buena relación entre Lolita y sus invitadas posiblemente ayude a ello, se les ve cómodas, relajadas y muy abiertas a conversar.

Además del tono, 'Lolita tiene un plan' acierta también con el ritmo. Lejos de apostar por una edición demasiado marcada que puede provocar que se pierda la magia de la conversación, el formato tiene un ritmo perfecto, sin prisa pero sin pausa. Logra atrapar al espectador, le mantiene pendiente de todo lo dice pero deja el tiempo necesario para disfrutar de la conversación, no hay miedo a la pausa, al silencio, a las miradas y sí, eso es un acierto, es necesario y poco común en la televisión de hoy en día.

Lolita Flores, Adriana Ugarte, Cayetana Guillén Cuervo y ola Herrera

Lolita es la anfitriona perfecta

Son varias las generaciones que la conocen y posiblemente en todas tiene seguidores. En los últimos años la hemos descubierto como animal televisivo y sí, Lolita funciona mucho en televisión. Su elección aquí obviamente no es casual y sin duda es el gran acierto del formato. Este es posiblemente un programa perfecto para ella, hecho a su medida, en el que se ve que está cómoda, donde lleva las riendas de una forma natural, donde no se percibe guion y donde logra transmitir tranquilidad y naturalidad, algo importante para la audiencia.

Siguiendo la estela de 'Tu cara me suena', Lolita es la persona perfecta para contar decenas de anécdotas, charlar relajadamente, ejercer de entrevistadora, cantar y sobre todo ser natural. Lolita gusta y aquí cumple su papel con creces, sabe dar juego, divertir y emocionar. Acierta no siendo la gran protagonista del programa, deja que sean los invitados el auténtico centro del formato. Sabe guiar muy bien la conversación y lo hace de una forma natural. Posiblemente sin ella el programa no sería ni tan efectivo ni tan dinámico.

La clave de su futuro éxito: los invitados

En un programa como este, está claro que los invitados son un factor decisivo para su éxito. El interés que generen y el feeling que tengan con Lolita son vitales para que el programa sea interesante, entretenido y enganche al espectador. Además, cabe recordar que en 'Lolita tiene un plan' se reúne a varias personas que tienen algo en común, de forma que el riesgo se multiplica; si no hay sintonía entre ellos, el programa puede ser un auténtico desastre. La selección de entrevistados es sin duda muy importante y en su estreno se acierta completamente.

Lola Herrera, Adriana Ugarte y Cayetana Guilllén Cuervo; tres grandes actrices de tres generaciones muy diferentes fueron las invitadas por Lolita en el primer programa. A priori pueden no tener mucho en común pero unirlas es todo un acierto. Conocen sus respectivos trabajos, tienen temas en común y todas cuentan con infinidad de anécdotas que contar, momentos que al resto les sonarán o que vivirán en un futuro. Los consejos, las risas y las bromas fueron habituales durante todo el programa, la complicidad era evidente y se logró que sí pareciese una conversación entre amigas. Los juegos que Lolita planteó y hasta la visita de Edu Soto para cantar temas musicales relacionados con las vidas de cada una de ellas ayudó a crear un clima de naturalidad y tranquilidad que sí encaja en un programa así. Porque en 'Lolita tiene un plan' no buscamos entrevistas duras y complicadas, se busca complicidad.

Edu Soto fue el invitado estrella del primer programa

Por otro lado, tratándose de un programa destino al verano, posiblemente sí hubiese sido un acierto realizar todas las entrevistas en el exterior, transmitiendo vitalidad, luz, demostrando que en España hay muy buen tiempo en verano y que hay infinidad de lugares diferentes en los que charlar. Eso hubiese aportado naturalidad y habría encajado perfectamente con el tono del formato.

Conclusiones: 'Lolita tiene un plan' es un claro sí

Sin duda, el nuevo programa de Lolita Flores es todo un acierto, es un claro sí. Un ritmo ágil pero donde se deja respirar, donde se disfruta de televisión es su gran baza, lo es junto a Lolita Flores. La cantante disfruta de su papel, sabe jugar y lleva perfectamente las riendas del formato. Un acierto es también el tono, distendido y natural, además de las invitadas elegidas, que aportan, dan juego y marcan la diferencia. Esta vez sí, 'Lolita es un plan' es aire fresco, es necesario en una cadena pública como TVE donde hay que ir más allá, donde hay que hacer televisión de calidad.