Antonio, un comensal de 'First Dates', acudía a su cita presentándose de una manera peculiar: "Soy un pichabrava porque puedo, porque tengo esta cara guapa". Tiene 21 años y se considera un chico "auto-elevado y nada reservado", aunque si tuviera que destacar algo de sí mismo sería su belleza: "Espejo que veo, espejo que me miro" y su perfección: "Soy perfecto, sí, y si hay algo que no está bien, me lo retoco". Sin embargo, acude al programa porque nunca ha tenido una relación formal.
Antonio, un comensal de 'First Dates'
El comensal admitía que su vida sentimental ha estado orientada a ir "de flor en flor", pero ahora quiere algo más serio. Sin embargo, lo primero que se necesita en la vida para llevar a cabo algo es la actitud, un elemento que a él no le falta: "Ante todo tengo que pensar que yo puedo, y puedo porque tengo esta cara". De esta forma, Antonio dejaba clara la importancia que para él supone el aspecto físico de una persona. Por suerte, su compañero de mesa le entró por los ojos y la cita avanzó exitosamente.
Vestidos con un pantalón roto blanco, Antonio Jesús y Antonio observaron que tenían demasiadas coincidencias, como la edad, el nombre, la comunidad autónoma y, por supuesto, el pantalón. Tanto es así, que la cita fue avanzando a grandes pasos. En la llegada al postre, Antonio se mostraba seguro de haberle gustado a su compañero, a quien besó tras comenzar el juego de las bolas del programa. Esto les motivó a ambos a querer verse una segunda vez.
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"Me ha tocado la lotería"
El ego con el que Antonio entraba en el restaurante ha sido el mismo que ha utilizado no solo durante la cita sino también al finalizarla con Antonio Jesús: "Di que realmente me ha gustado el chaval, me ha puesto muy cachondo y he tocado el cielo con las manos sin tocarlo". Obedeciendo al comensal, Antonio Jesús ha repetido las palabras de Antonio diciendo que le "ha tocado la lotería", por lo que ambos han quedado satisfechos y con el autoestima por las nubes.