Parece que los exteriores no traen buena suerte a los concursantes de la segunda edición de 'MasterChef Celebrity'. El programa del 31 de octubre les trasladó hasta Asturias y su comida más tradicional y el caos invadió las cocinas como sucedió en las primeras entregas. De hecho Pepe Rodríguez Rey reconoció que "hacia tiempo que no estaba tan decepcionado".
Edu Soto, Saúl Craviotto y Bibiana Fernández en el exterior asturiano de 'MCCelebrity 2'
Ninguno de los dos equipos, ni el capitaneado por Patricia Montero ni el de Saúl Craviotto, consiguió hacer un solo plato que estuviera al nivel. El jurado no podía estar más descontento y, como Jordi Cruz Mas resaltó, "programa 7 y esto es imperdonable". Ni los cachopos, ni la fabada, ni nada de lo que se les pidió terminó de gustar y el descontrol que tuvieron les costó ir a la prueba de eliminación a todos: "ha sido uno de los cocinados más desastrosos, delantales negros para todos".
Y lejos de salvar a un concursante como en otras ocasiones, no fueron capaces. Haciendo autocrítica José Corbacho no podía evitar asumir que "después de lo que hemos hecho no sé cómo no nos han echado, gracias por la segunda oportunidad". Su capitana, por otro lado, asumió lo que ella consideraba que había sido una responsabilidad mal cumplida: "ha sido un desastre y estábamos desbordados".
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Edu Soto, el "menos malo" con ventaja
Dentro de lo malo, hubo un concursante que destacó sobre el resto por su incansable hacer en la prueba. Ese fue Edu Soto que, como premio, recibiría una ventaja muy destacada en la prueba de eliminación: salvar a alguien de que cocinara y que, por lo tanto, se salvara. Antes de decidir que sería él mismo quien la disfrutara, agradeció las palabras del jurado: "ser el menos malo es un consuelo de tontos, pero por lo menos han visto que no he parado".